Ahora que todo ha terminado, Luzbel no está exactamente seguro de cómo fue su nacimiento, pero cree haber escuchado una voz que le dijo que era y que su mera presencia irradiaba luz.
"Eres hermoso."
Quizás simplemente se la imagina porque no le agrada darse cuenta de que no sabe algo.
Lo que sí tiene muy presente es la primera vez que su padre le dijo que lo quería, ya que en ese momento pensó que claramente merecía ser querido.
Él era el más hermoso, el más especial de todos.
Y así como recuerda eso, también tiene otro instante inmortalizado en mente: la primera ocasión en que sintió envidia. Y todo por culpa del Creador, que dio vida a las estrellas, y quería otros ángeles...
"Me diste la vida, estaré eternamente agradecido, pero soy y siempre seré tu primera creación, la más perfecta... No te atrevas a ignorarme."
El Creador le aseguró que no debía preocuparse, mas no debía comportarse de tal manera, ya que no era digna de un arcángel de la Corte Celestial... quizás era la Corte Celestial la que no era digna de él.
"Y te lo probaré, Creador."
#31576 en Otros
#10102 en Relatos cortos
#22742 en Fantasía
#9094 en Personajes sobrenaturales
Editado: 23.10.2018