—Linda, déjame hacer drama, ¡tenía mucho tiempo sin verte! Casi no sobrevivo sin ti. —Me abraza con fuerza y luego aplasta mis mejillas—, ¡fue una agonía!
—Pero Josh, nos vimos ayer en la merienda. —Río por sus ocurrencias—, pero también te extrañé, no te preocupes.
—¿Te ríes de mí? Bien, Mely. Esta relación acabó, ha llegado su fin, game over, ¿capisci? —Mueve las manos exageradamente y posteriormente me abraza—, fue un placer haber compartido tantos momentos contigo.
—¡Mister grititos, cállate! No seas exagerado, eres único e irremplazable, ¿bien? Pero ya basta de drama, tenemos que ir a clase.
—Melody, Melody, Melody, ¿por qué no puedo ser un novio celoso? —Cuestiona, como muchas otras veces— Soy tu mejor amigo, y como bien dijiste, único e irremplazable, deberías ser más amable conmigo, no todas las chicas tienen la suerte de tener a alguien como yo en sus vidas. Aprovecha, linda, aprovecha.
Paso mi brazo por sus hombros lo que hace que tenga que agacharse, él es mucho más alto que yo.
—Josh, Josh, Josh, yo aprovecho y créeme que te valoro, pero si no detienes tu drama justo ahora llegar tarde a clases será el menor de tus problemas —sonrío y le doy un beso en la mejilla—, ¿entiendes lo que digo, mi amor?
Él asiente y sonríe, tal vez podamos llegar medianamente temprano a clases.
❁
Después de una gran dosis de estudio y alguna que otra sesión de chismes con Josh, al fin llegó la hora del almuerzo.
Ya venía siendo tiempo, tengo hambre desde hace horas, y es que últimamente, a pesar de comer adecuadamente, tengo ataques de hambre constantes.
—Tengo mucha hambre. —Me quejo— ¿Dioses, están ahí? Alimenten a esta pobre alma en pena.
—Invocamos, desde este plano, un gran plato de comida, lo que sea pero que esté bueno. —Josh sube los brazos al cielo, como si de verdad estuvieras invocando comida— Carajo, de verdad tengo hambre, estoy seguro de que si no…
❁
—¿Mely? Despierta, linda, por favor. —Escucho en la lejanía el susurro de una voz conocida—, por favor, no me asustes así ¿qué te pasa? Dios, no puede pasarte nada, tus padres van a matarme si algo te pasa, y luego yo voy a matarte porque soy muy joven para morir, no me hagas esto, ¿si? Despierta.
Antes de poder abrir los ojos, vuelvo a entrar en la oscuridad.
❁
—¿Por qué no despierta? Dele algo, sino voy a tener que llamar a sus padres, la verdad me sorprende que todavía no estén aquí —suspira—, sí, debería llamarlos, o al menos a su tío, después de todo, es el que más cerca está.
—No creo que sea necesario, solo se desmayó por falta de energía, quizá ha estado comiendo mal, puede tener las defensas bajas pero para saberlo con exactitud tendría que hacer más estudios.
—¿Y qué espera? Haga los estudios, ¡yo le pago si hay que hacerlo! —Exclama quién ahora sé que es Josh, debí saberlo.
—Eso, eso no va a ser necesario, mister grititos, estoy bien. —Murmuro— Solo me desmayé, tranquilo.
—¡Ay, linda, estaba muy preocupado, casi llamo a tus padres o peor, a tu tío! —Niega para sí mismo— Eso habría sido una locura, sabes como son contigo, Mely.
—Ya no hace falta, más tarde les contamos, no te preocupes.
—¡Mel, cariño! ¿Qué te pasó? ¿Estás embarazada? —Una chica entra corriendo a lo que ahora sé que es la enfermería del instituto— Tienes todo mi apoyo, ¿cuántos son, dos, cuatro? —¿Qué Demonios? ¿Embarazada? Ni porque me pagaran— Maritza se va a morir cuando le cuente, vas a ser la comidilla del insti, yo me encargo.
—¡Tiffany, por todo lo bueno! Cállate, no estoy embarazada ¿de donde carajo sacaste eso? ¿Y qué demonios haces aquí? —Cuestiono, con evidente indignación—, retírate, quiero estar con Josh, a solas.
—¡Que grosera! —Rueda los ojos—, sé que no quieres que nadie se entere, tranquila, no debes preocuparte, yo haré que todos lo sepan, ¡de nada, corazón! —sonríe y se acerca a la puerta para irse—, Joshi, guapo, si no quieres hacerte cargo de las criaturas —le guiña un ojo y dice—: yo estoy aquí, bombón.
¿Eh? ¿De dónde sacó tantas falacias? Como si pudiera estar embarazada y encima, de Josh, no hay cosa más improbable que esa. Ella no está más loca porque bien podría superar los límites impuestos por la creación.
Es una locura, ¿yo, embarazada? Solo a ella podría ocurrírsele semejante estupidez.
Sé que no me soporta, lo nuestro es totalmente mutuo, la diferencia es que mientras yo trato de evitarla ella se esfuerza por cruzarse en mi camino, justo como acaba de suceder. Josh y yo pensamos que su odio injustificado es por la cercanía que hay entre él y yo, bien pueden confundirnos con una pareja y eso a ella la carcome, a pesar de que Josh y yo solo somos mejores amigos. Y lo sabe, no es cercana a nosotros, pero sabe que no somos pareja, le hemos dicho pero ella se niega a aceptarlo.
Josh no es mi tipo y obviamente yo tampoco soy el suyo, es mi alma gemela, sí, pero nuestro amor no es nada más que fraternal.
—¿Qué acaba de pasar? —Inquiere Josh, con la sorpresa grabada en su rostro—, eso ha sido escalofriante, me dijo bombón, que asco. Me llamó Joshi, sabes que odio que me diga Joshi, suena sucio cuando ella lo dice —un escalofrío pasa por su cuerpo.