Capítulo 25

Narradora

En el quirófano del hospital Lucy era atendida, debían detener el sangrado de su cabeza y hacerle una operación al ver que una de sus costillas había perforado su riñón así que debían operarla para evitar alguna hemorragia interna y conseguir a un donante compatible para ella.

Fuera del quirófano se encontraban varias personas preocupadas por la chica, entre ellos estaban su padre, su mejor amiga, su amigo pelinegro y su pareja, todos estaban angustiados y preocupados por las noticias que le dieran de ella.

Habían pasado ya unas horas desde que estaban esperando alguna noticia sobre el estado de la joven Heartfilia, en eso ven que uno de los doctores que atendieron a Lucy salía con unos papeles en mano leyendo unas cuantas cosas, levanta su mirada viendo a todas las personas y suspiro leve antes de hablar.

-¿Familiares de la señorita Heartfilia?- Observo a los presentes unos momentos hasta que dos se les acercaron.

-Soy su padre...- Jude vio al doctor preocupado por su hija.

-Y yo su novio... ¿Cómo se encuentra ella Doctor?- Sting por otro lado tenía una expresión de pánico por lo que pudiera pasarle a su novia.

-En estos momentos logramos estabilizarla...pero ella necesita que le hagamos un trasplante de un riñón ya que una de sus costillas rotas lo perforó...usted siendo su padre tiene que decidir por ella aun siendo menor de edad, ella puede vivir con uno pero no sería lo mismo que antes...- El hombre suspiro levemente viendo a Jude.

-Hagan el trasplante...quiero que mi pequeña se recupere por completo...- Miro a la cara al doctor decidido a que Lucy tuviera una vida normal.

-De acuerdo...pero hay otra cuestión más que deben saber...- Observo los papeles que tenía en sus manos.

-¿Cual es doctor?- Sting miro al hombre frunciendo leve el ceño por lo que fuera a decirle.

-No tenemos un donante compatible con ella...y debemos saber si algún familiar está dispuesto a donar uno de sus riñones si llega a ser compatible con ella- Levanto la mirada observando a los dos hombres que tenía en frente suyo. Sting y Jude se miraron mutuamente para luego quedarse callados unos momentos hasta que el padre de Lucy hablo primero.

-Seré el donante...soy compatible con ella y quiero que mi hija se salve y tenga una vida normal...después de todo, esta será mi forma de disculparme por mi forma de tratarla todos estos años...- Murmuro lo último para sí mismo sintiendo que esa sería una pequeña oportunidad para arreglar algo.

-Jude... ¿Está seguro? Yo podría ver si soy compatible y...- Sting se detuvo cuando vio la mirada decidida que tenía el hombre.

-Más que nunca...doctor, por favor...colóquele uno de mis riñones a mi hija...- Jude observo al doctor quien asintió leve para así voltearse dándole la espalda.

-Muy bien señor, sígame por aquí así podemos prepararlo para la cirugía- Jude asintió comenzando a caminar detrás del hombre, estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario para salvar a su hija, así que en ese momento iba a darle uno de sus órganos para que ella pueda tener una vida tranquila y normal ante todo.

Unas cuantas horas después

Ya habían acabado con la operación de Lucy y Jude, ahora ambos estaban en una habitación espaciosa donde descansaban, Jude estaba consciente y miraba a Lucy descansar estando conectada a un tubo de oxígeno y otros muchos cables que revisaban su estado, una intravenosa estaba en el dorso de su mano derecha. Al menos él ya sabía que su hija se recuperaría por que confiaba en que ella era fuerte y podría salir adelanté como siempre lo supo hacer por su cuenta.

Fuera de la habitación un grupo de personas estaban esperando a que el doctor les diera permiso para poder entrar a ver a padre e hija, un rubio estaba sumamente preocupado por su amada, pero sabía que ahora estaría bien aun estando en un estado delicado, pero confiaba en que ella se recuperaría ya que confiaba totalmente en eso.

Por otro lado lejos del hospital

Un peli-rosa estaba junto a una pelinegra planeando por fin algo para conseguir su objetivo, se había enterado de lo ocurrido con su preciada Luce, tenía la pequeña esperanza de que si el golpe fue lo suficientemente fuerte ella olvidaría su relación con el rubio oxigenado de Sting y aprovecharía para quedarse con su amada y evitaría que alguien la aleje de su lado otra vez.

-Oh Luce...pronto...muy pronto estaremos juntos...y seremos felices lejos de todos los que nos quieran separar...- Una sonrisa macabra apareció en su rostro al pensar aquello, su plan había cambiado a como era principalmente pero ahora iba perfectamente.

-Mi bello dragón de Luz...una vez que tu amada te olvide totalmente y se aleje de ti, tu y yo seremos felices...te juro que así será mi amor...- Ella por su parte observo el cielo sonriendo de lado al imaginar su futuro junto al Dragón Slayer, por fin podría tener su final feliz.

En ese momento en el aeropuerto

Un peli-rojo de piel bronceada estaba bajando del avión en el que llego, estaba dispuesto en buscar a su hijo, sintió un mal presentimiento sobre él desde hace tiempo, no sabía que era esa sensación pero sabía que algo se aproximaba y eso causaría muchos problemas a todos y eso incluía a su hijo.

-Eh vuelto...y solo espero que él no este cometiendo alguna estupidez otra vez...o tendré que castigarlo de la peor manera posible...de nuevo...- Dicho eso tomo su maleta y se dirigió a la salida para tomar un taxi hacia la vivienda de su hijo, a medida que se acercaba sentía que ese mal presentimiento se volvía cada vez mayor logrando causar que su piel se erizara.