Los exámenes finales de las chicas se acercaban, el final de su primer año de preparatoria estaba iniciando, ahora solo les quedaba pedirle ayuda a Seiji para estudiar
Linda: Amo… ¿Nos ayudaría a estudiar?
Seiji: ¿No deberían de hacerlo solas?
Kido: Vamos amo… ayúdenos
Litzy: Por favor
Seiji compraba cosas para su consultorio cuando las chicas le preguntaron.
Seiji: No veo por qué debería ayudarlas, soy su amo no su maestro
Litzy: Debería porque usted lee libros como si comiera galletas
Linda: Y si estudiamos con usted tendremos buenas calificaciones
Kido: Por favor
Todas suplicaban a Seiji, este le estaba por contestar cuando alguien hizo sonar el timbre de la mansión, Linda caminó a la puerta y la abrió descubriendo al otro lado a un hombre de la tercera edad acompañado de una chica de dieciséis o diecisiete años aproximadamente, esta vestida con un vestido viejo que resaltaba su delgadez, su busto relativamente grande que no era sostenido por un brasier, de una altura considerable, además de su misteriosa complexión sus ojos eran grandes y su pupila de un tono morado muy saturado.
Linda: Si, ¿En qué le puedo ayudar?
Hombre misterioso: Hola pequeña, Soy Rodrigo y busco al Dr. Seiji
Seiji escuchó su nombre y se puso de pie para caminar a la puerta.
Seiji: Soy yo, ¿Que necesita?
Rodrigo: Doctor, estoy muy agradecido con lo que usted hizo, y como le prometí, le pagaría, tengo a esta chica, es huérfana y no hay quien la cuide, pensé que usted sería el indicado para cuidar de ella
Seiji: Rodrigo, no te tendrías que haber preocupado por ello, sabes que lo hice por ayudar, no por recibir un pago
Rodrigo: Vamos doctor, cuide de ella, no tiene a nadie y no conozco a alguien más apto que usted para cuidar de ella
Seiji: La tomare solo porque usted la trajo, ¿No quiere pasar a tomar algo?
Rodrigo: No, yo solo vine a dejarle a la chica, tengo otro compromiso
Seiji: Esta bien, salúdeme a su esposa y a su hijo
Rodrigo: Gracias, ellas también le saludan, que dios lo llene de bendiciones
Seiji: Gracias
El hombre se fue y Seiji invitó a la chica a pasar, cuando esta entró a la mansión, Linda cerró la puerta.
Seiji: ¿Cuál es tu nombre?
La chica se quedó en silencio, cabizbaja y con un miedo notable en su mirada.
Linda: Es callada
Kido: Es muy linda
Litzy: Es más alta que nosotras
Seiji: No temas pequeña (dijo y puso su mano en la cabeza de la chica) no te hare daño
Chica misteriosa: No tengo nombre...
Seiji: Entonces te pondré uno, acepto sugerencias
Las chicas se pusieron a pensar en algún nombre, de repente a Litzy se le ocurrió uno.
Litzy: ¿Qué tal Kayano?
Seiji: Es lindo, ¿Qué te parece?
Kayano: Me gusta… es bonito...
Seiji: Excelente, le pediré a Rosa que haga todos tus papeles, ahora…
Kido: Nos ayudara a estudiar (interrumpió con insistencia)
Linda: Por favor amo
Seiji: ¡Esta bien!, les ayudare a estudiar, préstenle algo de ropa a Kayano para que se dé un baño y ya estudiaremos
Kayano: ¿Yo también? (preguntó confundida)
Seiji: Si, todas
Kayano: Pero… yo no asisto a la escuela…
Seiji: Y los ciclos escolares están por terminar… estudiaras con nosotras, yo me encargaré de que te acepten en una escuela
Kayano: Pero… es final de semestre… no creo que me acepten… digo… es lógica…
Seiji: Eso lo sé, vamos, algo se me ocurrirá
Seiji llamó a Rosa y como pago por la cena con la Dra. Yarenis, está registró a Kayano como un caso extraordinario, también le tramitó los papeles necesarios y si Kayano conseguía pasar un examen especial para ella, conseguiría la primaria, secundaria, primer y segundo semestre de preparatoria de una sola acción, así pues, las semanas de arduo estudio comenzaron.
Las semanas pasaron al igual que los exámenes, día tras día durante tres semanas las chicas hicieron ocho exámenes, la entrega de resultados y el ranking por grados ya era visible en el gran muro dedicado a esto.
Después de un largo viernes de entrega de calificaciones y de buscar su nombre en el ranking escolar las chicas regresaron a casa donde se encontraba Seiji arreglando su consultorio.
Linda: Ya hemos llegado
Litzy: Aquí estamos
Kayano: Ya estamos en casa
Kido: Al fin…
Seiji llevaba un escritorio al consultorio encontrándose con las chicas en la sala.
Seiji: Bienvenidas (dijo y dejo el escritorio en el suelo) ¿Cómo les fue?
Kido: A nosotras bien… sin embargo, el grupo como tal no fue una maravilla
Linda: Fue una total matanza
Litzy: Los exámenes normalmente son difíciles, pero ya que usted nos enseñó no lo fueron tanto
Kayano: Pensé que serían difíciles al nunca haber pisado una escuela… pero la verdad es que fueron algo fáciles…
Seiji: Espero que hayan salido tan bien como insinúan (dijo sentándose en el sofá) ahora denme sus calificaciones
Kayano le dio un papel con sus calificaciones a Seiji, Linda sacó su cuaderno y enseñó a Seiji la hoja donde estaban sus calificaciones y las de su gemela y Litzy le enseñó un bloc de notas en su celular, Seiji miró todas las calificaciones y concluyó que todas estaban más que bien.
Seiji: Gracias, ahora díganme qué lugar en el ranking están
Linda: En grupo ocupo el número tres y en el escolar el numero noventa y nueve
Litzy: En grupo ocupo el número diez y el escolar es ciento veintiocho
Kido: Grupal es ocho y escolar es ciento quince
Seiji: ¿Y tú Kayano? (preguntó ya que esta se mostraba insegura)
Kayano: En mi grupo ocupo el primer lugar y en el escolar ocupo también el primer lugar
Seiji: Dios, eso es increíble, y estudiamos realmente poco
Linda: Kayano tardo alrededor de una hora por examen y era la primera en entregar, todas estábamos sorprendidas
Editado: 08.11.2022