Capítulo 24

Seiji: Akibari, este será tu traje, lo necesitaras para ser una de mis sirvientas (dijo enseñando la caja a Akibari)

Akibari abrió la caja y en un solo movimiento quito su traje de súcubo y vistió el traje conformado por un corpiño negro con mangas largas, una falda muy corta adornada con un mandil y volantes, calcetas negras altas y una tiara.

Akibari: Es hermoso, me gusta mucho

Seiji: Si, te queda bien, ahora, si me disculpan, tengo que ir a mi estudio, no me esperen

+Al día siguiente+

Kido: Las sabanas huelen a sol (dijo mientras abrazaba la sabana contra su rostro)

Dane: Dios… huelen genial (dijo también abrazando las sabanas)

Kido junto a Dane descolgaban las sabanas, era un día soleado y Seiji es dijo que si estaban lo suficiente en el sol, estas adquirirían el aroma de este, y al parecer, no mentía, a pesar de ser finales de octubre, el clima era muy caluroso.

Dane: Este aroma es demasiado relajante… por cierto… ¿A dónde dices que fue Seiji?

Kido: A su estudio, al parecer hubo un formateo de emergencia y se borraron los datos del proyecto que entregarían mañana, entonces ahora no puede trabajar desde casa

Dane: Valla, deberíamos de irlo a visitar

Kido: Podríamos llevarle comida, a él y a su equipo

Dane: Es una buena idea, digámosles a las demás

Dane y Kido terminaron de recoger las sabanas y entraron a casa para contarle la idea a las demás, Akibari se mostró cooperativa, debido a que se resfrió, se le prohibió regresar al reino de las súcubos, entonces estaría con Seiji hasta que este encontrara como ayudarla.

Katsu: ¿Cuántos son en su estudio?

Akibari: Son dos de diseño de personajes, una de diseño de paisajes, dos de programación donde uno es Seiji, tres jugadores que prueban el videojuego, que creo no están, ya que aún no se entrega el proyecto y creo que una supervisora

Litzy: Parece que en verdad sabes muchas cosas sobre él, y nosotras no sabemos mucho sobre él

Ariela: Al final, solo somos sus sirvientas, creo que no necesitamos saber mucho de él

Jatziry: Si mal no recuerdo, no le hemos preguntado algo, tal vez él nos dirá si le preguntamos

Kayano: Y no creo que nos vea como objetos, solo como sus sirvientas, él ha sido muy bueno con nosotras, nos cuida muy bien

Dane: Ciertamente nos trata bien, además, el no mostró interés sexual por nosotras, fuimos nosotras las que lo mostramos…

Las chicas se sonrojaron y apartaron la mirada de las demás.

Kayano: No es momento para filosofar, hagamos algo para el equipo de Seiji

Las chicas se levantaron y fueron a la cocina, buscaron en el recetario y cocinaron arroz frito con pollo también frito, hornearon un pan de naranja y lo dejaron todo listo en algunos embaces, se dieron un baño, los asientos vacíos les hacían pensar si Seiji los querría llenar todos, decidieron no pensar en ello y apresuraron su baño, fueron a sus habitaciones y vistieron con ropa casual, se cargaron la comida con excepción de Jatziry la cual cargaba a Estefany y salieron para caminar al estudio.

En el caminó platicaban, dieron vuelta en una esquina y de repente salieron unos hombres que parecían estar drogados, fracasaron al intentar tomar a Jatziry mas tomaron a Dane y la inmovilizaron en el suelo, Katsu intento defenderlas, pero eran hombres que le ganaban en número y que además estaban drogados

H1: Maldita perra, vendrás con nosotros (dijo refiriéndose a Jatziry)

H2: Démosle una paliza por desobedecer al jefe

H3: Me parece una buena idea

Katsu intentó golpear a uno de los hombres, pero fue golpeada primero por una barra de hierro cayendo al suelo.

H4: Las hemos estudiado, Seiji no vendrá a salvarlas

Akibari: Probablemente el no, sin embargo… yo si (dijo lo último con una voz gruesa apenas entendible)

Un círculo se dibujó en el suelo rodeando a las chicas y los cinco hombres, pronto se dibujó un pentagrama arrastrando a los cinco hombres a cada punta, un hombre se descolgó un rosario y se lo enredó en la mano para golpear a Akibari.

Akibari: Nooo… mi debilidad…

Akibari cayó al suelo y todo paro, los hombres dibujaron sonrisas en su rostro asegurando la victoria, sin embargo, Akibari comenzó a reírse a carcajeadas.

Akibari: Soy hija del peor demonio que habito el mundo humano, además de la diosa Afrodita que era una olímpica, ahora prepárate para morir

Akibari comenzó a hablar en alguna clase de idioma antiguo, su voz se engroso a tal punto de ser ininteligible, su hermoso rostro se comenzó a deformar en la peor pesadilla para un hombre, el mayor miedo de cada chica y hombre dentro del pentagrama era visible en el no rostro de Akibari, las puntas del pentagrama comenzaron a abrirse y los hombres cayeron por estos agujeros que posteriormente se cerraron, todo se comenzó a detener poco a poco y las chicas cayeron inconscientes al suelo, Akibari se dio cuenta que ellas también habían sido afectadas.

Akibari: Por un carajo (dijo mientras levantaba a las chicas del suelo) ¿Están bien? (preguntó mientras golpeaba suavemente el rostro de Dane)

Akibari abrió un pequeño círculo en el suelo y sacó una botella de alcohol, puso un poco de este en su mano y se lo dio de beber a Dane, el ardor en su lengua le hizo despertar y comenzar a toser.

Dane: Dios… esto es asqueroso… ¿Que paso? (preguntó mientras escupía el alcohol)

Akibari: Las intentaron secuestrar, soy una demonio y puedo hacer que todas vean su peor miedo en mi

Dane: El alcohol etílico se pone en algún papel o algodón y se da a oler, no a beber

Akibari: Perdón, soy nueva en este mundo

Dane tomó el alcohol y mojo una servilleta de las que llevaban, despertó primero a Jatziry para que esta se encargase de Estefany, cuando todas las chicas estaban despiertas, un círculo se abrió en el cielo, Akibari alejó a las chicas y cinco cuerpos irreconocibles cayeron del cielo, las chicas esperaban un salpicón de sangre y cerraron los ojos fuertemente, al abrirlos, vieron los cadáveres totalmente secos con una expresión de horror en su rostro.