Capítulo 32

Seiji: Vamos señoritas, muévanse

Tueris: ¿Nos lo dice a nosotras?

Seiji: No Tueris, ustedes son buenas chicas, se lo digo a este equipo de mariquitas que no pueden ni siquiera anotar una canasta

Debido a que el club de Seiji se presentaría en el torneo de deportes mixtos en el que competiría con otros clubs de hombres y las porristas tendrían que estar ahí para apoyar, Seiji entrenaba a ambos clubs al mismo tiempo, y ya que tenía a Anfora de su lado, esta le ayudaba con el club de deportes mixtos.

+Dos días antes+

Ariela: Amo, despierte, Anfora despertó (dijo encima de Seiji)

Seiji abrió los ojos y lo primero que vio fue el rostro de Ariela que estaba encima de él y a Dane a un lado.

Seiji: ¿Qué hora es?

Dane: Son las ocho de la mañana

Seiji: Vaya que si dormí mucho

Ariela: ¿Se siente bien amo?

Seiji: Si, ¿Cómo esta Anfora?

Ariela: Acaba de despertar, se puso salvaje y Akibari tuvo que usar su rostro en ella y se quedó paralizada de miedo (dijo y se bajó de la cama)

Seiji se levantó y se cambió su pijama por unos jeans y una camisa de cuadros, bajó junto a Ariela y Dane a la sala médica para ver a Anfora.

Seiji: Hey… Anfora… (dijo dando pequeñas palmaditas al rostro a Anfora)

Anfora no respondía a los estímulos, tenía las pupilas totalmente dilatas y espuma en la boca.

Seiji: Akibari, no solo vio su peor miedo, creo que la mataste

Jatziry entró a la habitación y al ver a Anfora en la cama le dio un fuerte golpe en la cara.

Anfora: Rayos… eso dolió… mucho (dijo mientras paraba la sangre que salía de su nariz)

Seiji: Dios, ¿Por qué le pegaste de esa manera?

Jatziry: Perdón amo, pero ella cargo de mala manera a mi hermana y no pude controlar mi enojo

Anfora se limpió la sangre con la sabana e intento desatar su mano.

Anfora: Ahora tendré dos feas cicatrices

Seiji: ¿Cuál es la primera?

Anfora: La de mi pierna

Seiji quito la sabana y descubrió las piernas de Anfora, esta estiro su cuello para poder echar un vistazo a su pierna en la cual solo había crema.

Anfora: Pero… Tu clavaste un cuchillo en mi pierna…

Seiji: Lo hice, deje que te desangraras y después te di sangre y sane tu herida (dijo y limpio la crema de la pierna de Anfora)

Anfora: Gracias… (dijo apartando la mirada)

Seiji: Ahora tienes dos opciones, ser mi sirvienta, o morir

Anfora: Quiero ir a casa

Seiji: Ahora esta será tu casa

Anfora: No, yo quiero regresar a mi casa,

Seiji: Anfora (dijo y sacó un folder de debajo de la camilla de Anfora) sin familia, sin amigos, cada día durante los últimos cinco años los has pasado en el mismo bar gastando el dinero que tu difunta madre te dejo, aceptaste el trabajo debido a que te quedaste sin ese dinero y te pagaron bien (dijo y arrojó el folder a las piernas de Anfora)

Anfora tomó el folder y lo abrió, no estaban los papeles que ella esperaba, sino un montón de dibujos que parecían ser hechos por un niño pequeño.

Anfora: ¿Cómo es que sabe eso?

Seiji: Yo hago las preguntas, ¿Serás mi sirvienta o no?

Anfora sentía algo asustada, al final, él fue quien clavo el cuchillo en su pierna, pero también fue el quien lo hizo para rescatar a las chicas que ama, además que también sanó su herida y borro la cicatriz que creía que quedaría.

Anfora: ¿No tengo de otra cierto?

Seiji: Lamento decirte que no, no la tienes

Anfora: Bien, ¿Podría soltarme amo?

Seiji: Jatziry, Dane, Ariela, suéltenla

Las chicas le comenzaron a soltar los pies y al final la mano, Anfora estaba por sentarse al borde de la cama, cuando Jatziry le volvió a soltar un golpe en la cara.

Ariela: Jatziry, cálmate, ya no es enemiga, ya es aliada (dijo abrazando a Jatziry)

Jatziry: Perdón, solo ver su cara me da rabia

Ariela: Carajo, es doloroso (dijo con sangre fresca en su mano)

+Presente+

Seiji: Mariquitas, como saben, pasado mañana empiezan las competencias, y la primera semana es dedicada a los clubes de deportes mixtos, así que mañana no habrá entrenamiento, es más, tómense el día libre, el sábado nos vemos aquí a las siete

Así el club de deportes mixtos terminó su entrenamiento para la competencia, todos tomaron sus cosas y se dirigieron a casa.

Seiji: Y ustedes chicas, aún no están listas para hacer rutinas de baile o cosas muy complicadas, así que apoyaran desde las gradas, hagan mechudos para los espectadores, así el equipo se sentirá más apoyado, de igual manera, tómense el día libre, el sábado nos vemos también a las siete

Las chicas también tomaron sus cosas y partieron a casa, Seiji fue con sus chicas y todas fueron a casa, cambiaron sus uniformes escolares por los de sirvientas, esta vez, el uniforme de Anfora fue escogido por las chicas, una blusa de manga larga y cuello de tortuga, falda negra larga, mandil blanco con volantes, una tiara que recoge su cabello y deja despejado todo su rostro.

Seiji: Te queda bastante bien

Anfora: Parezco una monja, no una sirvienta

Seiji: Es lo que hay, ahora, todas a sus ocupaciones

Linda y Kido fueron a la cocina para preparar la comida, Litzy se encargaba de la limpieza del suelo, Kayano y Ariela limpiaban las ventanas, Dane y Siram limpiaban la biblioteca, Katsu junto a Anfora limpiaban el consultorio, Jatziry alimentaba a Estefany, Akibari jugaba con Eva y Seiji junto a Anfora organizaban todo para la primera fase de las competencias, paso el tiempo y las chicas terminaron sus quehaceres, Linda y Kido llamaron a todas para comer, Seiji se levantó luego de Anfora y se sentó junto a todas sus chicas a la mesa, Linda y Kido sirvieron los platos y también se sentaron, todas probaron la comida con cierta emoción y saborearon todo

Siram: Esto está muy rico