SUSIE
El siguiente lunes sentía mi corazón palpitando demasiado rápido desde que entré a la escuela.
El fin de semana Darren y yo pasamos enviándonos mensajes todo el tiempo y aunque no le hemos puesto un nombre a esto sigo sin creer que sea verdad.
Una pequeña parte de mi está esperando a que Darren se ría en mi cara y me diga que todo fue una apuesta o una broma.
Alma es la primera que se me acerca. Todavía no les he dicho nada a mis amigas, no sé ni siquiera ni cómo explicarles. Es solo que, ni yo sé dónde, o como o cuando todo cambió entre nosotros.
—Hola —me saluda.
Le sonrío. —Hola —juego con mis dedos—. Um, oye…
— ¡Hola! —Trina llega, animada y sonriente.
—Hola chicas —digo, con cosquillas en mi estómago—. Eh, oigan yo…
En ese momento, en ese preciso momento, Brody se aparece de quien sabe dónde y aunque antes eso me haría muy feliz, ahora tengo otras razones para sentirme así. Otra persona.
Alma me da una mirada cuando él se acerca a saludar como siempre y sus ojos se detienen en mí. —Hola Susie, buenos días.
Asiento. —Buenos días —aclaro la garganta.
Mira hacia un lado. —Uh, oye, solo quería decirte que…
De pronto siento que algo me rodea la cintura. Ah, corrección, no es algo, es alguien. Es Darren. Darren me está abrazando rente a todos y mi corazón se detiene.
—Buenos días —besa mi mejilla.
Brody frunce el ceño, Alma y Trina me miran con asombro. Esto es algo que ellas podrían fácilmente comparar con ver un ovni o un fantasma.
—Eh… buenos días —contesto, sin moverme.
Darren recuesta el mentón en mi hombro y me aprieta más hacia él. —Entonces, ¿Ya les contaste a tus amigas?
Trina se acomoda el cabello. —Um, ¿Contarnos qué?
Brody sigue de pie como una estatua, yo parpadeo rápido. —Eh, bueno…
Darren suelta una pequeña risa. —Que me gusta Susie Lu, que soy su novio y que no hay forma que la deje ir —aprieta mis mejillas con una mano—. Solo mírenla, es adorable.
—Darren —me muevo para separarme de su mano.
Suelta una risa. —Ay, vamos, eres adorable. Tienes unas mejillas muy lindas.
Ruedo los ojos. — ¿Desde cuándo eso es un alago?
—Desde ahora —nos movemos para quedar de lado.
Brody levanta una mano. —Un momento, ¿Tú y ella? ¿Enserio? Susie, ¿acaso no eras una persona más…?
¿Qué se supone que signifique eso?
—Darren es, um, mi novio —según sus palabras—. Además, ¿Cuál es el problema? Él al menos no es de los que besa a las chicas en escondidas y luego invita a otras a festivales.
Sus ojos se abren. —Ah… yo…
Miro a Trina y a Alma. —Chicas, les contaré todo después —tomo la mano de Darren—. Por ahora, nos vemos.
Darren me sigue cuando lo muevo con nuestras manos entrelazadas. Mi corazón está latiendo muy rápido.
—Eres genial —dice.
Me encojo de hombros. —Tú eres un poco posesivo.
Bufa. —Pues, sí, lo soy —nos detenemos en un pasillo y me acerca a su cuerpo—. Lo soy.
Siento sus ojos sobre mi rostro y mi corazón pega un salto. —Um, oye, no creo que deberíamos estar así aquí, si un profesor nos mira, nos volverán a castigar.
Sonríe de lado. —Ah, eso sería horrible, estar castigado contigo sería una tortura.
Suelto una pequeña risa. —Muy gracioso.
Darren mira alrededor. — ¿Sabes algo? Necesito besarte ahora mismo así que vamos a hacer una pequeña oración que ningún profesor nos vea ahora.
Elevo las cejas. — ¿Qué? Oye, no creo que…
Darren no me deja continuar, me acerca a su cuerpo y sus labios se mueven contra los míos.
Cierro los ojos automáticamente y por los segundos que dura el beso, dejo que suceda. Siento como Darren sonríe mientras me besa y en este instante dejamos de estar en el pasillo de la escuela y estamos en alguna parte, donde nada más importa.
Cuando soñaba con un noviazgo, con sostener la mano de alguien en los pasillos y con posibles invitaciones a eventos escolares, era Brody siempre el protagonista de esas fantasías.
Pero ahora quien está a mi lado es Darren. Darren Marcen. El chico que ha tomado malas decisiones, que no siempre actúa correctamente y que puede cambiar sin duda pero es una buena persona y lo está intentando.
Honestamente, no tengo idea qué esperar de la vida. En un año ya no seremos estudiantes de secundaria, estaremos en alguna parte haciendo algo totalmente diferente.
Sin duda en estas últimas semanas aprendí que la vida puede dar vueltas y cambiar, a veces esos cambios no parecen ser los que siempre deseaste, pero se sienten bien.
Entonces, no sé si esta historia es para siempre o para un momento pero dure lo que dure, estaremos bien. Sin duda, en el futuro en un año, en cinco o en diez incluso, recordaré este último año como uno caótico, divertido y único.
El año en donde me castigaron (sigo pensando que injustamente), donde un mal día, se convirtió en el principio de la historia de amor que siempre había deseado.
FIN