Capítulo 5

En la comisaría. Livio está caminando de lado a lado, mientras frente él están sentados Tulia y Trey y hablan del caso de Ángela Galicia.

-Yo si lo considero culpable. - Tulia vuelve dejar claro. Recibiendo la mirada de Marceles y de Mauri que tira la pluma.

-¿Y eso porque? 

-Las parejas son siempre culpables. - De broma dice Trey. Recibiendo la misma mirada de Marceles y una de irritación Casilas por bromear de ella... 

-No podemos acusar la gente por puras estadísticas formadas más por películas y libros. - Les advirtió el jefe. 

La empresa Montejo.

-¿Cómo va? - Pregunta Refina entrando en la oficina de Leonel en su primer día de regreso. 

-Piensas más que todos me ven con lástima o sospecha. - Dice Leonel, sentado en su silla y con pies la mueve a lados. 

-Leonel, no seas así. - Le dice Refina, sentada y bajando los hombros por un comentario tan negativo. 

-Qué no sea así. Refina, la empresa está llena de policía, que se entró mente en todo y en la vida de todos, no creo que ninguno me perdone eso.

-¿Y culpa es tuya? No. - Le prueba animar.

-No sé, no sé. ¿Qué hacen ahora? 

Refina se acerca a Leonel y se sienta sobre él, entregándole un buen vaso de licor. - No te preocupes por eso que yo lo voy a supervisar, tú solo relájate y prueba olvidar. 

-No puedo, Ref. - Dice, mientras toma un sorbo. 

-Debes o caerás en algo peor. - Palmándole el pecho y levantándose. 

-Tú triunfarías como psicóloga.

-Gracias, pero no. Considero que me va exclusivamente contigo. - Asomando una sonrisa en los labios de Leonel, por el comentario. 

-Tanto que será un día normal en la oficina. 

-Es obvio de donde Ángela ha sacado ese carácter.

-Debería quitar esta foto, ¿Qué no? - Dice, preguntando Leonel a Refina, mirando y pasando el dedo por el marco de la foto de Ángela.

-A tu gusto. Y cuando estás listo. Si la dejas serás honrado su memoria, si la quitas te será más fácil olvidar. 

-Más fácil, con estos fuera, no estoy de acuerdo. 

-Está bien, yo me voy, sigo con... Todo eso fuera. Cuando termina la jornada vengo y tomamos unas, como no podemos fuera. - Haciendo que mientras ella va por puerta, Leonel baja la cabeza y niega teniéndola sobre manos en la mesa. 

-¿Todos se fueron? - Pregunta Leonel, cuando Refina entro en su oficina. 

-Sí. Y algo enojados, no te puedo esconder. - Mientras se sienta, dice. 

-¿Razón o que no la preguntó? 

-Ah, policía. Parece que les preguntaron más de lo debido. 

-Nos van a destruir. - Bajando la cabeza en las palmas de las manos. 

-Y no es lo peor. Mañana mandan un técnico y más gente que van a poner la empresa a patas arriba, ahora que terminaron con la gente, su enfoque es empresa. 

-¡¿Y qué demonios tiene que ver empresa con lo que pasó a Ángela?! 

-No lo sé. - Levantándose y yendo hasta el estanque con bebidas. Mientras prepara dos, pregunta. - ¿Tu cómo te sientas, descartando el relajo? 

-No lo sé, no lo sé. Mal, sigo creyendo que pudimos hacer algo. 

-Si ella hubiera comenzado gritar antes de comenzar a caer, quizás. - Bebiendo del vaso.

-No sé, ni sé qué pensar.