El Niño Del H.

Hey.. Nunca supe cómo iniciar una historia, así que la haré de está forma.

No siempre fui el chico flaco que fuma, siempre fui un niño soñador con la vida de un escritor frustrado. Que decía; "No soy yo, es el mundo que ha cambiado"
En una familia unida, que poco a poco se fue disolviendo.
Ser el menor siempre me jodió. Nunca quise ser el
número uno. Nunca quise ese puesto, nunca quise ser el favorito de nada, nunca creí en nada. Nunca quise nada.

El tiempo fue pasando, mi gusto por lo dañino fue incrementando, ahí inició mi caída hacía el abismo, a mis catorce esnifé, es la gloriosa forma de perder el duelo contra uno mismo.
Tuve un par de amigos... Mi mejor amigo de infancia se ahogó, y es allí cuando acerté que dudar de Dios siempre fue lo correcto, me volví más frío, más gañan, más violento.
Con quince años estuve encerrado, días que me gustaría haber olvidado, no estar esposado, y poder correr a verle... la abuela murió.

Y justo ahora yo, estoy leyendo las memorias de un niño abandonado, que nunca siguió las reglas y que fue amado por lo que realmente fue.

Este es el niño del H. Que sufre de miedos, y aunque parezca ser libre en su soledad, disfruta más estar acompañado, así el orgullo disminuye y su odio por si mismo lo hace de la misma forma, hace rato que murió ese niño, quizá colgado en la sala de su casa, o desangrado en su habitación con las muñecas abiertas o tal vez, solo tal vez quiso desaparecer cómo un amor entre dos personas que se juraron amor eterno y cómo acto de amor murieron intentando llegar a la ciudad que siempre soñaron para hacer de un momento algo que duraría la toda la eternidad, que hasta Dios sentiría celos.

Ya con esto, lo dicho y lo hecho, no busco recompensa, solo la tranquilidad de saber que soy lo que nunca nadie conoció.
Lo bueno o lo malo, lo rudimentario o lo extraordinario no importa, no importa lo suficiente.
Todo va perdiendo sentido, hasta la creencia en un Dios con la ignorancia de un niño de ocho años.
Con ésto, se podría decir que el niño del orfanato ha madurado.
En un lugar desconocido, siendo un desconocido por el mismo, sin metas no del todo codiciosas.
Sin nombre, o tal vez si.
Tal vez lo oculto y solo puede ser pronunciado por alguien que realmente le haya tocado y exitado el alma.
Pero quién sabe?