Capitulo 23

Tomo a un chico por sus hombros,

—¿Por qué hiciste que mi esposa se pasara con la bebida?

El ríe de forma burlesca,

—Tranquilo amigo, ella solo se estaba divirtiendo

Arreglo las mangas de mi camisa,

—No soy tu amigo y se muy bien que Aurora no se divierte de esta manera.

El toca mi hombro y me dice con una mirada lasciva,

—Si tú no hubieras venido, esa chica seria mía.

Es lo que busca, es lo que yo estaba esperando, una excusa para golpearlo y darle a entender que no pueden meterse con Aurora, lo tomo por el cuello de su camisa,

—¿Qué dijiste idiota?

El ríe,

—Oye amigo, no te tengo miedo.

Golpeó su cara con mi puño, sus amigos tratan de impedir que lo golpee de nuevo, pero la furia que siento porque esté idiota quiso aprovecharse de Aurora hace que ponga en práctica mis clases de taekwondo, no permitiré que estos chicos se burlen de Aurora, el día de hoy sentirán lo que es pelear con un cinturón negro.

Al terminar con ellos, regresó al auto, Aurora está profundamente dormida, suspiro cansado, esta chica me traerá muchos problemas, ¿realmente tome la decisión correcta?

Al llegar al la habitación, la acuesto en la cama, se que debo cambiar su ropa, pero ella es tan huraña, si la desvisto armara un escándalo mañana cuando despierte, pero no puede dormir con esa ropa, esta sucia y apesta a alcohol.

Después de tanto pensar,  busco algo de ropa limpia en su equipaje, luego la siento y comienzo a desvestirla, me repito una y otra vez, ella es mi esposa, lo que estoy haciendo no está mal, trato de no observar su cuerpo, pero es algo imposible, soy un hombre después de todo, trago saliva al tocar su espalda descubierta, su piel es realmente suave, ella es tan hermosa, coloco una camisa limpia y luego, cambió su pantalón, por un buzo para dormir, colocó calcetines en sus pies porque los tiene helados y la acuesto nuevamente en la cama, arreglo su cabello, la arropo y ella sonríe, dice entre dormida y despierta,

—Gracias por venir y ayudarme, la verdad tenía mucho miedo de estar en ese lugar.

Acaricio su mejilla,

—Siempre te ayudaré Aurora, ahora duerme.

No se que hora es, pero siento que mi cabeza va a explotar por la resaca, veo a mi alrededor y me doy cuenta que estoy en la suite, ¿cómo llegue al hotel?, también tengo otra ropa, ¿será posible que Ethan hizo esto?, observo a mi alrededor y en la mesita de noche tengo unas pastillas y un vaso con agua, con una tarjeta,

—Tomate estás pastillas, ayudaran para tu resaca.

Si te preguntas si dormí contigo, no te preocupes, dormí en el sofá toda la noche, hoy empezaremos con el recorrido por Suecia, sal de la habitación lista para el viaje.

No se que decir no recuerdo mucho de lo que sucedió ayer, solo recuerdo que estaba con ese chico sueco, el me presento a sus amigos y fuimos a un café, luego de eso no recuerdo nada, me siento avergonzada, pero al mismo tiempo estoy molesta, esos chicos me engañaron, pusieron algo en mi café.

Salgo de mi habitación, Ethan está en la cocina, me acerco a el y digo algo apenada,

—¿Cómo llegue a casa?

El levanta la vista y me dice serio,

—Ayer fui a buscarte, era casi medianoche y tú no volvías de tu aventura, así que decidí buscarte y te encontré borracha con varios chicos, creo que eso afecta mi reputación y también la tuya, ¿por qué hiciste algo así?

Bajo la mirada y pregunto,

—La verdad no tengo idea, solo recuerdo que salí con un fan por un café y conocer a sus amigos, luego de un rato, Alvis me dijo que debía irse, le dije que no había problema que me quedaría con sus amigos, lo hice porque estábamos en un café, mientras hablaba con los amigos de Alvis, me levante para ir al tocador, al volver seguí tomando mi café, pero luego de eso no recuerdo lo que sucedió, ¿tú sabes que me sucedió?—Digo con mi voz quebrada y mis ojos llenos de lágrimas.

El tensa su quijada y dice con una voz dulce y con una mirada de lastima,

—Entiendo, Aurora debes tener más cuidado, no todas las personas son buenas, no se que te sucedió pero te prometo que haré todo lo posible por averiguarlo.

Suspiro para controlar mis emociones,

—Gracias Ethan.—Cambio el tema y pregunto curiosa,

—¿Qué necesito llevar, para los lugares que visitaremos?

El termina el desayuno y dice,

—Come algo primero, luego veremos que ocupamos para el viaje.

Sonrió y asiento, Ethan es un chico muy considerado, debería cambiar mi forma de ser con el, tratare de evitar estar a la defensiva siempre, después de todo el es mi esposo ahora y para tener una buena relación aunque sea falso, debemos llevarnos bien,

—Está bien, ¿tú preparaste el desayuno?

El me ve y dice,

—Si, pero si no quieres comerlo, puedes pedir que te traigan el desayuno.

Niego repetidamente,

—No, no es que no quiera comer, solo es que me sorprende que tú cocines.

El me comenta,

—Aprendí a cocinar cuando vivi en China, la comida no era de ni agrado y no quería decirle a mis padres que tenían razón y ocupaba una sirvienta, quería demostrarles que podía cuidarme solo y así aprendí a cocinar.

Lo observo sorprendida,

—No sabía que habías vivido en China, ¿qué hacías ahí?

El come y comienza contarme sobre su viaje a China,

—Aurora tu no sabes nada de mi, fui un estudiante de intercambio, aprendí mucho sobre la economía y sobre las relaciones públicas.