Married?

Capítulo 30

¿El auto? Cuando llegue a casa el auto de Aurora estaba ahí, pero la enfermera no tiene idea de todo lo qué pasó Aurora, así que digo de la mejor forma posible,

—Gracias enfermera.


 

Entro en la habitación de Aurora junto a papá, ella está dormida, no soporto ver su rostro golpeado, antes estaba lleno de vida, sus mejillas sonrojadas, lo cual parecía que siempre estaba apenada, pero no ahora están moradas, sus labios rojos, están sin color y reventados por la deshidratación, su cabello castaño claro, está hecho un desastre, los hematomas son muy notorios gracias a su piel blanca como la nieve, sus ojos celeste, están inflamados por llorar, esos chicos pagarán por lo que hicieron.


 

Papá se acerca a Aurora y toma su mano, dice con su voz quebrada,

—Aurora, lamentó mucho no haberte protegido, pero te prometo que las personas que te hicieron esto pagarán.


 

Aurora frunce el ceño, mientras lágrimas comienzan a correr por su mejilla, seguramente tiene una pesadilla, no se que hacer, papá me ve molesto y me pide que me acerque a ella, me acerco y tomo su mano, veo las cortadas que se hizo cocinando, pienso, cuando hable con ella, estaba bien, pero ahora está aquí en un hospital, es mi culpa haberla dejado sola, es mi culpa por no tener sirvientas, papá me ve y dice,

—Llamaré a Richard, el debe saber lo que le sucedió a su hija.


 

Papá sale de la habitación de Aurora, yo siento que Aurora aprieta mi mano y dice,

—Digo la verdad, no se nada sobre esa receta, lo único que se es que para papá es muy importante, por favor ya no me golpeen, solo soy una chica fingiendo ser fuerte.


 

Antes que continúe se sienta en la cama y abre los ojos muy asustada, me ve y sin decir nada me abraza y comienza a llorar, acaricio su cabello, la dejo que se desahogue y digo,

—Ya estoy aquí, no tengas miedo, no permitiré que nada te suceda, lamento no poder ir a buscarte.


 

Ella termina de llorar, me dice tratando de hacerme sentir mejor,

—No es tu culpa, ellos saben todo sobre nuestras vidas, sabían que irías con Mikel, así que te dieron una dirección falsa, ellos ya sabían que papá no estaba en casa.


 

Digo limpiando sus lágrimas,

—No hablemos de eso ahorita, mejor dime ¿cómo te sientes?


 

Estoy bien, solo me siento cansada.—Dice Aurora acostándose nuevamente en su cama.


 

Suelto su mano,

—Esta bien, descansa, yo aquí estaré no te preocupes por nada.


 

Ella asiente y no dice nada.


 

Al abrir mis ojos, me doy cuenta que es de mañana, no se que hora es, pero me encuentro en mi auto, está chocado en un poste, no se cómo llegue al auto, tampoco se sobre este accidente, mi cabeza duele demasiado, fue el golpe que uno de los chicos me dio antes de desmayarme o realmente tuve un accidente, estoy confundida, a lo lejos escucho la sirena de la ambulancia, tocó mi cuerpo, tengo miedo de que me falte algo, la verdad no se que sucedió luego del golpe.


 

Al llegar al hospital me desmayé, los médicos curaron todas mis heridas.


 

No se si fueron los medicamentos o el no dormir todo un día lo que hizo que al llegar a la habitación me quedara profundamente dormida.


 

Estoy soñando con las personas que me secuestraron, en mi sueño están a punto de cortar mi vena aorta, tengo tanto miedo, comienzo a decirles, que lo que les dije sobre la receta es la verdad, cuando están a punto de matarme, abro mis ojos rápidamente, mi corazón está a punto de salirse por mi pecho, me siento y veo que Ethan tiene mi mano agarrada, sin pensarlo lo abrazo y comienzo a llorar en su pecho, el corresponde mi abrazo y acaricia mi cabello, dándome la seguridad de desahogarme, al sentirme mejor, el me pide que descanse, me dice que no tema que el me cuidara, no quiero hablar en este momento, así que solo asiento y me acuesto a dormir nuevamente.


 

Es de mañana, al abrir mis ojos veo que mi cama está rodeada por mis padres, los padres de Ethan, Mikel y Ethan, mamá dice con sus ojos rojos e inflamados, puedo asegurar que estuvo llorando,

—Aurora, cariño, lamentamos mucho habernos ido, no sabíamos que esto pasaría.


 

Papá se sienta en mi cama, toca mi rostro con toda la delicadeza del mundo, dice con su voz quebrada,

—Mi princesa, hija perdónanos, no volveremos a irnos, ¿te sientes bien?


 

Gillian abraza a mamá, me ve y dice,

—Aurora, si quieres puedes quedarte en nuestra casa o la casa de tus padres, imagino que no quieres volver a la casa de Ethan.


 

Mikel me ve con lastima,

—Aurora, lamento no encontrar tu ubicación a tiempo, te prometo que encontrare a las personas que te hicieron esto.


 

Abrazo a papá y digo,

—No se preocupen, estaré bien, ellos me dejaron libre después de todo.


 

Ethan cierra sus manos en puños y sale de la habitación molesto.


 

Al quedar sola, decido ir a ducharme, no lo he hecho en dos días, pero al notar lo sola que está la habitación, comienzo a recordar todo lo sucedido, veo a todos lados, temo que alguien venga nuevamente y me secuestre, mi corazón está acelerado, así que me encierro en el tocador de la habitación, me veo al espejo y mi rostro está horrible, tengo un ojo morado, hematomas por todo el rostro, también noto que cortaron un mechón de mi cabello, esto es horrible, pero lo que más me da miedo es que esas personas conocían mucho sobre nuestras vidas, eso significa que hay alguien infiltrado en nuestras vidas, no puedo confiar en nadie a parte de mis padres.


 

Alguien toca la puerta del tocador,

—¿Quién?—Pregunto nerviosa.



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En el texto hay: comedia, romance , odio amor

Editado: 10.12.2021

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