Melisa estaba desayunándose cuando recibió un mensaje de Mateo:
—Hoy a las doce vamos a hacer un asado, la ubicación está adjunta a este mensaje en mapsmars (El sistema de ubicación usado en Marte).
Melisa estuvo en el lugar y la hora indicados en el mensaje. Allí vio que poco a poco, llegaban las mismas personas que habían estado en el encuentro religioso. Después observó que unos empezaban a prender una hoguera, mientras que otros sacaban ratas de trampas que había ocultas en el suelo.
—¡NO PENSARAN COMÉRSELAS! –pensó Melisa en silencio- En el servicio solo comemos pasta nutritiva.
Entonces Melisa observó como despellejaban las ratas, guardando la piel como si la fueran a utilizarla en otra cosa, y ponían a asar la carne en varillas. Cuando la carne se empezó a asar Melisa sintió un olor que le fascinó, nunca había sentido algo así, la pasta nutritiva no olía a nada.Cuando le dieron su porción el olor la hizo devorarla en un segundo. Mateo se le acercó y le dijo:
—Delicioso ¿Verdad?
—Si, si muy rico.
—¿Pero ustedes no tienen que ver con la RC? –preguntó Melisa sonriendo- ¿O me equivoco?
—¿Por que lo preguntas eres policía? –respondió Mateo muy serio.
Melisa se quedo inmóvil y sintió que se le hacia un nudo en el estomago.
—¿TERMINARÉ TORTURADA? –pensó Melisa en silencio mientras sudaba.
—JA JA JA JA –empezó a reírse Mateo- un policía nunca comería rata, solo pueden comer el concentrado que les dan en el servicio.
Melisa sintió una sensación de alivio y se tranquilizó.