Amigos de la infancia

-3-

Ha pasado varios días desde que Thomas escuchó la conversación y sorprendentemente los insultos no han incrementado, siguen ahí pero igual que siempre.

Lauren, quien me acompañaba, también estaba sorprendida de eso.

—Esto es raro —murmura frotando su barbilla— Seguro habrán preparado algo — murmura de nuevo.

Rio levemente y no lo puedo negar, tengo miedo de que tengan algo preparado.

—Tengo miedo —le confieso riendo.

Thomas pasa por su lado y la saluda mientras que a mi me da una mirada y ya está.

—Puff, idiota —murmuro para mi misma. 

—Déjalo —Lauren palmea mi hombro.— Hailee, ¿Sabes del chico que viene hoy?, dicen que es rico pero prefiere los Institutos públicos porque es menos estrés y cosas así.

—Si, también dicen que es lindo.

—¡Ay si! —chilla emocionada.

Ruedo los ojos divertida, y comenzamos a comentar más cosas sobre ese chico.

—También tiene una hermana y su cabello es oscuro como la noche. —dice llamando mi atención.

—Sabes que tengo una debilidad por los chicos con cabello negro.

Sonríe y asiente.

—Por eso lo digo, idiota, fíjate en él, puede que tengas una oportunidad.

Niego.

—No, no, no, ya estás emparejando me, no te ilusiones —rio.

Hace un pucherito y de repente el megáfono del instituto suena.

"Buenos días a todos los alumnos, como ya todos saben, varios alumnos nuevos ingresarán este año, los cuáles son hijos de importantes personas, así que espero que muestren todo su respeto a ellos. 
Eso es todo, pasen un buen día"

Comenta el director.

Las puertas se abren y los alumnos entran, esto es digno de una película.

Hay un alumno que me suena, aunque todos se colocan pegados a las taquillas yo me acerco, esos ojos me suenan, esa cara.

¡No puede ser!

Me acerco rápidamente a él y le pego un cachetazo lo más fuerte que mi cuerpo me permite, él retrocede unos pasos.

—¿Q-qué te pasa? —murmura adolorido, aún sin mirarme.

Rood el instituto se asombra y comienza a murmurar.

La chica, más conocida para mi como Alyssa, me pega un empujón.

—¿Qué te pasa idiota? —Esa voz chillona, oh por dios.

Me tiro encima suya y sonrio.

—¡Ally! —la llamo por su apodo.

—No puede ser, ¡Oh mi dios!, Hailee, por dios, ¿Qué haces aquí?, ¿Qué es de tu vida?, ¿Qué pasó con tus ojos? —rio levemente, seguro que no me reconoció por mi pelo y por las lentillas.

—Tranquila, te contestaré en privado —susurro.

Alex, el chico el cual había pegado, me mira sorprendida.

—Pequeña, por dios, ¡Has crecido!, ¿Quién lo diría.

Le saco la lengua.

—Señorita Hailee, sabía que alguien molestaría a los nuevo, pero no pensé que fuese usted.

Me pongo roja.

—L-lo sien...

—Oh, no se preocupe señor director, no molesta.

Me quedo asombrada, en lo único que puedo pensar es en la voz.

—Theo...

Me percato de su presencia por primera vez, joder, estaba más lindo que nunca.

—Hailee... —repite en modo de burla.— ¿No me das mi abrazo también?

Sonrio y me lanzó a sus brazos, lo echaba de menos.

—Aw, los ex's si que vuelven.

Maldita sea, Alyssa, la arruina-momentos.

—Eso era a los 6 años, Ally.

Rio.

—Los he echado de menos, idiotas.