NATALIE
Hoy también esta aqui.
Es así la una de la madrugada.
Siempre es la misma hora y siempre se queda durante el mismo tiempo.
Llega a media noche se asegura de que esté dormida o al menos eso le hago creer y se queda observandome durante dos horas sin hacer el menor ruido más que los sonidos de su respiración.
Hace un año que vivo aquí, perdí a mis padres en un accidente automovilístico, a los seis años me quedé sola, fue entonces cuando mi abuelo se hizo cargo de mi, me cuido y se encargó de que nunca me faltará nada mucho menos amor, sin embargo el tiempo no perdona a nadie.
El día de mi cumpleaños número veintiuno decidió que era momento de casarme, principalmente porque no quería que estuviera sola cuando el muriera así que arreglo un matrimonio con los Volkov. No me opuse, era algo que mi abuelo deseaba, y yo haría lo que fuera por verlo feliz.
Fue cuando llegue aquí, apenas dos días después de mi cumpleaños ya estába comprometida con Nikolai Volkov, hijo de Alexei Volkov y heredero de toda su fortuna, sin embargo apenas dos meses después del anuncio de nuestro compromiso Nikolai falleció.
No era un secreto para nadie que mi prometido tenía problemas con el alcohol, era el típico niño ególatra y mujeriego que se la vivía en fiestas y clubes nocturnos lo cual solo terminaba perjudicando la imagen pública de su padre.
Alexei Volkov era conocido como uno de los hombres más poderosos y adinerados de Londres, ademas del viudo más codiciado entre las mujeres, apesar de tener cuarenta años con sus ojos color azul y su cabello castaño era sumamente atractivo.
Supuse que la intencion de Alexei al decidir que su hijo debía casarme fue su último intento de hacer que Nikolai recapacitara de sus acciones, sin embargo no lo logro, eso solo empeoró las cosas, apenas y conocía a mi prometido, casi nunca estaba en la casa y siempre que llegaba, lo hacía en la madrugada y completamente ebrio. Las discusiones entre padre e hijo eran muy frecuentes.
Luego un día simplemente llamaron del hospital y nos dieron la noticia, Nikolai había llegado a emergencias debido a una sobredosis y después de haberlo recibido dos veces, su corazón ya no pudo resistir mas.
La muerte de Nikolai afectó mucho a Alexei aún que no lo mostrará abiertamente, en público era aún empresario sensato e imperturbable, pero aún era un padre, uno que había perdido a la única familia que le quedaba.
Pasaron los días y finalmente decidí a hablar con Alexei sobre mi próxima partida, tenía la clara intención de volver con mi abuelo y no incomodar a Alexei pero su respuesta fue.
—Tu presencia no me molesta Natalie, al contrario me reconforta tenerte aquí conmigo.
Si respuesta me dejó perpleja, aún así decidí quedarme aún en contra de mi buen juicio.
Y ahora estamos aquí, con el acechando cada uno de mis movimientos como si fuera una especie de muñeca de porcelana que se va romper en cualquier momento.
Ha pasado los últimos dos meses viéndome dormir como un puto acosador, honestamente nose porque sigo aquí y porque no he tenido el valor de decirle que se hacerca de sus visitas nocturnas.
Lo oigo soltar un suspiro y cerrar la puerta haciendo el menor ruido posible. Me volteo para ver la puerta cerrada y finalmente tomo una decisión, ya esta, es momento de marchame de esta casa.
Editado: 10.08.2025