Hola,
Quisiera saludarte con decencia pero la verdad no me nace.
Hace mucho tiempo que he pensado en hacerte esta carta pero me desalienta el hecho de tener que escribirte para que mañana igual de traicionero, te olvides de estas letras, sabes es algo interesante y un poco loco...Escribirle al tiempo para decirle que tenga piedad de ti, que los años no sean tan fuertes ni tan notorios , que sea paciente y te deje sanar, que piense en lo poco que otorga en algunos caso.
Decido escribirte tal vez para desahogarme y decir lo cruel que eres aunque he de suponer que ya lo sabes, eres eternamente efímero eres la metáfora de la vida, eres el anhelo no cumplido.
Te vuelves la sombra de las ilusiones, de sueños que por tu culpa no se cumplen, te vuelves esa palabra prohibida, te vuelves risas y llanto, te vuelves el temor de muchos.
Eres el temor para los ricos, que no pudieron gozar más tiempo sus riquezas; eres el anhelo de los pobres que ansían el fin de sus días para dejar de sufrir.
Eres la crueldad pero también salvación y eso, eso confunde porque te vuelves el protagonista de todas las historias y nosotros tus fieles sirvientes.
Atentamente una pobre alma.