Capitulo 2

El tiempo transcurrió raudo y ahora estábamos en la segunda Guerra Mundial. Sentado entre los escombros de lo que antes fue el hogar de alguien,miré como todo ardía en llamas,y los gritos de los presentes eran algo que estremecería al más fuerte. Aunque,claro,para mi no era nuevo; escuchaba y apreciaba torturas así desde hace siglos,desde mi trono en el averno. Suspiré,dispuesto a irme,cuando escuche a alguien sollozar. Reconocí rápidamente la voz de donde provenían tales sollozos,por lo que guiado por mi instinto camine hasta llegar a la parte trasera de los escombros,admirando a la Ángel de espaldas,llorando y temblando sutilmente entre unos muros que parecían ya a punto de derruirse.

—¿Que haces aquí,Estrellita? ¿Acaso derramas de nuevo tus lágrimas por las almas mortales? ¿No te cansas de desperdiciar tus llantos en algo que simplemente no vale la pena?—Espere una respuesta, pero ella siguió gimoteando. Me acerqué intentando entender la razón de sus tristezas,apreciando así a una inocente niña en un descanso eterno mientras sostenía en sus brazos a una muñeca de trapo sucia y vieja. Sentí mi alma temblar ante tal desgarradora escena,sin embargo, solo pude sonreí,acercándome para tomar la muñeca entre mis garras despedazandola en el acto. Tras esto,la Ángel me miró con indignación arrebatandome lo poco que quedaba de esa muñeca.

—¡¿Por qué hiciste eso?! ¿Acaso no tienes corazón? ¡Era solo una niñas!—Rechistó la Ángel entre un sutil llanto,a lo cual solo me reí con cierto desprecio por la contraria.

—Tú misma lo dijiste...¿Sabes?,no tiene sentido llorar por alguien que ya no está. Además,es solo un trapo viejo. La mocosa murió por tonta; ¿Qué hacia en el campo de batalla? ¿ No pensaste en eso?

—No lloro por su cuerpo,eso es algo físico. Lloro por lo joven que fue,lloro por su pobre alma que quedará atrapada en estas ruinas. ¿Acaso tienes idea de lo horrible que es eso?

—¡Oye! Yo me pudro diariamente entre las llamas del infierno y no me quejo...¿Y sabes que? Te diré algo:Si tanto te importa esa niña ¿Por qué no la revives? ¿No se supone que eres una estúpida Ángel,un ser celestial?—Rechiste alterado,mientras ella me miraba como si tuviera el corazón en la mano. Tras unos segundos,sin que ninguno de los dos hiciera algo,ella extendió sus majestuosas alas emprendiendo vuelo hacia lo desconocido. Quedando desconcertado por unos instantes hasta que mi cuerpo reacciono,por lo que gruñi frustrado sintiéndome algo culpable por mis palabras.

Mirando el cadáver,dejé escapar un breve y elegiaco suspiro dándole un entierro digno a esa pequeña,esperando de todo corazón que nunque tenga la desgracia de tocar las puertas de mi reino.