Masamune Date

CAPITULO 8 (1-5)

MASAMUNE- ¡¿Están todos bien?!

Levanté la vista para ver que Masamune también había salido corriendo de su tienda.

MC- ¡Masamune! ¡Tenemos un problema! ¡Yojiro dice que hay veneno en el agua!

MASAMUNE- Lo sé. Contaminaron una buena cantidad del suministro.

MASAMUNE- Un grupo de hombres lo bebieron sin darse cuenta y están colapsando a diestra y siniestra.

(No.)

MASAMUNE- Yojiro, ¿puedes oírme?

YOJIRO- S-sí...

MASAMUNE- Ieyasu está trabajando en un antídoto ahora mismo. Tenemos una tienda de primeros auxilios. Vamos a trasladarte allí.

MC- Sujétate a mí, Yojiro. Arriba vamos.

YOJIRO- G-gracias, princesa...

Masamune y yo ayudamos a Yojiro a levantarse.

MC- Masamune, ¿quién haría esto?

MASAMUNE- Atrapé y maté a uno de los hombres que trajeron el veneno. El resto se escapó.

Ni siquiera pude sentirme sorprendida al oír eso. Esta horrible situación ya me había adormecido.

MASAMUNE- El veneno es una estrategia válida. No diré que es de cobardes. Todo se vale en la guerra. Pero... El hombre que maté no parecía uno de los hombres de Sanada o Uesugi.

(Entonces, ¿alguien más hizo esto?)

Dentro de la tienda de campaña, era como una escena de una pesadilla. Los hombres colapsaban, acurrucados de dolor, gimiendo y llorando.

MASAMUNE- Ieyasu, necesito saber si tendrás el antídoto a tiempo.

IEYASU- Estoy trabajando tan rápido como puedo. Sin embargo, esto va a tener un impacto significativo en nuestros suministros médicos.

(Esto es horrible.)

Los hombres con los que había estado hablando antes estaban entre los enfermos, incluyendo al hombre que me había comparado con su hija. Toda esta situación me dejó sin palabras.

MC- Tenemos que seguir adelante con el asalto. Dejen suficientes hombres para cuidar a los enfermos, y varios para protegerlos.

IEYASU- Muy bien. Yo también iré en cuanto termine el antídoto.

Ieyasu volvió a su trabajo.

MC- Masamune, me quedaré aquí y ayudaré.

MASAMUNE- MC, espera.

Masamune me tomó del brazo y me acercó a él. Su voz era un susurro.

MASAMUNE- No estoy convencido de que sea seguro. Es probable que alguien más que Kenshin esté detrás de esto.

El ceño fruncido de Masamune y su agarre en mi mano me dijeron lo tenso que estaba.

MASAMUNE- Y podrían volver. No tienes que ayudar. Sólo encuentra un lugar para esconderte y mantenerte a salvo.

(Masamune, ¡¿qué estás diciendo?!)

MC- ¡Vine para ayudar! ¡No he llegado tan lejos para echarme atrás ahora!

MASAMUNE- Ya has ayudado bastante en el camino. No necesitas hacer nada más.

MC- Sé que es peligroso, pero será peor para todos aquí. No los dejaré.

MASAMUNE- Los tipos que los envenenaron pueden volver e intentar acabar con los heridos. No puedes luchar contra ellos tú sola. Morirás.

El ojo azul de Masamune era tan afilado como una espada, pero le miré.

MC- Sé que no puedo serte útil en la batalla. Pero puedo serte útil aquí. Por eso he venido. Todos fueron guiados aquí por sus convicciones. Todos somos aliados, luchando juntos por la misma razón. Voy a ayudar a mis aliados ... a mis amigos.

La feroz mirada de determinación en el ojo de Masamune titubeó un poco.

MC- No es que no tenga miedo de que nuestro enemigo regrese. Es porque sé cuánto me arrepentiría si corriera a salvar mi propia vida.

MASAMUNE- ...ya veo.

La mano de Masamune se deslizó desde mi brazo hasta mi muñeca. Suavemente, me tomó la nuca con la otra. Se inclinó un poco hacia mí, apoyando su frente contra la mía. El pulso de mi muñeca y mi cuello latía rápidamente, resonando contra las firmes manos de Masamune. Sabía lo que estaba haciendo. Dejé que Masamune sintiera que aún estaba viva tanto como necesitara. Estuvimos allí juntos durante lo que parecieron horas antes de que finalmente me soltara.

MASAMUNE- Haz lo que tengas que hacer. Si mueres, me jactaré ante todos de cuán noble y noble luchaste y caíste.

(Es algo muy extraño de oír. Pero es la manera de Masamune de mostrar respeto.)

Sabía que Masamune podía separarse de mí ahora sin arrepentirse.

(El seguiría adelante, incluso si muero. Sólo sería una de las personas que le ayudaron y cayeron en el camino... Entonces si se trata de eso, eso es lo que seré. Lucharé con orgullo para que Masamune no tenga que mentir.)

Con una dulce sonrisa, Masamune besó mi frente.

MASAMUNE- Nos veremos luego.

MC- Sí. Nos veremos luego.

Masamune se fue para volver al campamento. Calmé mi impulso de pedirle que se quedara.

MASAMUNE- Una vez que hayamos llevado a todos los enfermos a la tienda de primeros auxilios, alístense. Ya casi amanece. ¡Prepárense para partir!

Kojuro- ¡Sí, mi lord!

Me moví para ayudar con el trabajo de asistencia, pero seguía mirando a Masamune.

(Masamune se va a luchar...)

Quería decirle una cosa más, sentirlo de cerca una vez más antes de separarnos, quizás para siempre, pero ya había tomado una decisión.

(Haré todo lo que pueda. Sé que él también lo hará.)

Formé una imagen de Masamune en mi mente para tenerla conmigo mientras terminábamos los últimos preparativos. En vez de la luz reconfortante del amanecer, la tormenta gris nos ensombreció esa mañana. Fuertes gotas de lluvia empaparon el suelo de negro.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.