Cada noche, hay un momento justo antes de que me duerma...
(Aquí viene otra vez.)
En ese estado nebuloso entre los sueños y la conciencia, cuando estoy descansando cómodamente en los brazos de Masamune, escucho su voz.
Masamune- MC. Te amo.
Y luego me da un suave beso en la frente. Masamune repetía este dulce ritual cada noche, justo cuando me quedaba dormida.
(Pero tengo demasiado sueño para responderle.)
No podía levantar mis pesados párpados para mirarlo. No podía abrir mis exhaustos labios para responder. Era como si Masamune esperara ese preciso momento para decírmelo. Cada noche, no me dejaba decirle que yo también lo amaba.
MC- Mmmm. Masamune...
Masamune- ¿Hmm? ¿Qué pasa?
(Oh, ya es de día.)
Me desperté para encontrar a Masamune, con un aspecto relajado, a mi lado. El sol de la mañana iluminó nuestra habitación, y me acosté justo como me había quedado dormida, acurrucada en sus brazos.
Masamune- Buenos días, gatita dormilona.
MC- Buenos días.
Masamune suavemente colocó un mechón de cabello suelto detrás de mi oreja antes de saludarme con un beso. Con la tercera caricia, estaba completamente despierta.
(Esta es mi parte favorita de levantarme.)
Estos besos de buenos días se habían convertido en nuestra costumbre desde mi llegada al Castillo Aoba.
(Esto es una bendición.)
Suspiré, disfrutando al máximo. Masamune tenía una divertida sonrisa en el rostro.
MC- ¿Qué sucede?
Masamune- Nada. Estaba pensando en lo linda que eres. Esa mirada de felicidad en tu rostro. Se ve bien.
MC- ¿Es así como me veo?
Masamune- Si.
(Haha. ¿Soy tan fácil de leer?)
Masamune- Si tan sólo pudieras ver todas las cosas bonitas que hace tu rostro. Te sorprenderías.
Masamune puso un beso en mi mejilla, y sentí que el calor persistía allí mientras él se alejaba.
(No sé cómo me veo para él. Pero no me importa mientras sepa lo feliz que soy.)
Apoyé mi cálida mejilla contra el pecho de Masamune. Él besó mi otra mejilla, y yo sonreí, riendo.
Masamune- Ahí está de nuevo.
MC- ¿Qué? ¿Mi cara?
Masamune- No diré nada.
Me tocó la cabeza y me rozó suavemente el flequillo para besarme la frente. Me recordó a sus misteriosos besos de buenas noches.
(No estoy soñando esto, ¿verdad?)
Quería oírle decir que me amaba ahora, cuando podía responderle. Lo miré a través de mis pestañas.
MC- Masamune. ¿Puedo preguntarte algo?
Masamune- ¿Sí?
MC- Esas palabras que siempre me dices antes de que me duerma. Dilas de nuevo.
Masamune- ¿Qué palabras?
MC- Creo que sabes de lo que estoy hablando. Empiezan con Te.
Masamune- No lo sé.
(¡Estás jugando conmigo! Ahora que lo pienso, no recuerdo la última vez que me dijo Te amo mientras estábamos despiertos. Solía decirlo todo el tiempo. ¡Quiero que me lo diga cuando esté despierta!)
Lo miré, buscando en su rostro la respuesta a este curioso acertijo.
Masamune- Ese lindo ceño fruncido te ganará otro beso, gatita.
MC- No me voy a quejar por el beso, pero... ¡Mmm!
Me besó donde todavía estaba fundido por el calor de anoche, y el torrente de fuego fresco se llevó mis pensamientos.
(Y todavía me llena de elogios, llamándome linda. No dudo que me ame.)
Masamune sentía fuertemente que tenía que expresarse con acciones, y sus acciones me dijeron lo mucho que significaba para él.
(Pero en realidad él me lo dice cuando me estoy quedando dormida. ¿Por qué no me lo dice cuando estoy despierta? ¡No lo sé, pero no me voy a rendir hasta que lo admita!)
Esa tarde, estaba trabajando en el taller que Masamune había preparado para mí. Mi proyecto actual era dar clases de costura y diseño, no sólo a las costureras, sino a todos los interesados.
Costurera- ¡Lo hice! Oh, Lady MC, ¡realmente eres una excelente profesora!
MC- Gracias, pero ese es el resultado de tu duro trabajo. Todos están aprendiendo muy rápido.
Vasallo- Lady MC, ¿qué tal si nos tomamos un descanso para almorzar? ¡Hay pasteles de arroz!
MC- ¡Esa es una gran idea! Creo que a todo el mundo le encantaría, ¿verdad?
Incluso había hecho que algunos de los vasallos de Masamune se unieran a mis clases cuando tenían tiempo. Cada día mi habitación estaba llena de caras sonrientes y de conversaciones animadas. Y cada día fue divertido y satisfactorio.
(Hmm. Masamune se fue muy temprano hoy.)
Su día estaba muy ocupado, con audiencias de sus vasallos, de los señores de la guerra vecinos, y de los viajes por Oshu. Los deberes de Masamune como lord y jefe de clan lo mantenían ocupado.
Costurera- Me pregunto si Lord Masamune volverá pronto. Parecía tan ocupado esta mañana. Espero que se esté cuidando.
Vasallo- Nuestro lord es fuerte y nada lo detiene. Yo no me preocuparía.
Costurera- Tienes razón. No tenemos razón para pensar que eso cambiaría ahora.
Terminando mi pastel de arroz, miré por la ventana, escuchando la charla sobre Masamune.
(Realmente es adorado por su gente. Incluso yo estoy asombrada por su energía. Pero sólo yo sé lo agotado que puede llegar a estar.)
Y me preocupé por él.
(Como lord, siente que no puede mostrar ninguna debilidad a su pueblo. Bueno, me tiene a mí cuando necesita mostrar ese lado. Sólo espero que lo recuerde.)
Estaba a punto de preguntar si la clase estaba lista para continuar cuando una voz familiar llamó a través de la puerta.