Máscara Inefable (saga Disfraz #1)

Capítulo XIII

Notables Manipulaciones.

Entorno los ojos mientras me lleno un frasco enorme de café con leche quemada, sigo sin entender como mierda la leche se me quema, pero ya me he acostumbrado al sabor por lo que no me importa mucho.

Veo la hora, aunque es temprano tendré que tomar el autobús para no caerme y desmayarme si voy a pie. Gracias al libro que leí anoche, no pude dormir, como el libro no está aún terminado quería saber que pasaba luego. Llame a la puerta de Jess para exigirle respuestas, quién se rió sin parar al verme tan desesperada, me aseguró que todo se solucionará pero no me dio ninguna pista, lo cual fue frustrante. Después de ello cuando entré a mi departamento, el miedo se hizo presente.

Al salir del edificio busco desesperada mi celular con auriculares para escuchar música que me active, pongo la canción B.Y.O.B de System of a Down, e inmediatamente mis ojos se abren de par en par. Marco la opción para que se repita una y otra vez, esto debería funcionar por un rato.

En el autobús una que otra vez mis ojos se cierran solos pero cuando la canción vuelve a empezar me sobresalto, creo que no soportaré la universidad. Una vez allá camino por los pasillos tomando café ignorando las miradas que me hacen los demás, debo de parecer un zombie. Al llegar a mi casillero, lo abro y de nuevo me hicieron la misma broma de los dibujos no aptos para todo público, parece que sólo lo hacen cuando falto un día. Cansada tomo una bolsa y empiezo a recoger todo. Alguien me quita un auricular y al verlo arqueo una ceja.

── Te ves fatal. ──Dice Ryan con cierto sarcasmo, es la primera vez que me habla de esa manera. Yo sólo continúo recogiendo.

── No dormí nada. ──Contesto con simpleza.

── ¿La conciencia no te deja dormir? ──Aunque lo dice en forma de pregunta, suena más a una afirmación. Pero tengo tanto sueño que ni me molesto en seguirle el juego.

── Me enganché con un libro. ──Me guardo para mí que no dormí por el miedo.
── Vamos a tomar un café al terminar las clases. ──Por la forma en que lo dice es como si habrá algo que no me gustará── No puedes decir que no porque no tienes vida social, amigos o simplemente gente que te quiera.

Vaya que considerado es al recordármelo.

── Y tú, te volviste como los demás, que no duda ni un segundo en hacerme sentir como lo peor que existe.

── Y tú sólo te encargas de lastimar a los que te quieren. Lauren y Jenna te quieren mucho.

Río secamente.

── Son unas perras. ──Mascullo, él gruñe enojado.

── Por eso nadie te quiere.

Yo sigo ignorando sus palabras muriéndome por aclararle las cosas, pero sigo creyendo firmemente que no servirá de nada. Hago un nudo a la bolsa y la dejo caer al suelo para tomar mis libros, entonces siento que otro llega a mi derecha, aunque el casillero me obstaculiza la vista, sé quién es.

── Yo la quiero. ──Dice Derek con firmeza── Si la vas a tratar así, te prohíbo que te acerques a ella.

¿Se invirtieron los papeles de estos dos?

Mi ansiedad crece y por más que quiero ponerme el otro auricular quiero escuchar lo que dirán, debo admitir que es entretenido cuando ellos dos pelean.

── Tú lo que quieres es tenerla en tu cama, y conociendo como ella últimamente se ha comportado, apuesto a que eso ya ocurrió, ¿Cuánto le cobraste al final, Alex? ──Pregunta con cierto asco y mis ojos se llenan de lágrimas, incapaz de creer que él diga todo eso── Te recuerdo que eras tú el que le hacia la vida imposible, sólo querías seducirla y lo lograste felicidades. Pero, ¿Qué pasó luego? Hiciste lo que siempre haces, Derek. Buscarte a otra después de humillarla aún más. Tú eres un imbécil y ella una masoquista.

Bueno, en los últimos puntos tiene razón.

── ¿De dónde sacaste que estuve con otra? ──Pregunta Derek confundido. Casi me río al escucharlo.

Definitivamente todos en este mundo tienen apariencias que engañan y expresiones que convencen a los demás, calmando curiosidades para que no se involucren más de lo necesario.

Soy así, pero al menos yo no lastimo a nadie.

── Por Dios, todos lo saben no lo niegues. Supongo que por eso estás con Alex, aparentemente es tu tipo.

── ¿Y a mí que me importa que sea mi tipo o no? Podrá ser una Friki pero es hermosa y así la quiero.

Ese intento tan patético de defenderme hace que cierre mi casillero y miro a Derek con cierto fastidio, quien me dedica una sonrisa de disculpa en definitiva a él no se le da las palabras. Me agacho para tomar la bolsa pero Derek la toma antes.

── Vaya, Alex, ¿te irás con él a pesar de los últimos tres años? No puedo creer que Jenna y Lauren tenga tanta razón de ti.

── ¿Quién es Lauren? ──Pregunta Derek hartado de la actitud de Ryan.

── Es mi novia, ella sí que es una mujer respetable.

── Seguramente me acosté con ella. ──Las palabras de Derek hace que me atragante una risa, tomo un poco de café para disimularlo.

── Tú no la conoces. ──Ruge Ryan.

── Tampoco conozco a Alexandra, pero primero la escucharía antes de juzgarla. Teniendo en cuenta de que tú eres el que supuestamente mejor la conoce.

La ironía.

Derek me toma del brazo y le arroja la bolsa a la cabeza, me aleja de ahí, caminamos en dirección al patio que hay en medio de la universidad. Todo lo que pasó anoche y antes regresa a mi mente de pronto, recordando que no debo estar cerca de él y no confiar. Me lleva hasta una parte alejada donde no nos pueden ver. Decido probar mi suerte, alzo mi palma abierta para golpearlo, pero como siempre la atrapa. Gruño con frustración.

── Perdón por lo de anoche. ──Dice en voz baja.

── Te tengo noticias, no te perdono y no lo haré tampoco.

── Alexandra, yo...

── No. ──Le interrumpo── ¿Me vas a estar tratando así? ¿Crees que soy masoquista? Me besas y aseguras sentir algo por mí, pero en realidad, sólo creo que buscas un modo de que llegues a mi punto débil y me destruyas por completo.




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