Mirada de Añil.

-Despierta- susurra la voz en mi clóset, lo escucho desde que era pequeño, -busca aquello que te guía, mi luz ya no tiene talento- tan solo mira mi alma y verás que es lo que llevo adentro, mis emociones se acomplejan cuando escucho su voz, platicamos hasta las mañanas de cuatro a cinco pero, que es lo que busca quiero ayudarte pero no lo puedo aguantar es el único que escucho mi corazón, pero su mirada es vacía esos ojos en mi clóset me hacen añorar su presencia pero también me dan escalofríos.

Quiero dejar de escuchar está voz, ya no soy un niño para tener un amigo imaginario aunque no recuerdo que fuera uno, toda mí vida me pidieron madurar, mirar hacia el futuro y dejar mi sueño atrás pero, porque su mirada la esperó con ansias y la de los demás me repugna será que alguna vez fui normal.

Cuando era normal... Una palabra con muchos significados que es normal acaso se podría definir, el mundo es aburrido tan solo quiero ser cualquier persona menos yo, por favor se mi sombra y deja que tus ojos sean solo para mí, la mirada de mi madre fue el inicio de mi obsesión, soy una persona con talento pero no con motivación, otros decearian terner el talento pero solo tienen su absurda pasión, otros obsesión pero no la capacidad todo el mundo es un desequilibrio.

Es como darle a un gato hambriento comida para perros por la hambre lo comerá sin pensar, tan sólo pudo esperar que su voz desaparezca y su mirada se devanesca, -Quedate con migo, mírame, si quieres rechazame, pero deja que tus ojos me miren tan solo una última vez- se que yo quería que se fuera pero mi corazón no lo acepta.

-Algún día saldré de la sombra y te miraré a los ojos no seré más lo que se esconde y seremos uno mismo - quiero ser solo uno no tres pero cada uno es algo diferente.