Matrimonio No Consumado Libro 1

Cap 4 Habitacion VIP

~ FLASHBACK ~

 

Después de la bofetada que Pedro le dio a Allison, esta comienza a botar sangre del lado izquierdo de la comisura de la boca y se le inflama la mejilla.

         — Maldita sea, lo que faltaba una chica malograda no la quiere nadie, a si no me vas a servir, y enojado llamo a —¡Rosa! ¡Rosa!

         Entrando la mujer, este le dice que se lleve la chica a la cocina, le consiga hielo para bajar la inflamación, que la maquille y la vista como una diosa, porque esa noche debe estar lista para la función.

         Rosa la lleva a la cocina, mientras abre el refrigerador para sacar el hielo, Allison aprovecha la oportunidad y agarra un cuchillo pequeño de abrir pan que está encima de la mesa, se lo mete en la faja del pantalón. Rosa le envuelve el hielo en una toalla y se lo pone en la mejilla, más tarde la lleva a un cuarto de vestuario para medirle el atuendo que luciría esa noche, también la maquillaron de tal forma que el golpe no se viera. Con su vestido blanco ceñido al cuerpo, se parecía a la diosa Atenea del Olimpo Griego. Entre sus prendas llevaba escondido el cuchillo.

 

~ FIN DE FLASHBACK ~

En la habitación VIP…

 

        Cuando Benjamín contempla a la joven ve en ella una cara angelical que de cierta forma le generaba tranquilidad a su angustiosa alma, mientras más la reparaba pensaba en su hija Chantal, que debía tener la misma edad de la joven, Pedro le dijo que pronto cumpliría 18 años, aludiendo que la joven estaría en sus 17 años. Cuando quiso cortar la distancia entre los dos, Allison con un rápido movimiento sacó el cuchillo debajo de la falda del vestido y apuntándole a Benjamín lo amenaza diciendo:

         — ¡Si usted se atreve a dar un paso más, le entierro el cuchillo en el corazón!

         Benjamín queda perplejo ante aquella situación, lo que vio en la joven fue valentía, ella lo apuntaba con determinación y no le temblaba el pulso, se ve que estaba dispuesta a no rendirse, cosa que él había perdido mucho tiempo atrás, ya no era ese hombre valiente, había perdido la fuerza de voluntad y se había rendido fácilmente a su enfermedad.

Benjamín reparó su rostro minuciosamente, se da cuenta de la marca que tiene en la boca, y por lo inflamada de la mejilla, puede decir que fue un golpe y al parecer fue reciente Se preguntó porque la habrían golpeado, pero viendo su osadía, supo que fue ella quien hizo provocar a su agresor.

         — Tranquila mocetona, hoy no estoy de humor para pelear, siéntate acá y hablemos como dos personas civilizadas.

Benjamín camina hacia la cama y se sienta. Allison se acerca poco a poco sin dejar de apuntar con el cuchillo.

         — No me voy a sentar en la cama, hable lo que tenga que decir—. Responde arisca ante su petición.

         — Acabo de pagar una suma considerable por tu servicio, pienso que debes comportarte amable y obedecer. Lo que te estoy diciendo es que te sientes en la cama.

         Allison traga saliva, un poco nerviosa y desconfiada se sienta en la cama alejada del hombre, pero en ningún momento baja la mano donde tiene el cuchillo.

         — ¿Cuántos años tienes?

         — 17

         — ¿Quiero la verdad?

         — Tengo 17 años —. Dice mirándolo a los ojos.

         — ¡Tus ojos me dicen que mientes!

         — Tengo 14— dice bajando la cabeza.

         — ¡Pero si eres una chiquilla de tan solo 14 años! ¡Ese cretino me ha mentido! ¡El muy cerdo se ha burlado de mí!

         Ella al escuchar la palabra cerdo suelta una sonrisa, Benjamín la observa y ve la sonrisa más hermosa que haya visto en su vida, cautivado por ella le sigue haciendo preguntas y entre más preguntaba más quería saber de aquella joven. Sus padres, donde vivía, sus estudios, intereses… y de pregunta en pregunta se fue pasando el tiempo, la conversación se hacía más amena, Allison bajó el cuchillo y lo colocó en la encimera, dentro de un cajón.

         Ambos se contaron sobre lo trágica que han sido sus vidas.

         Benjamín, que no había hablado con nadie sobre su enfermedad, se lo cuenta a esta chica de 14 años, que lo escuchaba muy atenta, Allison a pesar de su edad mostraba madurez, entendía a la perfección lo que Benjamín le estaba diciendo, era estudiante y en la escuela le hablaban mucho de las enfermedades sexuales, de drogas, cigarrillo y alcohol.

         Benjamín siente que se le suelta ese nudo que tenía en la garganta, descarga toda su pena que lo tenía ahogado, para sonreír delante de esa chiquilla que le causaba gracia con su actitud.

         De pronto a Benjamín se le olvidó su sed de venganza, sentía aliviado su corazón, aquella chica con las cosas que decía lo hacían reír, se sentía muy feliz, por primera vez desde que lo diagnosticaran.

         De repente se le ocurrió una grandiosa idea:

         — Allison te voy a sacar de aquí, pero tengo una condición.

         Ella lo miró expectante, se imaginaba con la inocencia que una chica de 14 tuviera; preguntándose que podía ser peor que llevar una vida esclavizante en un bar, estaba dispuesta a aceptar lo que este hombre dijera sin ninguna objeción con tal de salir de ahí.



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En el texto hay: romance, millonario, amor prohido

Editado: 17.11.2023

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