Después del emotivo encuentro con Leia Organa, Kylo Ren se encontraba en su habitación privada en la base imperial, enfrentando una profunda lucha interna. Se sentía agobiado por las palabras de su madre y el peso de su legado, pero también estaba atormentado por su conexión con la luz.
Frente al casco de su abuelo, Darth Vader, Kylo Ren meditaba en silencio. La imagen del legendario Sith Lord y su conflicto interno lo perseguía constantemente.
"Siento la oscuridad que corre por mis venas, pero también la luz que intenta abrirse paso", murmuró en voz baja.
En su interior, Kylo Ren luchaba contra la dualidad de su identidad. El llamado de la luz era poderoso, pero también lo era la atracción de la oscuridad. Había cometido actos atroces como Kylo Ren, y la culpa lo consumía.
En su mente, recordó la conversación con Leia y su promesa de buscar la paz en su corazón. Pero, ¿cómo encontrar esa paz cuando su ser estaba dividido entre dos fuerzas opuestas?
"¿Qué debo hacer?", se preguntó con angustia, buscando respuestas en la presencia del casco de su abuelo.
En medio de la meditación, Kylo Ren experimentó una visión que lo dejó sin aliento. Se vio a sí mismo enfrentando a Rey en un intenso duelo de sables de luz. Pero esta vez, no había odio ni deseo de destrucción en su corazón. En cambio, había compasión y un anhelo de unirse a Rey en la búsqueda de un futuro mejor.
La visión lo sacudió, y una chispa de esperanza se encendió en su interior. ¿Podría ser posible que el amor y la compasión fueran más poderosos que la oscuridad que lo había consumido?
Kylo Ren se levantó del suelo, sintiendo la determinación crecer en su interior. Ya no quería ser solo el oscuro y temido líder de la Primera Orden. Quería liberarse de las cadenas que lo ataban a la oscuridad y encontrar una forma de redimirse.
"Rey...", susurró su nombre, sintiendo la conexión con ella más fuerte que nunca.
Sin embargo, a pesar de su nueva determinación, Kylo Ren sabía que no sería fácil cambiar su camino. La oscuridad seguiría persiguiéndolo, y la Primera Orden no aceptaría fácilmente un cambio en su liderazgo.
Pero Kylo también sabía que no podía ignorar la voz de la luz en su interior. Era su última esperanza para encontrar la paz y la redención.
En su corazón, Kylo Ren tomó una decisión. Sabía que el camino por delante sería difícil y lleno de peligros, pero también sabía que era la única forma de encontrar la paz en su alma atormentada.