mayem mamen

Capitulo 8 me bese con Massimo

Narra Atenea

Después del beso, nos dimos cuenta de que era un poco tarde, así que decidimos irnos del parque.

Caminamos hasta donde estaba su coche y nos subimos. Massimo comienza  a conducir hacia mi casa. Una vez que estacionó frente a mi casa, me recuerda  que este sábado me va a recogerme para ir al cumpleaños de su madre. Claro está me pongo un poco nerviosa por conocer a su familia.

En cuanto Massimo ver a mi estado de nervios enseguida me tranquiliza  diciéndome unas cosas logrando  que no esté nerviosa después me da un pequeño beso

Después del beso, me despido de Massimo, me bajo del coche, veo cómo se marcha y entro a mi casa. Cuando entro, no hay rastro de mi madre y mi padrastro, supongo que se fueron. Siempre salen sin dejar ninguna nota. Me marcho a mi habitación y, nada más entrar, me pongo mi pijama favorito. Acto seguido, me acuesto en la cama pensando en lo que ha sucedido hoy con Massimo. La verdad es que pienso que debo darle una oportunidad. Después, me duermo.

A la mañana siguiente  me encuentro buscando entre tantas de mis ropas para estar presentable. Al final, encuentro un conjunto que consiste en una falda larga con flores y un body negro. De inmediato entro al baño y me tomo una rápida ducha. Después de haberme duchado, me seco y al salir del baño, me pongo la ropa con unos tenis negros. Colgándome mi bolso sobre mi hombro, ya estoy lista para conocer a los padres de Massimo.

A continuación, salgo de mi casa y veo a Massimo muy guapo de pie sobre su coche. Comienzo a acercarme a él y me da un beso en la frente. Luego, se aparta de mí para que subamos al coche e irnos a su casa. Cuando llegamos, no he dejado de morderme las uñas ni un momento porque estoy muy nerviosa
rápidamente me tranquiliza diciéndome que todo estará bien. Al entrar a su casa, me quedo boquiabierta al ver el lujo de la mansión.
Miro a Massimo, al cual había pensado que era de clase media, y eso me hace dudar si encajaré en ese mundo o no. 
Llegan sus padres y Massimo hace las presentaciones, pero en ese momento todos notamos lo pálido que se ha puesto el señor Enzo al verme.  

Enseguida, la señora Aurora le pregunta claramente, sin apartar su mirada de mí, diciendo:

—Ella me recuerda a alguien a quien quería mucho.  

Es mejor cambiar de tema para no incomodar a nuestra invitada y pasarnos al salón. Señora Aurora me indica dónde tengo que sentarme, por supuesto, al lado de Massimo. Después, nos sirven la comida y empezamos a , mientras que el señor Enzo comienza a hacerme preguntas y  yo le respondo con todo respeto y seguimos hablando, incluso comienza a contarme que tiene una organización.

Sin embargo, no me siento muy cómoda rodeada de lujos. Inmediatamente Massimo se da cuenta y me pregunta qué pasa. Le digo que no pasa nada, pero no me siento muy a gusto. Sin rodeos, me pregunta si quiero irme. Entonces le contesto que no, porque quiero conocer un poco más a sus padres y además es el cumpleaños de su madre, no sería justo que me vaya.

Durante la cena, todo  iba perfectamente bien. Incluso los padres de Massimo se mostraban amables, acogedores y especialmente cercanos. 
Me hace sentir un poco cómoda y a gusto hasta que Massimo me comunica que tiene algo que me quiere enseñar. Nos despedimos de ellos y salimos de su lujosa casa. Acto seguido, nos subimos al coche y Massimo comienza a conducir.

En cuanto llegamos al bosque, nos bajamos del coche y comenzamos a caminar hasta llegar a un lago, donde descubro un hermoso paisaje y Massimo me comienza a decir

—A veces vengo a este bosque cuando quiero pensar o despejarme. —Es cierto que este lugar es muy tranquilo. Incluso puedo escuchar algunos pájaros. Me hace sentir en paz hasta que cierro los ojos para disfrutar

Después de un rato abro los ojos y veo a Massimo abrazándonos mientras contemplamos el paisaje.  

Han pasado dos años y ha habido algunos cambios. Por ejemplo, ahora soy la novia de Massimo. El profesor Adonis no se me ha acercado, he pasado mucho tiempo con Massimo y su familia, e incluso he conocido a su hermana Hera. Massimo ya ha terminado la universidad y muy pronto entrará a trabajar en una empresa.  

Supuesto mi madre y mi padrastro no han regresado aún todavía a casa, pero la amiga de mi madre me ha comunicado que están en Brasil.  

Ahora mismo estoy en mi última clase hasta que suena la campana indicándonos que terminó la clase. Recogemos nuestras cosas, estoy lista para irme, pero el profesor Adonis me detiene diciéndome que necesita hablar conmigo. Le digo que tengo prisa, sin embargo, me quedo hasta que mi último compañero sale, momento en el que él comienza a hablar.  

Mientras escucho lo que me está diciendo, lo interrumpo para decirle algunas cosas claras después de haber hablado. Le digo una frase que me gusta mucho y luego quedamos mirándonos sin hablar, permitiendo que nuestras miradas se expresen.

 



#619 en Novela romántica

En el texto hay: amor, familia hogar

Editado: 23.06.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.