[9. ¿Sabes? Mejor no nos casemos]

—Ya! —grita y todos se dan vuelta a mirarlo.

Cambia su voz como cuando rapea y noto que envía un audio de dos minutos.
Las personas siguen mirándolo y él hace reverencias en forma de disculpa.

—¿A quién le mandaste un audio? —pregunto curiosa.
—¿A quién crees? —Contrapregunta serio.
—No creo que te vaya a entender —comento riéndome por su cara.
—No me importa, que busque un traductor.
—¿Cómo sabías qué decía el mensaje?
—No lo sé, supuse que era algo malo con solo ver su foto de perfil.

Ambos reímos por lo que me dice y le traduzco el mensaje.

—Entonces, hice bien en enviarle el audio.

En ese momento llega el mozo con nuestros pedidos, ambos disfrutamos la comida en silencio.

Lo mismo pasa con el domingo, disfrutamos el día porque sabíamos en el fondo que la semana sería un caos.

~• Lunes 09:00 hs. •~

Siento como me empujan para despertarme, es Lix.

—Despierta, te están llamando.
—No me están llamando, son las notificaciones —Le respondo acomodándome para seguir durmiendo.
—Qué rara tu notificación —murmura.

Empiezan a sonar nuestros celulares al mismo tiempo haciendo un sonido espantoso e irritante.
Resignados, nos levantamos para tomar nuestros celulares y ver de qué se trata.

«Boda maravillosa»
 

Ji-Min: A levantarse, señoras y señor.

Haneul: Deja de molestar, ¿no ves la hora que es?

Ji-Min: ¿Te estás quejando por despertarte a una hora que se supone que deberían estar despiertas?

Sun Hee: Me voy a salir del grupo, no quiero ver cómo pelean por aquí.

*Sun Hee salió del grupo*
 

*Ji-Min agregó a Sun Hee*
 

Ji-Min: ¿Por qué no se despiertan? @Bokkie @___

Sun Hee: Sí, despierten. Si ya lo hicimos nosotras, ustedes no tienen ningún privilegio.

Haneul: Técnicamente, sí. Son los que se van a casar.

Ji-Min y Sun Hee: ¡Cállate, Haneul!

Yo: Acá estoy, ¿qué necesitan?
 

Bokkie: Yo también, ¿qué sucede?

Ji-Min: 20 archivos adjuntos.

—Ay, ¿es en serio? —Chillo mientras veo las fotos.
—Ohhh... ¡Qué linda decoración! —comenta Lix mientras pasa las imágenes.
—A ver —Me acerco y quedo asombrada.

La temática de la boda será sobre música porque a ambos nos gusta.

—No deberías haberte quejado —Ríe y golpea mi frente.
—Hey, recién comienza la mañana no seas agresivo —Le devuelvo el golpe.

Seguimos viendo las imágenes y nos llega un nuevo mensaje de Ji-Min.

Ji-Min: Se casarán el sábado.

—¿¡Qué!? —Gritamos al unísono.

Yo: ¿Por qué tan rápido?
 

Haneul: Tienen la posibilidad de perder sus trabajos soñados, cuanto antes, mejor.

—Tiene razón, ¿no? —Me mira algo preocupado.
—Sí, es lo que hemos deseado.

Luego de eso, los días siguientes fueron un caos. Como decíamos en mi país, teníamos los sentimientos a flor de piel, cualquier cosa que nos decían o hacían la tomábamos para mal y esto creaba grandes peleas.

Me peleé con mis amigas y se pelearon entre ellas echándose la culpa de lo que para mí, eran cosas menores, por ejemplo que faltaban dos centros de mesa.

Ji-Min es muy intensa, y su intensidad en estos momentos me irritaba. Casi le arranca la cabeza cuando la chica de decoración se olvidó un par de cosas y solo faltaban dos días para la boda.

Lix estaba igual, se peleó con sus amigos y entre ellos también hubo un par de peleas. Recuerdo cómo volvía de sus reuniones, parecía un ogro que se calmaba con comida.

~• Viernes •~

Ji-Min: ¿Practicaron su baile?

Yo: ¿Qué baile?
 

Ji-Min: Por favor, denme paciencia.

Yo: Ah, ya sé. No, ahora lo vamos a practicar.
 

Bokkie: Sí.

Luego del mensaje de Lix empezamos a practicar, no hace falta tanto ensayo, a la primera nos salió bien.

—Pero, ¡qué excelentes bailarines somos! —Lix me suelta y comienza a aplaudir.

Yo asiento y sonrío, lo noto muy feliz y eso me hace feliz.

~• Sábado 12:00 hs. •~

Tengo que levantarme temprano, no hace falta decir gracias a quién, pero la señorita quería que desde las 09:00 estuviera despierta, ya que debía tener unas horas de spa para relajarme por estos días tan tensos.

Son las 12, Lix hace pasar a mi estilista y maquillista.

—¿Es muy duradero? ¿Por qué me maquillan y hacen el peinado temprano? ¿Y si pasa algo?
—Sí, tu peinado y maquillaje son duraderos. Lo hacemos temprano porque tienes una sesión de fotos en unas horas. No pasará nada, nosotras vamos a hacer retoques, si es necesario —La paciencia que tiene mi estilista es oro puro mientras que mi maquillista está callada como si analizara la situación.

Escucha los pasos de Lix a través de la puerta, este va de un lado para el otro. Solo faltan unas horas, pero, para él, parece el fin del mundo.

—La maquillista abre la puerta—. Joven, ¿puede irse a otra parte? Mire cómo me tiene —Muestra las manos temblorosas.

Miro a la estilista preocupada y ella comienza a reír.

—Tranquila, es que tu prometido la está alterando. Es la mejor maquillista con el mejor pulso, te lo prometo.
—Oh, disculpe —Siento como la voz de Lix se va alejando.

Demoran alrededor de unas tres horas, pero su trabajo es impecable, me siento como una princesa.

—Toma, este es el número por cualquier cosa, ¿sí? Estás preciosa —Ambas sonríen, les hago una reverencia en forma de agradecimiento y salen de la habitación.

A los segundos entra Lix, cuando me ve, se queda callado por unos segundos.

—¡Wooow! —Es lo único que sale de sus labios.
—¿Te gusta? —pregunto sonriente.
—Eres una novia bellísima, hicieron bien su trabajo, ya no estás fea —comenta riendo.
—Ah, ¿te convertiste en comediante?

Él asiente, se acerca y se agacha tomándome de las manos.

—Para ser sincero, estoy con algunas preocupaciones.
—Te escucho.