Me casé por el idol [t/n - Lee Felix - Kim Mingyu]

[19. No te dejes seducir por tu bias]

[Pov ___]

 

El domingo me levanté fatal, pero se encontraban los chicos para solucionarlo.

 

“—¿No recuerdas nada?

—“No, ¿por qué?

—Olvídalo.”

 

Esa conversación tuve con cada uno, imagínense responderle lo mismo a once personas.

 

Cuando les preguntaba si había hecho algo malo, me respondían que no.

 

Pasamos el día allí y luego volvimos porque cada uno tenía que trabajar al día siguiente.

 

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Eran las siete de la mañana y nos encontramos arreglándonos con Felix, voy a preparar el desayuno para ambos.

 

Recuerdo que tenemos un poco de torta de chocolate así que me ahorro bastante tiempo, preparo unas malteadas y espero a Felix en el comedor.

 

—Oh... Genial —Corre para sentarse—. Muchas gracias, bonita —Sonríe—. Mañana preparé el desayuno.

—Está bien —Sonrío y desayunamos.

 

Miro la hora en mi celular ¿¡siete y media!? 

 

—Fefi... —Tapo mis oídos—. Son las siete y media.

—¿¡Qué!? —grita alargando la letra y tapo su boca.

—Vivimos en un departamento, haz silencio.

 

Se levanta de golpe y estira su mano, la tomo.

 

—Vamos, amorcito.

 

Agarra las llaves, abre la puerta para salir y esperamos el ascensor, hace todo esto sin soltar mi mano.

 

—Tranquilo, no me voy a esca... —Me interrumpe con un beso.

 

Me toma por sorpresa, pero lo correspondo.

 

—Ya llegó el ascensor —Sonríe y se separa de mí.

—Ya comencé mi día feliz —comento riendo.

—Obvio, obtuviste un beso de Lee Felix, es un honor —habla con mucho orgullo.

—En unos segundos lograste arruinar el momento, propio de Lee Felix —Rio y él me mira ofendido.

 

¿Alguna vez se detuvieron a admirar a la persona que aman? Es algo tan mágico, mirar a Felix es como mirar el universo.

 

Suelto su mano y me mira sorprendido, pero sonríe cuando le doy un abrazo.

 

—Qué linda —Acaricia mi cabello.

 

Salimos del ascensor directo al auto.

 

—¿No te olvidas de nada? —Le pregunto mientras reviso mi bolso.

—No, ¿y tú?

—Tampoco, podemos irnos —Sonrío y él arranca el auto.

 

Esta vez no vamos escuchando música, Felix iba cantando Cause I Like You; no pude evitar recordar cuando la cantó en la fiesta y para finalizar me miró.

 

Mis mejillas ardieron de repente y escuché la risa de Lix.

 

—Llegamos, ten un buen día —dice mientras me abraza y besa mi cabeza.

—Tú también —Beso la punta de su nariz y salgo rápidamente.

 

Llego a tiempo gracias a la puntualidad del pecoso, en el camino hasta el ascensor me saluda la  recepcionista.

 

—Se nota que es tu primer día, estás muy feliz.

—No creo que sea por eso —Le respondo mientras recuerdo como comencé la mañana.

—Soy Seo So-Hyun —Hace una reverencia.

—Soy ___ ___ —Le hago una reverencia—. Puedes llamarme ____.

—Está bien, llámame So-Hyun.

 

Luego de eso charlamos hasta que llegamos, nos despedimos.

 

«Qué agradable es tener compañeros de trabajo tan buenos»

 

Llego a la oficina de mi jefe y toco el timbre.

 

—¡Pase! —Se escucha del otro lado y empujo la puerta.

 

Al entrar le hago una reverencia y él sonríe.

 

—____, ¡qué puntualidad! Me enorgulleces —Se levanta—. Vamos, por favor.

 

Salimos de su oficina y entramos en una donde tiene incluido la sala para ensayar.

 

—Ya tienen que venir —Mira su reloj un poco impaciente.

—Está bien —Comienzo a jugar con mis dedos, estoy muy nerviosa veré a mi bias.

 

La puerta se abre de golpe y entran los trece miembros, ¿¡los trece miembros!?

 

Mis nervios aumentan.

 

—¿Qué hacen todos aquí? —Lo miro preocupada.

—Bueno, ____... —Se queda callado por unos segundos—. No serás solo mánager de Mingyu, si no de todo el grupo.

 

Lo miro asombrada y comienzo a ahogarme.

 

—Nuestra mánager se está muriendo —grita Mingyu y se acerca a palmear mi espalda.

 

Le agradezco y vuelve a su lugar.

 

—¿Seré mánager de los trece?

 

Mi jefe asiente y lo único que puedo imaginar es a Bob Esponja corriendo entre computadoras quemadas.

 

Me acerco un poco y le hablo.

 

—¿Usted me cree apta para ser mánager de trece jóvenes?

 

Mi mirada se desvía a Woozi quién se encuentra golpeando a Joshua con los cordones de su buzo mientras este corre por toda la sola.

 

—Lee Ji-hoon —Elevo la voz y para en seco—. Recién comienza la mañana, guarda tus energías —Le sonrío, pero más parece una mueca.

 

Ser mánager de tu grupo favorito, puede ser fabuloso, pero pensándolo bien es una gran responsabilidad, la cuál, no me veo apta.

 

Woozi hace una reverencia y vuelve a su lugar.

 

—Sí, muy apta —murmura el jefe—. Bueno, la presentaré.

 

Mingyu, Jeonghan, Minghao y Seungkwan me miran fijamente y luego entre ellos para estallar en risas.

 

«Genial, nuestros bias se están riendo de mí»

 

La paz nunca fue una opción en estos momentos, me cruzo de brazos esperando a que terminen de reír.

 

Estoy tan molesta por el repentino cambio, ¿renuncio o no?

 

Miro el reloj en mi muñeca, pasaron tres minutos y siguen riéndose.

 

—Avisen cuando dejen de reír así sigo —El jefe está muy molesto.

—¿Estoy a tiempo de renunciar? —murmuro mientras miro al suelo.

—¿Renunciar en tu primer día? —grita y todos se quedan mirándome.



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En el texto hay: fanfic kpop, romance drama

Editado: 05.02.2022

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