El carraspeo de papá me trae de vuelta a la realidad después de una noche de sueño profundo, enseguida caigo en cuenta del ineludible viaje al planeta Tierra, viaje que tiene como objetivo fundamental ser testigo e informante de primera mano de los adelantos científicos de los terrícolas en materia aeroespacial, específicamente en La Florida donde se encuentran las instalaciones del Centro Espacial Kennedy, donde según nuestros informantes se esta planificando con todo lujo de detalles ya no solo el envío de sondas y robots, estos últimos para recoger muestras del suelo marciano y ahondar más en la investigación científica de nuestro amado planeta, sino que esta vez tienen la firme intención de enviar una misión con terrícolas… Por supuesto mi padre que es el Rey de este territorio en unión con otros reyes de los diversos países marcianos tuvieron una reunión de emergencia para tratar este relevante punto, todos muy preocupados ante las inminentes intenciones de conquista de los terrícolas humanos con fines desconocidos, cabe destacar que durante cientos de años hemos tenido espías estratégicamente ubicados en puntos de interés del planeta Tierra y ellos han ido creando todo un archivo secreto de las andanzas de los seres humanos terrícolas, donde destaca infortunadamente su talante autoritario y destructivo ambas cosas las tememos muchísimo pues nosotros los marcianos y especialmente en Alaylux vivimos en paz y armonía razón por la cual porsupuesto no queremos que bajo ningún concepto esto cambie.
Ahora con respecto a viajar con Muriel presiento que definitivamente va a poner a prueba mis concepciones de la vida de modos insospechados, así que qué más me queda que abrir los ojos, ya no me puedo hacerme la dormida por largo rato más además ahora papá me arranca la sábana y entonces algo fastidiada le digo:
—Padre ¿qué desea?, ¿no vé que estoy durmiendo?, no me dijo que debo descansar ante la inminencia del viaje?
—Pues sí cariño así es, pero ya te comenté ayer que deben viajar a la Tierra y…
Lo miré con cara de fastidio y me atreví a decirle quizá faltandole al respeto, pero bueno al fin ya al cabo es mi papá:
—Papá ya sé lo del viaje, pero por lo mismo déjeme descansar un poco más, además me va a hacer mucha falta el descanso, gracias a la maravillosa ocurrencia suya y de mi tía que definitivamente decidieron fastidiarme la vida enviando como compañera de viaje a La Tierra a Muriel la fiestera… ¿A quién se le ocurre?
Papá no tarda en contestar haciendo un gracioso mohín con la boca:
—Cariño lindo comprendo tu molestia, no te olvides que se le ocurrió a tu tía Mirna la cual es tu tía favorita, por favor Kalena, ayúdame…, sé una buena chica, tu tía mi adorable hermana es alguien muy especial, ella de verdad siempre está pendiente de nuestro bienestar y nos quiere, hazme ese favor dulzura y ya verás que te recompensaré adecuadamente por este favor que me haces, por favor, por favor…
—Está bien papá, está bien…, bueno por lo menos déjame vestirme y después de desayunar vamos al estudio a planificar el viaje.
Él enseguida me contesta:
—Esa es mi chica…, por cierto, Muriel y tía Mirna vienen en camino, así que no te tardes…
La puerta se cierra una vez que papá sale de mi habitación y me quedo yo sola elucubrando acerca de mi incierto destino, teniendo como único testigo el cielo arrebolado tan característico de Marte.
***
Dispuestos a desayunar en la compañía de mi tía y mi prima, mis padres y mi muy tremendo hermano Cilión, primeramente nos sentamos en la amplia mesa del comedor donde el inmenso ventanal permite contemplar una majestuosa mañana de cielo rojizo con aquel punto luminoso llamado sol que con una tenue luz azul se afana en imprimir claridad a todo el recinto.
Mi hermano que ya está al tanto del viaje me mira de modo socarrón y con esa sonrisa sarcástica tan propia de un adolescente enseguida me expresa:
—Caray hermanita, te ves realmente muy “feliz” con el viaje y qué mejor compañía que Muriel… ¡ja,ja,ja! — yo lo miro con ironía pero no midió sus palabras y prosiguió —.Bueno te aseguro que la pasarás muy bien en La Florida con la reina de las fiestas, muy pronto seguramente ella será una celebridad de la vida nocturna…¡je,je,je!
Luego de modo alegre y suelto le expresa especialmente a papá:
—Bueno papá, eres un “genio”, vas a enviar a un importante misión a la santurrona de mi hermanita y a la loca de mi primita, una mezcla inigualable, claro todo fue idea de nuestra adorable tía Mirna, quien por lo mandona parece más la reina que mi propia mamá.
Ví con cierta alegría que mi hermano me apoya y sin querer esbozo una ligera sonrisa, por eso le echo una mirada llena de satisfacción, mas de pronto observo que papá nos mira con ojos centelleantes y dice:
—Bueno, Bueno… —me fijo que papá mira a mi mamá de reojo, por su actitud me convenzo que mamá tampoco está convencida con la idea de papá y tía Mirna y se ve que por ello han tenido una importante discusión a puerta cerrada, así que saliendo de su mutismo tan lleno de ruido a lo profundo de su mundo interior papá expresa a modo final:
—Bueno familia, yo no puedo negar que albergo mis dudas con respecto a este viaje donde Muriel va a estar incluida, pero bueno hija, haz lo que puedas con ella y cualquier cosa estaremos en contacto para guiarte y ayudarte amén de contar con dos informantes de nuestra más estricta confianza.
De pronto se hace el silencio y cruzan el umbral tía Mirna y Muriel, ambas se ven muy serias y después de un afectuoso saludo familiar se incorporaron a la mesa y nos sentamos a desayunar silenciosamente…
***
Mientras comemos me fijo que Muriel y tía Mirna lucen ropas veraniegas, como todos en esta época del año marciana, y es que definitivamente Marte está en verano y la temperatura oscila entre los 2 y los 10 grados centígrados en esta fecha.
De pronto la mesa se llena de las gratas conversaciones de tiempos pretéritos de mis padres jóvenes y mi amada tía, dando paso a todo tipo de divertidas anécdotas todas perfectamente comprensibles dado que mi padre aunque es el rey fue una vez un joven y también un tierno bebé y especialmente el muñeco predilecto de mi tía, la verdad, no se puede negar que ambos son unos hermanos que se adoran y al contemplar tanto cariño y amor entre ellos, me reconcilio un poco con la idea de emprender este viaje con mi prima Muriel, a sabiendas de que quién sabe qué sorpresas se presenten en el camino?, además me convenzo a mi misma que: solo vamos a estar tres meses en la Tierra y todo va a estar muy bien.