Me gustas, tonto.

Capítulo 9: Desgracias.

05 de enero de 2015.

19:45.

Es un lunes por la tarde y estoy arreglando mis cosas para la juntada de mañana con mis amigos. Me fijo si no me falta nada más y cuando me doy cuenta que no, cierro mi mochila y la meto en mi ropero para luego tirarme a mi cama.

Agarro mi celular y lo desbloqueo para entrar a WhatsApp, y ver varios mensajes.

Helena
Estoy emocionada por la juntada de mañana. 😝

No pasan ni 30 segundos y Miel me responde el mensaje.

Miel
¡Yo también!
¡Es lo que necesitamos!
Hace mucho que no salimos los cuatro

Miro el techo de mi cuarto y es verdad, hace mucho que no salimos los cuatro juntos.

Miel
Dice Mateo que va a llevar a su novia

¿Verónica? ¿Irá? Bueno, yo no tengo problemas con ella, pero se me hace cansante que ella quiera estar en la juntada cuando la única vez que se vio a nuestro lado fue en Navidad.

Apago mi celular y lo pongo al lado mío.

Me levanto de mi cama para ir a la cocina y prepararme algo de comer mientras pienso en Verónica.

—¿Estoy sintiendo celos? —Pienso.

Siento mi sangre hervir y tengo unas ganas inmensas de romper algo. No hago caso mis pensamientos y sigo preparando mi comida.

—Tal vez estoy enojada porque tengo hambre —digo.

20:30

Ya he comido y ni con eso me siento tranquila ni feliz.

—Tal vez si salgo, me sienta mejor. —Vuelvo a decir.

Voy a mi cuarto, saco mi bolso y mis llaves mientras le mando un mensaje a mi madre en donde le explico que iré a dar una caminata de 30 minutos por el barrio y que no me alejaría mucho para que no se preocupe.

《《《《《《 》》》》》》

Camino tranquilamente mientras trato de calmar mi respiración por la frustración que estoy sintiendo en estos momentos.

—¡¿Por qué estoy enojada?! ¡No lo entiendo! —Pienso.

Detengo mi caminata cuando escucho mi celular sonar y lo saco de mi bolso.

"Mateo"

—Lo que faltaba... —Pienso un momento si contestarle o no— No, no le voy a responder, no quiero desquitarme con él. —Le rechazo la llamada y vuelvo a guardar mi celular en mi bolso.

Sigo otra vez con mi caminata, creo que si me alejo un poco de mi barrio, no me haría tan mal, después de todo, mi madre no lo sabrá.

Y eso hago, me alejo de mi barrio para irme a otro y encontrarme con un parque no muy grande. Me siento en uno de los bancos y saco mi celular porque empieza a sonar otra vez.

"Otra vez Mateo"

Me rindo y le contesto la llamada, en la otra línea se puede escuchar cómo llora. Me preocupo porque no es muy normal escuchar a Mateo llorar.

—¿Mateo? —pregunto— ¿Qué te pasa? —Vuelvo a preguntar para luego sentarme bien en el banco.

—Discutí muy fuerte con mi madre, Lena. Me corrió de la casa —Su voz empieza a quebrarse y en unos poco segundo escucho su llanto tan desconsolador—. No tengo a dónde ir, Lena. Mi mamá le dijo a la mamá de Miel que no me acepte y mi tía le hizo caso.

Estoy sorprendida, mi boca está entre abierta, mis ojos muy abiertos mirando un punto fijo hacia el piso del parque.

—¿Dónde estás, Teo? —pregunto para levantarme del banco.

Teo me dice la dirección y corro para allá, por suerte no está tan lejos de dónde estoy y en 15 minutos llegaré ahí.

《《《《《《 》》》》》》

Veo a Teo sentado en una escalera con su cabeza sobre sus manos, creo que está llorando.

Me acerco lentamente sin hacer ruido, puedo escuchar cómo llora, trata de no hacer ruido para no llamar la atención seguramente.

—¿Teo? —Lo llamo en un susurro— ¿Estás bien? —pregunto mientras toco su hombro.

Él levanta su mirada y me quedo sorprendida por lo que veo, sus ojos están muy rojos por tanto llorar, su nariz también está muy roja y sus labios hinchados.

—Está muy lindo. —Pienso.

—Teo, ¿qué pasó? —pregunto y luego me siento en la escalera al lado suyo.

—Peleé con mi madre porque quiere mudarse a otra provincia y yo no quiero mudarme, Lena.

Frunzo el ceño y trato de hablar, pero se me es difícil.

—¿Lo corrió de su casa solo porque dio su opinión? ¡Esa señora está muy loca!

—¡¿Solo por eso te corrió de la casa?! ¡Es una vieja loca tu madre! —digo para luego pararme.

Agarro el brazo de mi amigo para levantarlo y darle un abrazo de apoyo.

—Tranquilo —digo mientras le doy golpecitos en su espalda—, vas a vivir en mi casa mientras tanto y vas a ponerle una denuncia a tu madre —Me separo un poco de él para mirarlo fijamente—. Además, mi mamá estaría muy contenta porque tendría a su favorito en su casa. —Le regalo una sonrisa.

Se ríe y asiente a lo que digo, luego me vuelve a abrazar por un rato largo para después separarse.

—Vamos, que ya van a ser las 22 y ya debería estar en casa —digo.

《《《《《《 》》》》》》

Empezamos a caminar, pero la duda me está matando y decido preguntarle.

—Mateo, ¿mañana vas a llevar a Verónica a la juntada? —pregunto.

Siento que ese gran peso que sentía en mi espalda se va.

—No —Agacha la mirada hacia el piso—. Verónica y yo terminamos, Lena.

Abro los ojos por la sorpresa recibida y me tapo la boca.

—Pero... —Me quedo callada por un momento— ¿Por qué terminaron?

—Verónica me engañó con mi primo, Lena.

—¡¿Qué?! —Pienso.

—¡¿Por qué?! —exclamo.

—Lena, primero vayamos a tu casa, me siento muy cansado y me duele mucho el cuerpo.

Asiento a su petición y empezamos a caminar, ninguno de los dos hablaba, solo escuchamos como nuestras zapatillas suenan por el piso.

《《《《《《 》》》》》》

22:45.

Ya estamos casi cerca de mi casa, estamos caminando, riéndonos y haciendo chistes tontos que no entendemos.

Cuando ya estamos enfrente de mi portón, veo a mi madre en la ventana de su cuarto con los brazos cruzados y con una mirada de enojo.



#8735 en Novela romántica

En el texto hay: romance, amor, amistad

Editado: 27.12.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.