Capitulo 2

Al momento que Eloy abrio la puerta de mi asiento todas las miradas se dirigieron a mi lo que me incómodo al punto de no querer bajar del auto.

-¿Por que todos me miran? -Pregunte a Eloy al momento que me pose a su lado.

-La mayor parte de los presentes ansiaban tu presencia -Informo.

-Eso significa que la menor parte me quiere desaparecer de la faz de la tierra -Hable con sarcasmo.

-¿Por que siempre le vez el lado negativo a todo? -Me pregunto indignado.

-Es un placer tenerte aqui con nosotros -Una mujer castaña se acerco a mi con suma alegría -Soy Marizol, la cuñada de Eloy y principal encargada de la mansión cualquier cosa que necesites puedes decirme -Me dijo.

-Bienvenida -Otro de los presentes se acerco a mi -Alonzo a tus ordenes Sandra -la mención de mi nombre me hizo pensar en que talvez Eloy si tenia razón de que todos en este mundo conocían de mi existencia.

-Veo que ya conocen mi nombre lo que es bueno asi me ahorro las presentaciones -dije indiferente.

-Eso es lo que tanto habias buscado -Un chico que se encontraba al pie de la mansión cruzado de brazos y observandome de pies a cabeza llamo la atencion de todos los presentes -Una mocosa egocéntrica, malcriada -Dijo sin remordimientos mientras mantenia su mirada en Eloy -Muchas felicidades, has encontrado a un verdadero diamante en bruto -Dijo con sarcasmo para darse la vuelta y empezar a subir los pequeños escalones que dirigían a la entrada de la mansion.

-Aparentemente pertenece a la menor parte -Dije rodando los ojos a lo dicho.

-Sekoun sadaa hachichia {Sera un verdadero dolor de cabeza} -Dijo el chico al terminal de subir los escalones. Todo se encontraban mirándolo a el y luego a Eloy.

-Si quieres insultarme hazlo en español, al menos asi podre fingir que me sentí ofendida a tus palabras -Dije sin pensar y todos me miraron.

-Y gastar mis palabras queriendo hacerte sentir mal -Voltio a verme justo antes de abrir la puerta de la mansión -No te creas tanto, no eres tan importante -Volvió a lo suyo y se adentro a la mansión.

-Primero que nada, lo que dijo mi hermano no fue un insulto, el es asi y en segundo lugar bienvenida a la mansión espero podernos llevar bien -Una castaña de ojos miel se acerco a mi y me ofrecio su mano en saludó -Kiara, hija de Eloy -finalizo.

Sin decir nada estreche la mano de la chica y sonreí.

-Bien ya es suficiente por hoy, Marizol enseñale a Sandra cual sera su habitación -Ordeno Eloy para luego retirarse.

Emprendimos camino hacia la mansión que segun tenia entendido solia ser la mansion Jensen y que ahora es conocida como la mansión de Eloy Hannah.

Kiara junto a Marizol me guiaron por toda la mansión hasta la tercera planta de esta y llegar a la que ahora seria mi habitación y que antes solia ser la de mi madre y que segun ellas no fue cambiado ni un solo detalle desde que Eloy conservó la mansión como premio por haber ganado la guerra.

Esta daba la impresion de que mi madre vivia infeliz en esta mansión junto a aquel hombre que decía ser su padre.

Era oscura, de tonos oscuros, cadenas, libros, sábanas oscuras que cubrían algunas cosas, plantas apenas vivas adornaban la orilla de una enorme puerta de cristal que daba salida a un enorme balcón con vista a una parte de los alrededores de la mansión.

Todo se veía tan desolado que inspiraba tristeza total a todo aquel que entrara en ella.

-Bueno, a simple vista sabemos que no parece lo mejor pero esta solia ser una de las mejores habitaciones de esta mansion y asi solia tenerla tu madre, por ordenes de Eloy no fue movida ni una aguja - dijo Marizol mientras -Eloy dio la orden que la habitacion solo seria remodelada si era tu decisión asi que si quieres hacer algun cambio no dudes en decirme, yo pondré a un personal bajo tus ordenes para que te ayuden en todo -Dijo para retirarse.

-Bueno, ahora es mi turno de decirte que eh mandado a una chica del personal por algunas prendas para que utilices hasta que podamos ir de compras -Dejo las bolsas en la cama -Me disculpo si no resultan ser tu talla pero espero y entiendas que no tengo ni la menor idea de que talla eres -Me dijo, señalo una puerta que apenas y notaba -Ahí se encuentra el baño, arreglate en un par de horas paso por ti para bajar a cenar -Me dijo para luego retirarse.