El trayecto a nuestro destino, fue silencioso. Pero no un silencio incómodo, era uno tranquilizador.
Eran cerca de las 8 y media de la noche, a lo lejos se podía escuchar los hermosos sonidos del mar y la brisa se empezaba a sentir.
Yo: Estamos en la playa?
Jazmín: Sorpresa!!
No dije nada más y me dispuse a ver el camino. Al llegar a nuestro destino, entramos a un restaurante que estaba frente al mar. Al momento de acercarnos se nos acercó un camarero y recibió nuestras órdenes. Estábamos en silencio y decidí romper ese silencio y le pregunté.
Yo: Ahora, me puedes responder, quien te dijo donde estudio?. El me Miró unos segundos y contestó:
Jazmín: Preciosa ya te dije que lo sé todo, no confías en mi?... Este ya era el colmo, acepte que no me lo dijera en el camino hacia aquí y ahora me Salta con esto? Ya me va a escuchar.
Yo: No. No confío en ti, ahora o me dices como obtuviste esa información, o ya mismo me iré de aquí.
El me Miró sorprendido por mi reacción y al fin contestó.
Jazmín: Me lo ha dado Chase... Me quedé pensando unos minutos recordando cuando le había dicho a chase donde estudiaba y a que hora saldría, y recordé que una vez el tenía algo que decirme y le dije donde estudiaba y a la hora que saldría.
Yo: Ah... Ya entiendo, disculpa mi reacción, espero que para la próxima me lo digas de una vez y no vengas con rodeos, y sobre chase ya hablare con el más adelante.
Jazmín: Esta bien me disculpo, debí decírtelo antes.
Yo: No te preocupes.
La noche pasó entre risas y miradas seductoras. Después decidimos caminar entre la arena y mirar la Luna. Luego me llevó a mi departamento, se despidió de mí y se fue a lo que creo fue su casa. No sin antes decirme te veré mañana preciosa. Lo miré sorprendida con lo que dijo pero opté por adentrarme a mi departamento y descansar. Había sido un día largo.
Espero les guste...