Melodia perfecta

Capitulo 2

Tres semanas después de haber conocido, o más bien haber visto al chico que se ha convertido en mi sombra, mi día, y mi noche, estaba en una pequeña fiesta que haríamos los jóvenes de la iglesia. A decir verdad estaba aburrida y no quería ir, pero a Rose no se le puede decir que no, había tenido un día no muy agradable y como siempre ella era la responsable de que haya estado en este momento ahí.

Mientras todos estaban en el medio de la sala de la casa de Job hablando sobre lo que sea, yo estaba lejos de ellos, perdida en mis pensamientos, donde estos tenían una batalla constante sobre mis nuevos comienzos en la secundaria dentro de unas semanas, la aplicación de la beca para la ELAM, y el pianista de ojos cafés que me tenia patas arribas desde que lo vi.

- Vamos Mel, diviertete un poco.- dijo Rose sacándome de mis pensamientos.

- Me quiero ir, estoy cansada.- dije estirando mis brazos por encima de mi cabeza y luego poner mis manos en mis rodillas como si estuviera intentando respirar normal.

- Los chicos están hablando de los músicos, tal vez puedes saber algo sobre tu pianista.-me respondió con una mirada pícara mientras subía  y bajaba sus cejas.

La idea me resultó muy agradable, demasiado para mi gusto, no quería parecer desesperada y si algo he aprendido en mi vida es a ocultar mis emociones. Negué con la cabeza, me levanté de mi asiento con direccion a la puerta.

- ¿Ya te vas pitufa?- escuché gritar a Job. Asenti sin mirar atrás y seguí mi camino.

Salí de la casa con la cabeza baja, me sentía tan cansada que si mi cama estuviera cerca seguro caería como zapato y moriría. Job no vivía tan lejos de mi casa y era algo fenomenal ya que al ser el mejor amigo de nosotras - mío y de Rose- es bueno cuando tengo una de mis crisis lo puedo llamar y él va urgente. Es el mejor amigo del mundo.

A una esquina de mi casa tropecé con alguien que iba muy rápido, al levantar mi rostro y ver el suyo mi corazón se detuvo un segundo, era él, mi pianista, el ladrón de mis sueños, él único chico en el mundo que me ha puesto así de nerviosa en toda mi vida.

- Lo siento, no veía por donde iba.-Estaba tan fascinada por él que ni caso le hice.

-Ok.- me límite a decir y salí corriendo como loca. Sólo pude escuchar como decía algo más, pero no pude comprender que era eso que decía.

¿A caso se podía ser más torpe? Déjame responderte a eso; No lo creo.

 

🎶🎶🎶🎶
Pov Ángel

Esa chica es rara, demasiado diría yo. El día que estábamos en la iglesia pude sentir como su mirada me taladraba, a pesar de que era una niña, y una muy loca y tierna, algo en ella me decía que no era igual a Mabel. Cuando sostuve su diminuto cuerpo entre mis manos se sintió como tocar un pedacito de cielo, pero ver su cara y ese rubor me puso nervioso por lo mucho que me gusto ser el causante de eso.
Sí, es raro sentir esto por ella, más porque tengo a la chica más guapa del grupo de jóvenes de la iglesia, y es mi novia, mía.

Llegué a casa de Job un poco tarde de la hora acordada, estaba terminando de revisar algunos ajustes en mi piano e intentaba convencer a Mabel de que viniese, pero ella es ella y nunca vendría a este tipo de reuniones.

Todos estaban sentados en el círculo en el centro de la sala contando una que otra cosa, cuando me vieron entrar todos me vieron raro, más la amiga que acompañaba a la chica con la que acabó de tropezar, ahora que lo pienso ni su nombre sé.

- Perdón por llegar tarde, esta...

- A nadie le interesa lo que te pase lindo, termina de entrar e integrate.- dijo esta chica, para mi era un poco arrogante, tenía mucha confianza en si misma y se veía que a pesar de que era una creyente no se sujeta a esas estúpidas tradiciones de vestir como cristiana común, siempre que me la topaba iba muy bien vestida. Lástima que no es mi tipo, y si quería molestar, a ese juego podemos jugar los dos.

- Mira, "linda". Solo estaba siendo amable, pero como eres una grosera bruja que no lo es, a mi si me importa mierda lo que digas. - Me miró de arriba abajo inspeccionandome, cuando sus ojos se fijaron en los míos pude ver fuego, fuego de ese que te consume.

- Ni sé que te ve Mel, en verdad eres patético.- la miré más confundido que el gatos con botas luego de haber despertado borracho en casa de Bob esponja un 31 de diciembre. Y eso ya era mucho.

- ¿Quien es Mel?- me voltee a ver a nuestro alrededor y pude ver como todos nos miraban fijamente, el rostro de Job había tomado un leve tono de rojo, la chica me miraba un poco enojada. Tal vez la había hecho decir algo malo, no sé que rayos estaba pasando aquí, ¿porqué todos están tan sorprendidos?

- Rose, la has cagado amiga. Esa bocaza tuya- dijo Job levantándose del piso para luego salir de la sala y seguro entrar a su habitación ya que luego escuchamos un fuerte portazo.

- ¿Me podría decir alguien quien carajos es Mel?- pregunté mirando a nadie en particular, me tenían nervioso.

- Es la mejor amiga de Rose y Job, ella se acaba de ir. - Respondió Luna, otra compañera del grupo. Yo no conozco a esa chica.

- No la conozco.- dije dirigiendome a la mesa y tomar un trozo de pizza de la caja.

- Mejor así.- susurra Lauren lo bastante fuerte como para que la escucharamos.

- ¿Qué?- pregunté mirándola fijamente.

- Ella es una buena chica, dedicada, inteligente, escribe genial, esta loca por conseguir una beca para ingresar a la ELAM y alguien como tú solo la lastimaría Ángel.- Lauren y yo somos amigos, muy buenos, casi hermanos, y si ella la conoce y habla asi de esa tal Mel por algo es.

- ¿Crees que la lastimaría?- digo fingiendo estar herido. La verdad es que sí lastimaría a esa chica, una porque ya tengo novia, otra porque me da igual lo que sienta, y otra porque no quiero nadie cerca de mi enamorada. Eso es todo una basura.

- Aquí todo lo creemos.- dijo levantando un poco el mentón, para luego escuchar como todos decían que si o asentían.



#11681 en Joven Adulto

En el texto hay: primer adios, primermor

Editado: 02.03.2019

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