Siete

Ellen.

El sonido de las olas inunda mi mente, la sensación de la arena pegada a la planta de mis pies es relajante. Ante mis ojos, el inicio del cielo oscuro se pierde con la oscuridad del mar.

La ciudad al fondo es un gran paisaje que apreciar.

Desde que me fui de casa de mis padres, he tomado la costumbre de venir a la playa durante la noche siempre que me siento una mierda de persona, siempre qué la soledad cala en mis huesos recordándome lo fría y cruda que es, y la única que me acompaña.

De alguna u otra manera Emma siempre tiene razón. Quizá mi destino es quedarme sola, acompañada de mi mascota para toda la vida.

Jack esta con Emma, Xavier se fue a Estados Unidos, y Joseph nunca quiso estar conmigo realmente, solo buscaba tratar de olvidar a su ex novia con la cual termino volviendo.

Tomé asiento sobre la fría y húmeda arena. No quiero volver a casa, Jack estará ahí, y no resistiré en contarle que ha pasado. Sé que puedo contar con él, pero no es correcto. Lo que me dijo no es correcto, lo que siento no es correcto.

Tampoco lo que hizo, pero eso ya no importa.

Me dolió mucho enterarme que Jack era esa persona con la que Emma estaba comenzando a formar su familia, me dolió mucho enterarme que fue específicamente Emma. Me dolió mucho.

Pero, siempre ha sido así. Emma siempre se queda con todo, la mejor ropa, la atención de mis padres, mis amigos. Y yo siempre seré quien se queda sin nada, sin nadie.

Jack.

No estoy enterado al cien por ciento de lo que sucedió con Elody y Emma, pero si estoy seguro que algo pasó. Emma llegó al departamento furiosa, gritando por ella, no obstante Elody no ha llegado. Logré tranquilizarla un poco, y cuando por fin se quedo dormida llamé a Elody.

No respondió. Le dejé un par de mensajes que tampoco le han llegado. Eso me preocupa. Desde que llegamos no ha venido a dormir ni una sola noche.

De: Jack.

¿Qué fue lo que pasó? Emma esta furiosa.

De: Jack.

Sally, sé que Emma es difícil, por eso quiero escuchar de ti lo que pasó ¿Dónde estas? Me preocupas.

De: Jack.

Vale, sé qué no querrás hablar de ello. Hoy es nuestra última noche aquí, mañana por la mañana regresamos.

De: Jack.

Hay algo importante de lo que quiero hablar contigo antes de irme, por favor ven a casa.

No obtuve ninguna respuesta a mis mensajes. Tampoco pude dormir bien esta a noche, igual que las anteriores. Pensar que Elody pase la noche en otro lugar me quita el sueño.

Emma duerme tranquila en la alcoba de su hermana, y yo en la habitación de invitados junto a Magnus, la cm es más pequeña pero cómoda. Aun así no pude cerrar los ojos en toda la noche esperando a que ella aparezca.

Vuelvo a fijarme la hora en mi móvil, on casi las tres se la mañana.

Decidí que intentaría al menos saber donde esta, me puse los zapatos, tome la correa de Magnus, y en silencio salimos del departamento.

Al llegar a la recepción, un chico joven llegaba al mostrador.

—Disculpa, ¿Sabe si Elody ya llegó?—quise saber.

Tal vez si este en el edificio, y solo no quiera llegar a casa.

—¿Elody?

Cierto, nadie la conoce por su nombre real.

—Perdón, es Ellen. Ellen Prescott.

—Ah, no. Fui al baño durante diez minutos, no se si ha llegado alguien.

—Vale, muchas gracias.

Salí acompañado de Magnus, tal vez no encontraría a Elody por ningún lado, pero quizá un paseo nocturno me ayude a conciliar el sueño.

Di un par de vueltas no muy lejos, las calles frías y vacías causan un escalofrío en cuerpo por lo que decido regresar.

Mi esperanza se mantiene en que al llegar Elody estará en casa, no lo está.

No ha llegado.

Vuelvo a acostarme pensando en donde podría estar.

Al despertar, todavía no ha aparecido. Me obligó a levantarme y organizarme para volver a casa, antes saco a Magnus a pasear con la esperanza de ver a Elody en el parque.

Nada.

Ni siquiera cuando regreso.

Emma ya tiene todo listo, sigue molesta por que su hermana no ha aparecido para disculparse, le dejo comida a Magnus antes de salir del departamento.

En la recepción, Emma le avisa al portero de que avise a Elody qué nos hemos ido. Mientras hace eso, capte un movimiento por la zona de las escaleras del estacionamiento.

Ahí esta, se devuelve a esconder su cuerpo detrás de la pared al vernos.

No digo nada.

Sé que quiere que nos vayamos.

Con Emma, salgo del edificio. Ella para un taxi, murmurando cosas sobre que Elody no este aquí para llevarnos a la central de autobuses.

—Es una mala hermana, siempre ha sido una mala hermana—sigue diciendo—Ahora por su culpa tendré que pagar un maldito taxi.

—Oye, olvide mi teléfono—le hago saber cuando no subo al auto.

Suelta una gran cantidad de aire, recargando su cabeza en el asiento trasero.

—¿Por qué tienes que ser tan idiota?

—Vuelvo rápido.

—Más te vale que no te tardes, Jack—dijo entre dientes bajando la voz—. Estoy harta de todos.

Corrí hacia el ascensor.

Sé que Elody no quiere hablar conmigo, pero al menos quiero despedirme.

Volví al departamento, ella estaba ahí, sentada en el sofá. El vestido blanco que traía al subir por las escaleras del estacionamiento lo remplazo por una enorme sudadera y unos shorts.

Ni siquiera se sorprendió al verme.

—Elody.

—¿No te ibas ya? —preguntó sin verme.

Magnus esta recostado en sus piernas.

—Solo quiero despedirme de ti.

Me miró directo a los ojos. Ojos cuyos rasgos siempre me han gustado. Ojos que ahora se esconden detrás de un armazón.

—Adiós. Ya esta, ya puedes irte a continuar tu vida perfecta con Emma.

Pero yo quiero hacer mi vida con ella, no con Emma. Quiero decirle todo lo que siento, todo lo que pienso. Quiero compartir mis días a su lado, como antes de que...