Nuestro vacío

Al borde del vacío lucho por alcanzarte, mientras recuerdo todo aquello que te convierte en alguien especial, pero mis lágrimas invaden todo aquello que puedo ver.

Te aceptaba a ti con tus tristezas, tus problemas y tus defectos, porque eso te hacia ser tú, esa mirada tuya, tan vacía, tan rota, como leía tu pasado y tus tristezas, las cuales sentía tan mías, regálame tu tiempo prometo valorarlo, como lo más preciado a mi alcance.

solo tu notaste esas lagrimas que mi alma pena, Aquello que lastima con creces mi corazón cautivo y que va robando pequeños trozos de tu cariño, pero verte, verte me hacía tan feliz, pero a la vez tan, pero tanto daño, ahora a tu lado encuentro la desdicha.

puse en juego mis ganas de vivir, tal parece yo perdí, quien diría que de tanto pensar se llega a dudar, en realidad simplemente se deja de esperar, es igual para ti este futuro no es nada especial, ocultándote tras palabras que hieren las más dulces intenciones, tan viva a la vez tan muerta, tan dulce, pero en el fondo tan amarga, esto es algo que solo sucede una vez cada cien años, tal si fuese un encanto.

Como podíamos sin dormir soñar y sin aire respirar, ya no quiero hacerte llorar no sé si es algo fácil de vivir o si eres tu quien me motiva.

De qué sirve la vida si al final nada fue suficiente, inmotivada ante los cambios bruscos de la vida, sin fijar un punto al vacío, solo que la muerte nos espera, pensando siempre en el sueño que no perseguí anhelo que no viví, el abrazo que no di, y esos brazos que tanto extraño, sin entender al destino y cuestionar el presente.

Aquel juego perdido en el lugar donde termina todo, el nivel que nunca pase, donde siempre fracase en seleccionar la opción correcta, no se talvez era reconfortante que igual a ti yo también fuese una mala persona, si al mirar atrás las lágrimas brotan, tras dolorosa existencia, tan vacía de todo, tan llena de ganas de nada.

Volvámoslo a intentar, me pregunto, por qué eras parte de ese juego y por qué tú, eres ese nivel que nunca superaba, la luna llena, afuera aullidos de lobos resuenan, esta vez sí lo superare.

Analizare, tu madures, pero también tu infantil forma de ver todo, eras tan fuerte, pero a la vez tu corazón débil suplicaba protección, eras poesía y me perdí entre tus versos, de pronto me invades, toda tu, tan llena de vida, tan lejos de todo, eras la definición de amor por la vida, pero te superaban tus ganas de morir, tan dulce trago amargo, tan cálida copa de hielo, llena de ansias por hallar un poco de alegría entre tu tristeza, al verte quisiese mirarte por siempre, de tus ojos negros mi alma prendada y de tus cabellos nació mi deseo.

Me gustaba tu tristeza, tu vacío, aunque ella te causase inmenso daño, admiraba bastante, tu posición ante la vida, como eras capaz de sonreír a pesar de que tu corazón estuviese en medio de espinos, y que, a pesar de las estaciones, no negaras tu vida, que posaras entre el heno tus problemas, que tu alma lóbrega no encontrase vacío en la tristeza, que disfrutaras cada lonja de felicidad que te daba la vida, que matizaras de colores tu tristeza, que tus intenciones al obrar eran puras, que fueses la luz para quien el la obscuridad vivía, que desearas no tener nada pendiente, que ansiaras el orden en tu vida, que a pesar de lo negativa, brille completa tu alegría.

Amaba tanto tu naturaleza, como el mundo te cambiaba, como eras, como fuiste, serás siempre la más bella.

A tu lado, mi tristeza encontró una compañía, y mi vacío un amigo, a tu lado sonreír pude, sin falsedad sentía, nos llevamos muy bien, pues claro me entendías, como me sonreías al pasar por tu ventana, siempre clara tenías esa mirada tuya, si entre espinos transitaba eras mi fiel compañera, y si de matizar se trataba con una sonrisa me decías, fuera el aire fuera todo podría cambiarlo de vía, y si el camino era lóbrego la claridad pronto vendría.

Como vivía mi vida sin caminar por tu cielo y como volaba tras huidas sin pasar por tu suelo, cuando quebrada me hallaba, en tus brazos mi consuelo y ahogaba las risas por compartírtelas luego.