mi nueva vida

Ingrid

El recreo ya estaba a su fin, platique muy poco con ella pero con lo poco que la trate parecía buna persona, un que no pude conocerla muy bien pues tenía que quedarme después de la escuela para realizar los exámenes que se hicieron en todo el año así que estuve en la escuela hasta muy tarde, aun que como Jada no hubiera hendido casi nada de lo que venía ahí como Ingrid era una experta, aparte de todo lo demás aumentaron mis capacidad intelectual, regrese a casa un poco cansada así que comí algo y sube a cambiarme y recostarme un rato, desperté al poco tiempo pues sentía a alguien sentado alado mío, era la señora Alma

• (Alma): perdón hija te desperté, pero quería saber si quieres ir con migo al centro comercial a pasar una tarde de chicas
• (Ingrid): claro que si madre déjame prepararme y nos vamos

No podía dejar de pensar que cada cosa que hacía para ellos era como una prueba para buscar el más mínimo defecto, me sentía abrumada ante todo pero intentaba parecer lo más feliz posible, fuimos y pasamos a tiendas de ropa, zapatos y artículos, aunque yo tenía ya todo lo necesario al parecer le hacía feliz verme así con ella, pasamos a un salón de belleza y nos detuvimos a cenar en un lindo restaurante lujoso, platicamos de cómo nos había ido en nuestro día, era algo extraño pero con ella no sentía toda esa presión que sentía del señor Cristian, parecía como si en verdad disfrutara estar con migo, como si me viera como su hija, talvez esa era la razón por la que vine para hacerla feliz a ella, aunque no era seguro, pues no fue la primera a quien vi, pero algo era cierto con ella me sentía más libre de exprésame, cuando llegamos a casa estaba Royal el tío que no me quería cerca y el señor Cristian mi padre con el cual aún no era certero como me veía, subí a mi habitación pues así me lo ordenaron acomode todo lo que señora alma me compre y realice mi tarea de la escuela, la cual fue fácil de hacer quise estudiar un poco pero en el intento me quede dormida en mi escritorio que estaba cerca de mi puerta, cuando desperté abrí los ojos ligeramente y al oír voces decidí quedarme quieta completamente eran Royal y Cristian hablando sobre mí.

• (Royal): no estoy de acuerdo que esa niña ocupe el lugar de mi dulce sobrina, jamás la podre ver así, fue dura su perdida, pero no tenías que hacer esto.
• (Cristian): lo ice más que nada por mi esposa, además sabes que ya no podemos tener más hijos, y si la encamino bien en un futuro podrá ser la unión con otras empresas, si sabes a lo que me refiero.
• (Royal) pero si falla solo sufrirán más de lo que lo hacen
• (Cristian): si lo hace sabes cuales son las consecuencias y ella no será la excepción, por eso hay cámaras y micrófonos en todas partes para vigilarla

Mis sospechas eran ciertas siempre me tienen vigilada, si me levando ahora sabrán que finjo o que simplemente acabo de oír todo, así que decido dormir ahí como si no hubiera despertado, para mantener la actuación que llevo y así ponerme en peligro. Desperté con mi alarma de mi celular un poco adolorida por a verme dormido en mi escritorio, ignore ese hecho y tome un baño para ir a la escuela y me prepare, toda la semana que tuve fueron de exámenes y fue un poco pesada pues además tenía que elegir un club, para lo cual elegí música con la cual ya me siento familiarizada, pero aquí te enseñan a tocar diversos instrumentos no solo uno, y aunque esto no sería nada fácil para mí al menos sabía que mi familia estaba bien.

En unos pocos meses termino el ciclo escolar y salí como la mejor calificación de la escuela a pesar de haber entrado después, Gretel fue de gran ayuda como una amiga pues siempre estuvo apoyándome y ayudándome, sin duda aquí también encontré una buena amiga y aunque no le podía contar mi verdad sabía que podía confiar completamente en ella, y mientras daba lo mejor de mi sentía que para el señor Cristian nunca era suficiente, pero para la señora alma era un orgullo, abecés no sabía que sentir, pero aun no era el momento de sacar mi emociones, tenía que demostrar que habían hecho un buen trabajo con migo. Al final de la primera semana de vacaciones escuche nos visitó David el hijo menor de Royal, llego saludando muy amablemente a todos excepto a mí, talvez la verdadera hija de los señores que hora eran mis padres no se llevaba bien con él pues en los recuerdos falsos estaba que ella siempre lo molestaba bromas pesadas y nunca se disculpaba, pero en quería al menos también quería tenerlo como amigo, pues si sería mi primo no estaría mal, el señor Cristian le pidió que en esta vacaciones me enseñara defensa personal, aunque al principio dudo no se negó en enseñarme.

• (Ingrid): Primo ¿qué tal te ha ido con tus estudios en el extranjero?
• (David): no seré blando contigo solo porque por primera vez muestres interés y amabilidad en mi vida
• (Ingrid): bueno si quiero aprender bien no espero que seas blando, solo quiero pedirte disculpas por lo que hice en el pasado, me gustaría que pasáramos página y comenzáramos a llevarnos mejor.
• (David): normal mente no diría esto, pero te oyes sincera así que iniciemos de nuevo, pero si vuelves a la de antes jamás tendrás otra oportunidad.