Memorias de cristal

La Última Luz

Elián y Dania corrían por los túneles mientras el sistema colapsaba. Alarmas digitales zumbaban por toda la ciudad. Los drones de vigilancia perdían el control, y los hologramas caían como cristales rotos. Ciudad Lúmina estaba al borde del apagón total.

—¡Nos queda poco tiempo! —gritó Dania.

Elian llevaba en su mano el núcleo del cristal. En su interior, pulsaba una energía viva, como si supiera que su final estaba cerca.

Llegaron al centro de control: una torre suspendida por cables, donde todo el poder de la ciudad convergía. Allí, un último código esperaba ser introducido. Uno que lo cambiaría todo.

Jean Carlos ya los esperaba, herido, pero de pie.
—Sabía que vendrías… —dijo, con sangre en los labios—. Pero no vas a ganar.

—Tú ya perdiste, Jean Carlos —dijo Elian—. Perdiste el día que usaste el conocimiento para controlar, y no para liberar.

—¡El caos se desatará sin mí! —rugió él.

—Entonces el mundo aprenderá a levantarse —respondió Elian.

Activó el cristal. Luces azules y doradas rodearon la sala, mientras una última elección aparecía frente a él:

¿Reiniciar la ciudad y borrar el control?
¿O absorber el sistema y convertirse en el nuevo guardián?

Elian miró a Dania.
—¿Qué harías tú?

Ella sonrió, con los ojos llenos de fe.
—Conviértete en luz… no en sombra.

Elian cerró los ojos… y tomó la decisión.

Reiniciar. Liberar. No controlar.

Presionó el comando.

Una onda expansiva recorrió Ciudad Lúmina. Las torres se apagaron. Las pantallas se fundieron. Los códigos se deshicieron como polvo en el viento. Jean Carlos cayó de rodillas, derrotado.

Pero Elian… seguía en pie.

—¿Estás bien? —preguntó Dania, acercándose.

—Sí —respondió él, con lágrimas en los ojos—. Por fin… soy libre.

Desde lo alto, vieron cómo las luces volvían poco a poco. No digitales, sino reales. Personas encendiendo velas, lámparas. Redescubriendo la oscuridad… y también su propia luz.

Dania lo tomó de la mano.

—¿Y ahora qué?

—Ahora… escribimos una nueva historia —dijo Elian.

Y juntos, bajaron las escaleras, mientras el sol salía por primera vez en mucho tiempo sobre una Ciudad Lúmina verdaderamente libre.

FIN.



#161 en Joven Adulto
#300 en Thriller
#129 en Misterio

En el texto hay: ficción misterio

Editado: 22.05.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.