Memorias de una Falacia

Memoria diecisiete

En este poema.

En este poema le diré mil cosas,
le diré mil cosas que usted no sabía,
en este poema me desahogaré,
así que sientese y tome un café.

Usted no sabe cuanto he sufrido,
usted no sabe cuanto he llorado,
mi infancia en un pensamiento,
fue hecha pedazos.

No sé que pueda pensar de mí,
quizás que le guardo rencor,
pero aunque no se lo demuestre,
la realidad es que le tengo mucho amor.

De sus hijos
y aunque no lo crea,
lo he necesitado más,
he sentido su ausencia constantemente,
y con nada lo puedo llenar,
de sus hijos he sido más fuerte,
y la que lo a amado más.

Todas las veces que le dije que lo odiaba,
lo que realmente odiaba es que no estaba conmigo,
todas esas veces que le grité y grité
usted no entendía el porqué.

Los días se convierten en años,
y nadie a comprendido mis llantos,
me duele saber que no me entiendes,
me duele saber que nadie lo hace,
pero evadiendo ese tema pues no es el punto,
quiero que sepa que yo sí lo amo,
aunque nunca se lo digo.

Me he arrepentido muchas veces de tratarlo mal,
a veces he pensado que en la cara no lo podría mirar,
pero aquí le digo la verdad.

Tengo un vacío en mi alma,
que me mata lentamente,
pero quiero que sepa,
que siempre lo tengo muy presente.

En este poema le dije mil cosas,
le dije mil cosas que usted no sabía,
y espero que usted ahora entienda,
pues usted es el fruto de mi vida.




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