Historia Mágica

Hansey se quedó en silencio cuando Johnny le preguntó sobre la actitud rara y repentina de Mike. No sabía qué contestar, pero debía responder porque podría resultar contraproducente.

—¿Repentino interés? —preguntó, luego, le llegó algo a la mente— ¿Eso quiere decir que Mike no estaba interesado en Darcy?

Johnny notó que podría usar esto a su favor.

—Él no estaba interesado. Fue algo que sucedió de la noche a la mañana, como si hubiera pasado un fenómeno que cambió todo.

—Es que sí pasó algo… —dijo ella, ingenuamente.

—Yo estaba seguro de que él podría interesarse en alguien más, menos en Darcy —siguió con el tema.

Al escuchar estas palabras, Hansey recordó cuando Darcy fue a reclamar…

¿Por qué dices que ‘es hermosa cuando pelea’?

—Podría interesarse en… mí.

Ya casi la tenía. La joven miró a Johnny, estaba dispuesta a contarle todo lo que sucedió. Le inspiraba confianza, él jamás iría a decirle a alguien sobre esto.

.

Por otra parte.

—¿Cómo le haremos para robarle la Joya Azul si siempre está en la escuela? —preguntaba Derek.

—Creo que lo mejor es que vayas tú y se la quites —sugirió Javier, dirigiéndose a Sheila.

El trío estaba afuera del FC Gakuen en ese momento.

—Eres la más poderosa de los tres, si no quieres que la palabra ‘fracaso’ aparezca de nuevo, deberías encargarte personalmente.

La mujer lo consideró. No sabía exactamente que había sucedido, aunque tuviera el libro de la historia mágica de la ciudad. Ahí solo decía que había fracasado por un viaje en el tiempo, sin más detalles.

—Debo saber primero qué fue lo que pasó —fue su respuesta.

—¿Por eso no nos has ordenado atacarla? —preguntó Derek.

—Antes de que ustedes la atacaran por primera vez, en el libro no venía nada de eso. Obtuvimos nuestros poderes hace 5 años y los estuvimos perfeccionando, hasta estos días decidimos buscar la Joya Azul… ¿Cómo es posible que haya cambiado el contenido?

—Tú creaste ese libro, deberías saberlo —comentó Javier.

—Por eso estoy muy intrigada. Hice el libro para registrar todo sobre mis antecesores, sobre la magia en esta ciudad que lleva existiendo por generaciones… quise saber todo. El hechizo que usé hace que la historia mágica se escriba sola. Todo lo que está en el libro es verídico, se escribe mágicamente, nadie puede mentir porque nadie lo escribe.

—¿Estás segura de que todo lo que está escrito es verdad? —preguntó Derek.

—Sí, la misma Reina Ámbar me confirmó los datos del pasado. Hasta me felicitó diciendo que era un material muy útil.

Derek y Javier se miraron, sorprendidos al saber esto.

.

Regresando al pasillo de la escuela, Hansey estaba decidida a contar todo. Johnny no la presionaba de ninguna manera, era muy paciente, sabía que solo era cuestión de tiempo.

—No puedo decirte lo que pasó aquí —dijo al fin—. ¿Podríamos ir a otro lugar después de la escuela?

—Sí, por mí no hay problema —respondió él.

—Es un tema muy importante, sé que tú guardarás el secreto. No se lo dirás a nadie, ¿verdad?

—Puedes confiar en mí.

—Entonces… nos vemos a la salida.

Se pusieron de acuerdo.

.

Terminó la jornada escolar. Katsou se despidió de Johnny, sabiendo que él tendría una salida con Hansey, actuando con naturalidad. La chica llegó a donde estaba y, una vez que se miraron, comenzaron a caminar. Nora y Andrea iban saliendo del edificio, había una gran distancia entre el edificio y la salida general del colegio.

—Mira, ¿no es Hansey? —habló Nora— Parece que está saliendo acompañada de Johnny. Pensé que le gustaba Mike. ¿O… los estoy confundiendo y él es Mike?

Andrea miró hacia la pareja que se alejaba. No lo podía creer, ¿Qué estaba haciendo Hansey con él? ¿Acaso le iba a decir lo que ella le confesó días atrás?

—Es Johnny —fue lo único que contestó y siguió caminando hacia donde la esperaba su transporte.

—¿Eso quiere decir que ahora saldrá con él? ¡Claro! Ya se rindió con Mike porque anda con… —Nora recordó que tenía un asunto pendiente— Ahora que no está presente, tal vez deba hablar con esa Darcy.

—Haz lo que quieras.

Se fue, sin darle importancia. Nora quedó sola y rápidamente buscó a su medio hermana. Andrea subió al auto. Se encontró con un inesperado acompañante.

—¿Erick? Creí que saldrías con alguna tonta de otro salón.

—Creí que te irías caminando. Estoy cansado y quiero ir a casa.

El auto comenzó a andar.

—Creo que a Hansey no le importo —siguió hablando—. Porque ni siquiera se pone celosa cuando salgo con las demás chicas.

—¿Es en serio? ¿Después de lo que te hizo buscas su interés?