Mentiras Peligrosas

#2 Fricción

Trinity, 2013

Jennifer despertó en la penumbra de su hogar. Sola. Su única compañía era el comercial de televenta que se estaba sintonizando. Pero eso no es lo que la había despertado. Había sido un golpe estrepitoso, seguido de un forcejeo y un grito en la parte de arriba.

Imaginó lo peor. Ray había perdido la cabeza y estaba sufriendo de otro de sus ataques.

Para cuando se dio cuenta, Jennifer ya había dejado el sofá de la sala atrás, ahora se encontraba subiendo las escaleras con sigilo, debilitando su respiración y minimizando la perturbación acústica.

Su corazón iba a destiempo con su cuerpo, sentía una inmensa presión en el pecho. Porque hacia eso, porque subía con lentitud cuando podía correr y descubrir lo que sucedía en un segundo. La respuesta es simple. Le aterraba el suspenso y el mismo suspenso le generaba un pesar emocional.

Cuando llegó al segundo piso se incorporó al pasillo, los retratos familiares le miraban fijamente desde las paredes. Todas las puertas estaban cerradas a excepción de una, la del cuarto de Leonard.

Dio pasos cortos y delicados. No quería que nadie se alertara con su presencia.

Al pasar unos cuantos metros escuchó el ligero sonido de apoyo de alguien sobre el suelo. La vibración le llegó hasta los pies provocándole un escalofrió. Ya en el umbral de la puerta decidió empujar con ligereza, para que le mostrara todo el interior de la habitación.

Podía sentir su propia respiración, podía escuchar el aire viajar a través de sus pulmones y hacia fuera.

La puerta quedó entreabierta, de pronto divisó a alguien descalzo, apoyado sobre sus rodillas, inclinado sobre algo. La presión la estaba matando, era ahora o nunca. Abrió la puerta empujándola de una patada. En el suelo se encontraba Ray junto al cuerpo de su hermano. Este volteó con la mirada perdida en cuanto escuchó el ruido de la puerta abrirse.

Ray estaba cubierto de sangre, de la boca hasta las piernas y todo apuntaba a que era la sangre de Leonard. Este se desintereso en el cuerpo de su hermano y comenzó a avanzar torpemente hacia Jennifer, la cual estaba paralizada del miedo frente a semejante escena. Esta última intentó tomar la perilla de la puerta para cerrarla, pero no fue tan rápida. Ray se había filtrado por el espacio y ahora se aferraba con fuerza a la puerta que intentaba cerrar.

Fue una pelea definida a perderse, Jennifer sabía que Raymond era extremadamente fuerte, por lo que retrocedió sin apartarle la mirada lo más rápido que pudo. No había escapatoria, él la encontraría. Trató de tomar la escoba que estaba en el pasillo, pero Ray saltó sobre ella. Intentó quitárselo de encima empujándolo, pero su fuerza no tenía comparación.

Jennifer gritó en busca de ayuda, estaba desesperada y apenas se encontraba reaccionando al cien por ciento de sus capacidades. Por su parte Ray intentaba arrancarle un pedazo de piel de un mordisco, aún no había logrado ponerle los colmillos encima.

Ray abrió su boca y forzó su camino hacia el cuello de Jennifer, esta no tuvo más de otra que defenderse poniendo lo único que tenía a su disposición como barrera, su brazo. Los colmillos aterrizaron sobre este y se clavaron como dagas sobre su carne. Jennifer gemía de dolor y continuaba gritando por ayuda.

Se escucharon pasos acelerados que venían del otro lado del pasillo, era Raymond padre, el cual se encontraba cargando contra Ray con una guitarra en mano como su única arma de defensa. Este le asestó un golpe con la guitarra, las cuerdas de esta salieron desprendidas de su posición, la cabeza de Ray impactó contra la pared del pasillo, dejando una grieta en la pared, estaba listo para cargar contra su nuevo atacante, pero Raymond padre había sido más rápido y le volvió a golpear con la guitarra, volviéndolo a golpear contra la pared, este repitió el proceso una y otra vez hasta que Ray cayó al suelo inconsciente y con una herida en su cráneo.

♦♦♦

Cuando Ray despertó, trató de moverse como cualquier otro día, pero sus manos estaban encadenadas y adoloridas, quedó atónito al percibir las quemaduras que tenía en las muñecas. De su cuello también pendía de una cuerda la cual le causaba dolor cada que intentaba respirar.

Intentó comprender la situación en la que se había metido, pensó que es lo que había hecho y fue cuando recordó. Recordó haber atacado a Leonard, a Jennifer. Recordó haber perdido el control.

Esta situación en la que se encontraba era la medida de seguridad que Raymond y Jennifer habían ideado para mantenerle a raya sin tener que matarle.

Ray se vio inundado de emociones y rompió en llanto. La garganta le ardía y le causaba tos el tan solo respirar. Intentó secarse las lágrimas de la cara, pero las cadenas no le permitían acercarse tanto. En ese momento se dio cuenta que estaba solo y que no había nadie que pudiese ayudarle.

 



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En el texto hay: vampiros, horror

Editado: 30.11.2023

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