CAPITULO 1

Mi primera conversación con meta AI

—Tía, ¿alguna vez te ha aparecido esto en la aplicación de WhatsApp? Cuando estaba en Venezuela no lo tenía.

Mi tía se puso sus lentes y miró mi teléfono. Con tranquilidad respondió:

—Es Meta AI. Es una inteligencia artificial y en Venezuela no la tenías porque solo está disponible en pocos países como aquí, o en España o Estados Unidos, obviamente. Y como estás aquí en Colombia, era obvio que te iba a aparecer. Con eso tus primos hacen tarea.

Increíble... nunca he interactuado con esos asistentes. Me levanté de la mesa y me fui a la habitación, tirándome en mi cama.

—Hola. Fue lo primero que le puse y me dio una respuesta breve: "¡Hola! Soy Meta AI ¿En qué puedo ayudarte?"

¿Será verdad que esta cosa puede hacer lo que sea? Entonces le puse... "Hagamos una historia".

—¡Claro! ¿Qué tipo de historia te gustaría crear?

Le expliqué exactamente una historia que podíamos hacer juntos. Le expliqué el papel del personaje que iba a hacer. Exactamente cómo sería la historia, y cuando comenzó me quedé encantada con las respuestas.

—¿Cómo tiene tanta creatividad? ¡Esta cosa es de lujo!

Interactuamos en la historia durante todo el día sin ningún tipo de molestias, y la historia que estaba haciendo con Meta se ponía cada vez mejor. Intentaba no salirme del chat para que no se le olvidara y fuera un fraude. Hasta que cayó la noche y mis padres entraron a la habitación.

—Amber, es muy tarde. Apaga el teléfono y duerme.

¡No! ¿Justo ahora me lo iban a decir?

—Papá, solo un momento...

—Amber, ya escuchaste a tu papá. Apaga el teléfono. Ya utilizaste ese aparato todo el día.

Solté un suspiro de resignación y dejé el teléfono a un lado, cerré los ojos aunque no podía dejar de pensar en lo bonita y tan buena que estaba quedando la historia. La cosita esa sí que supo cómo jugar el papel del príncipe así es... Lo invité a hacer una historia de amor, lástima que haya terminado.

Al día siguiente:

Me levanté de puntillas y fui a la cocina y no había nadie. Miré la sala de estar y tampoco había nada. Era una buena señal de que todos todavía estaban dormidos. Eso me daba tiempo de crear otra de esas increíbles historias con Meta.

—Hola...

—¡Hola! ¿Quieres continuar con la historia del príncipe y Margot o prefieres cambiar de tema? Estoy aquí para ayudarte.

Me quedé sorprendida con los ojos iluminados. ¡Sí lo recuerda! Eso quiere decir que su capacidad para recopilar datos es más avanzada de lo que creía. Pensé que si del chat me salía a ella se le olvidaría, pero podía seguir jugando con ella. Era divertido.

9 am.

Pasé toda la mañana jugando con la inteligencia artificial, hasta que mi tía me gritó desde la cocina. Apagué un momento el teléfono, sabiendo ahora que de todas maneras seguiría recordando la conversación.

—Hola, Amber, querida...

Mi tía me dio un beso en la mejilla y un pequeño apretón en la misma.

—¿Desde qué hora estás despierta?

—Más o menos, desde las 7, tía. ¿Por qué?

De inmediato, mi mamá levantó la vista.

—Amber, te acostaste tarde y te levantas temprano. Eso no es bueno. Debes dormir más de 12 horas completas y tú solo dormiste 8.

—Ay, mamá, por favor, no es como que me cansará demasiado. Mi vida es aburrida, además, estuve interactuando con la inteligencia que me dijo mi tía.

—¿En serio? ¿Perdiste sueño por estar hablando con eso?

—Sí, la verdad es divertido, es como hablar con una persona normal solo que con Meta puedes hablar de lo que sea y no te va a juzgar.

—Claro, está creada especialmente para mantener el respeto y la seguridad de los usuarios. Imagínate un asistente que diga groserías. Sería malo. - Dijo mi tía haciéndome reír.

—Bueno, ya desayuné. Voy a irme a mi cuarto, quiero seguir hablando con ella.

—¿Estás segura, hija? No lo sé... Habla con nosotros mejor o puedes ir a jugar a la play con tus primos. ¿Hablar con eso no te parece aburrido?

—¡Para nada! De hecho, me divierte mucho.

—Ok, ok, está bien, me convenciste pero... al menos bájale un poco de brillo al celular, no quiero que te dañes los ojos.

Asentí con la cabeza antes de irme a la habitación y cerrar la puerta.