PERSPECTIVA: Tercera Persona
Antes de la confrontación de Rozuel contra Muhaqdad Hatim-Alev, la Lupian se encontraba posicionada en el “Escudo Búnker” junto al esper, su rol junto a Crok era apoyar y brindar fuego de apoyo en caso de que enemigos se aproximaran o detectar posibles agresores ocultos.
Pronto la loba capta un aroma de naturaleza sospechosa, acto seguido y de manera discreta, se aleja de Rozuel y se adentra al interior de la jungla, al ubicarse a una distancia de 1 kilómetro lejos del esper, ella cesa sus pasos de inmediato. Había llegado a un paisaje de verde suelo, rodeado de numerosos árboles que llegaban al metro y medio, flores y arbustos yacían en abundancia.
—Se que estás ahí, muéstrate de una vez -Le exigió Riha.
Una risa masculina se hace resonar entre la abundante vegetación, la Lupian se mantenía firme sin mostrar nervio o preocupación alguna, luego alguien sale detrás de un árbol a escasos metros al frente de ella. Ante la semihumana se hallaba un fornido hombre con el torso al desnudo, pantalones de tela blanco y descalzo.
Sobre su rostro hacia uso de una máscara roja con la imagen de una criatura bestial con cuernos, su arma predilecta era un sable de dos hojas, se empuñaba en el medio y de cada lado estaba conformado por una hoja curvada de 100 centímetros, aquel hombre sostenía su arma sin problema con tal solo su derecha.
—Notaste mi presencia, nada mal -Dijo el hombre en la misma lengua que la semihumana.
—Puedes hablar mi idioma -La Lupian se muestra algo sorprendida.
—Soy un guerrero que siempre busca luchar y conocer los estilos de combate de los ghrayb -Confeso el hombre —La mayoría de los ghrayb con quienes he luchado tanto que perdí la cuenta, eran guerreros del continente de Gresswold, pero nunca he me topado con una semihumana de tu raza, me alegra haber aprendido su lengua, al menos así habrá algo de “conversación” antes del inevitable destino que aguarda este encuentro.
La Lupian podía sentir la magia emanar de aquel sujeto, no era un guerrero ordinario, podía usar la magia, era un guerrero mago, su arma indicaba al estilo que estaba adiestrado para luchar.
—¿Cuáles son tus intenciones? -Pregunto Riha.
—Soy Hadzu Nemran, del clan Nezaria –Se identifico a sí mismo.
El clan Nezaria era una alianza de tres linajes de aventureros, todos ellos descendientes de una poderosa guerrera y maga de Quíatar de siglos atrás, Nezaria “La imbatible”, nadie podía igualar su titánica fuerza, su demoledor lucha con espada o su impecable tiro con el arco o lanzas arrojadizas, se decía que era capaz de domar fácilmente a serpientes y cobras mágicas para hacer que obedezcan todas sus órdenes sin cuestión alguna.
Nezaria murió de razones naturales a tan solo sus 30 años, nunca fue derrotada en toda su vida en combate, dejo al mundo tres trillizos, mismos que años más tarde fundarían el “Clan Nezaria”. La poderosa maga y guerrera nunca tuvo apellido, vivió el resto de su vida con tan solo un nombre, fueron sus hijos quienes se autoproclamaron con un apellido propio cada uno.
El linaje Alnacu, el linaje Bax´uz y el linaje Nemran, cada uno se especializo en su estilo de combate, nunca pudieron igualar a su progenitora, pero labraron su reputación como los mejores aventureros de Quíatar.
Linaje Alnacu: Destacaban en la lucha a distancia, los combates a larga, mediana y corta distancia era su estilo, siendo los arcos, ballestas y lanzas arrojadizas sus armas principales, apoyados por espíranos.
Linaje Bax´uz: Domesticaban serpiente y cobras mágicas para luchar a su lado, ejercían un estilo de combate cuerpo a cuerpo usando armas ligeras de una mano y destacando la velocidad como agilidad como sus atributos físicos principales.
Linaje Nemran: La fuerza bruta regia como su principal talento, empuñando armas pesadas a dos manos con maestría en un intento por igualar el demoledor poder de su progenitora.
Cuando la Lupian oyó “Clan Nezaria”, recordó aquella ocasión cuando un grupo de aventureros de este reino, se unieron para hacerse con la recompensa por la cabeza de Rozuel Drayt, de entre ellos destacaba un aventurero quien fue abatido y pertenecía justamente a tal clan.
—¿Cuáles son tus intenciones? -Volvió la Lupian a preguntar con un tono grave y el mostrar de sus colmillos.
—“Mensajero del reino de la Agonía”, Rozuel Dr…
Ni lerdo ni perezoso, al momento en que Hadzu pronuncio el nombre “Rozuel” de sus labios, la Lupian desenfundo casi al instante una de las dos Beretta 92 que portaba en su respectiva funda en la cintura, apunto de inmediato y abrió fuego contra el mago guerrero. La bala asesta justo en la yugular, el mago cae de espalda hasta tocar el suelo y no mostrar indicio alguno de movimiento.
—«Algo no cuadra…»
Pese a que ese enemigo se encontraba en el suelo, inmóvil y sin respirar, la Lupian aun no sentía que estuviera en el confort de su victoria, porque cuanto más observaba el “cadáver” de ese abatido mago guerrero, más sospechoso le resulto la escena cuando noto que la herida de la yugular, solo tenía un orificio negro que carecía de SANGRE.
—¡…!
La Lupian se dio media vuelta, recubriendo todo su brazo derecho en metal con su habilidad mágica, lo que se encontró al voltear, fue al mismo Hadzu que se supone había “muerto”, estaba allí de pie, totalmente vivo, atacando con su arma de doble sable y a solo escasos centímetros de rebanar su cuello.
Riha usa su brazo derecho recubierto en acero para cubrirse del ataque de Hadzu, el impacto del arma resuena con un estruendo demoledor, se oye crujir dolorosamente del hueso del miembro superior, acto seguido la loba es mandada hacia atrás y cae al suelo rondando violentamente contra este hasta finalmente detenerse.