PERSPECTIVA: Rozuel Drayt
Apenas llegue fui recibido por las brujas encargadas de vigilar los perímetros de Windaz, tan pronto se dieron cuenta que era yo, fueron a comunicárselo a su líder, la Eldar.
Lleve la carreta al centro del pueblo en donde madre y mi hermana estaban allí, era inevitable que rompieran a llanto al ver el cuerpo sin vida de Walter. Las ceremonias funerarias no eran tan diferentes al de mi mundo, en el cementerio se encontraban reunidos una multitud para despedir a mi padre y mi hermano Euber, los familiares (nosotros) teníamos el derecho de ser quienes más cerca estaban de las tumbas mientras se llevaba a cabo el entierro.
Fue una trágica noche y una semana deprimente, incluso en el día en que Windaz cumplía otro año de existencia, no hubo espíritu festivo, la muerte de Walter desencadeno un impacto gradual de manera negativa, ¿recuerdan la importancia del comercio para Windaz?, sin él, el pueblo se encontraba en problemas.
Aunque en el asunto de la comida, el agua y la seguridad eran algo que las brujas gozaban aun sin el comercio, privarse de este medio por un lapso mayor de tiempo resultaría que el poblado cayese en el estancamiento, mucha de las materias primas tanto de menor a mayor importancia precisan ser obtenida mediante esta actividad.
Para una bruja buscar maneras de asegurar una ruta comercial con el pueblo suma un riesgo absoluto, primero dado a la reputación de las mismas (brujas) a causa del temor que se infunde hacia los demás dificultaría hallar a alguien de confianza que desees abrir un relación de comercio, sin olvidar mencionar la hostilidad hacia ellas lleva a desafortunados encuentros con cierto grupo de gente que están dispuesto a capturar viva a una para esclavizarla y venderla al mejor postor, una bruja fuera de su aquelarre puede ser visto con ojos indiferentes de desprecio o ambiciosos como un “producto” valioso, resulta complicado para todas hallar una solución.
A los pocos días de enterrar a mi padre y del aniversario de Windaz, se llevó en el ayuntamiento una crucial reunión para debatir sobre el tema, claramente no fui invitado dado que era un tema a discutir entre “adultas”, pero poco me importaron sus requisitos para asistir, la Eldar me dio su permiso y tome asiento entre un circulo junto al resto, cerca de tres docenas de personas estaban allí.
—Se prevé que Windaz comenzara a verse afectado en 10 meses si no encontramos una solución para comerciar con el exterior –Aclara una de las presentes.
— ¡Entonces debemos enviar a alguien afuera, quedarnos aquí con los brazos cruzados no hará que un comerciante caiga del cielo como regalo!.
— ¡Tonta!, ¿sabes el riesgo que afrontan las brujas fuera de sus aquelarre?, aunque enviáramos a dos o tres, no hay garantía alguna de que vuelvan sano y salva, estaríamos al principio del problema.
— ¿¡Y que propones entonces!?, ¿¡esperar un milagro!?.
—¡Calma a las dos, así no hallaremos sino más discusiones inútiles!.
—¡Es fácil para ti decirlo cuando siquiera se te ocurra algo!.
—¿¡Que dijiste!?, ¡dímelo a la cara si tienes algún problema conmigo!.
No eran tan diferentes que los funcionarios de mi mundo a la hora de discutir en televisión abiertas cualquier idiotez sobre leyes y política, escucharla me daba dolor de cabeza, la Eldar era la única que se mantenía en calma sin opinar y escuchando solamente.
— ¿Aburrido? –Me pregunto Naya ubicándose a mi lado.
—Más bien molesto, discuten las personas pero no las ideas –Respondí yo.
—¿Y a ti se te ocurra algo en mente?.
—Quizás… no, más bien, si tengo algo en mente, una decisión.
—¿”Decisión”?.
Intente hablarles para que se callasen un momento y dejaran compartir lo que tenía por decir, pero ninguna de las brujas me escuchaba o prestaba atención, el griterío entre ella superaba en creces mi intento por tener su atención, la paciencia se me estaba por acabar y mi solución más “racional” era sacar la pistola y dar un disparo en el suelo, pero no hubo necesidad de hacerlo.
Un fuerte aplauso se hace sonar en el lugar callando a todas, era la Eldar quien lo hacía.
—Agradezco a todas por sus sugerencia, pero hay alguien que también quiere dar su opinión respecto al tema, Rozuel, ¿hay algo que quieres compartir con el resto? –Me pregunto la Eldar dándome la palabra.
—Sí, gracias por su atención –Contesto levantándome de mi asiento.
Me situó en medio del círculo, con todos los ojos de los presentes enfocados en mí, algunos pocos inconformes de dejar hablar a un niño de mi edad sobre un tema delicado.
—Es complicado, ¿no?, deciden lidiar el problema con solo enviar a unos cuantos a su suerte, pero, ¿tan poco confían en que no lo lograrían? –Ese comienzo resulto con unos murmullos molestos por parte de algunas oyentes brujas —Iré al grano con la siguiente pregunta, ¿cómo es que alguien ajeno a un aquelarre puede percibir a una bruja?, la respuesta está en la “percepción”, los magos son capaces de sentir las energías mágicas a su alrededor y con ello “sentir” la bendición de Astado, incluso los no magos “afinados” tienen la misma capacidad, cuando una bruja manifieste algo de su poder es cuando deja salir a la luz la naturaleza de su magia e identidad, pero incluso se sabe de personas capaces de sentir la bendición de las brujas aun si ellas mantienen oculta su magia, hablamos de individuos con percepciones sensoriales ante el mana más avanzados y eso complicas aún más las cosas, ¿no?.