PERSPECTIVA: Tercera Persona
Carina Svensdotter, desde su oficina atendía asuntos administrativos en compañía de su mascota búho sentado sobre un soporte para aves, pero no era la única compañía presente de la Eldar del aquelarre Wicau, pues otra persona de su mismo rango político se hallaba junto a ella.
—Debo felicitarte, aunque te ablandaste, has hecho un gran progreso para las brujas –Dice una contenta Merga Voetxac, Eldar del aquelarre Grimar.
— ¿De que estas hablando?, yo solo hice mi trabajo como Eldar –Contesta Carina.
—Expulsar a todos esos sangre de bruja y las nuevas leyes que podrán en lugar a todos ellos que vivan aquí, maravilloso, nuestro señor Astado estaría orgulloso de tus nobles actos –Opina Merga —Aunque no sé porque dejaste que ese mocoso te hablara así, el sangre de bruja al que dejaste participar en la competencia, la sola idea de que lo haga ya es aborrecible, ¿por qué dejaste que te faltara el respeto?.
Merga se mostró pensativa y con cierta frustración.
—Decir que las brujas somos como “El Clero”, ese niño insolente, ¡de ser por mi lo habría aplastado lenta y dolorosamente! –Expresa su molesto sentir —Haberlo expulsado y nunca permitir que su aquelarre participe o cualquier otro sangre de bruja lo haga, nada mal, aunque fuiste algo blanda, dejaste que se fuera sin que recibiera un castigo físico, tal blasfemia por su parte es imperdonable.
—Parte de mi trabajo como Eldar, es mantenerme calmada, si razonara a la violencia pura en sí, no sería bueno para mi imagen, además, ese chico es de un aquelarre ajeno a mi pueblo, no tengo intención de convertirlo en un incidente entre aquelarres –Respondió Carina mientras mantenía su vista sobre el papeleo y su mano moviendo la pluma con los cual los rellenaba.
—Tsk… es de un aquelarre menor, todos aquellos que aceptan a los sangre de bruja como sus semejantes, no tendrán perdón alguno de nuestros antepasados, recuérdalo bien Eldar Carina, solo las brujas somos las verdaderas bendiciones del dios Astado, la única existencia creado con su mano divina, los sangre de bruja son solo errores de la naturaleza, eso es todo lo que debemos saber de ellos.
A pesar de las palabras “inspiradoras” de Merga, Carina no dejaba de tener en la mente las palabras de cierta persona, aquellas se cruzaban de vez en cuando en su cabeza, aunque al principio lo tomo como una simple broma de un agitador malhablado, fragmentos sonoros se reprodujeron en su consciencia.
“—En los transcursos de esos cambios, eventualmente la cultura moral y del sentido común que abarca actualmente Macur, también se verá inmersa, tarde o temprano brujas y sangre de bruja vivirán en comunidad y llegado ese día que podría tomar bastante tiempo, los anales de la historia nunca se olvidaran de ti –La señale con la palma de mi derecha.”
“—Oh, ¿de verdad?.”
“—Por supuesto, quedaras registrada como una de las figuras más infame en la historia de las brujas que alguna vez promovió el odio y la intolerancia entre los dos grupos.”
Pero las palabras más destacadas de aquellos fragmentos fue el siguiente…
“—Cuando alguien en las futuras generaciones de este aquelarre pregunte por “Carina Svensdotter”, la historia siempre te recordara como “la Eldar tirana y racista”, serás una antagonista marcada en los registros históricos de las brujas, como lo son las Yudaz, jeje… satírico tomando en cuenta tu posición social, adelante, aproveche y continúe con su “buen” liderazgo Eldar, pues al final todo reinado nefasto no dura para siempre.”
Un mensaje maligno a su imagen, es lo que pensaría cualquier bruja aparte de la Eldar al oír esas palabras, pero la mandamás del aquelarre sintió algo más que solo palabras hirientes, ¿una advertencia quizás?.
—Rozuel Drayt –Pensó Carina citando el nombre de aquella persona —Puede ser un sangre de bruja, pero presiento que podría volverse alguien problemático, alguien que destaque demasiado y cambie el orden natural de las cosas de Astado… no, ¿en qué estoy pensando?, ¿dudando por las palabras de un niño de 10 años?, aun así… debería estar atento a sus acciones futuras, solo por las dudas –Fue la reflexión que Carina hizo en sus pensamientos.
—Oye, Carina, ¿me escuchas? –Le pregunta Merga haciendo que la Eldar volviese en sí.
—Disculpa, me distraje demasiado con estos documentos –Se excusa ella.
—Como sea, te sugiero descansar, en dos días finalmente se llevara a cabo la gran final, nuestros representantes, contra los suyos, ¿a que no es emocionante?, en las calles oigo como el público ansia verlo –Dice una emocionada Merga.
—Sí, será un combate final bastante reñido, que gane el mejor equipo –Deseo Carina.