PERSPECTIVA: Rozuel Drayt
Había conseguido liberarme de mis ataduras y evitado un trágico destino de esclavitud, pero la máquina dueña y custodia de todo este sitio no me lo pondría fácil para salir de aquí y para empeorarlo, no tenía ni la menor idea de cómo orientarme ante un lugar al que jamás he estado.
—“Cami… no… se… guir” –La voz susurra nuevamente en mi cabeza.
Energía morada brota del suelo repentinamente a unos pocos metros de mí cerca de la única puerta de esta sala, toma la forma de una serpiente saliendo de ella por el camino derecho.
—“Si… gue… el… ca… mi… no”.
— ¿Me está diciendo “sigue el camino”? –Me pregunte en voz alta.
— ¡Ja!, en tu desesperación, te has puesto a hablar contigo mismo, siento lastima por ti –Pirer me habla a través del cristal morado de la pared.
Solo yo era perceptible a esa serpiente de energía, eso quiere decir que la voz anormal me estaba diciendo que la siguiera, ¿debería confiar?, viendo mi situación, no tengo muchas opciones. Camino saliendo de la sala para llegar a un amplio corredor con una iluminación casi moderna producto de varios cristales de Navum que hacían de foco, sobre las paredes estaban impreso escudos de la URSS a modo decorativo.
La serpiente se desplazaba hacia un sitio en concreto, seguirla era lo que debía según la voz, aun si no tenía idea de la naturaleza a la que confiaba, deposite mi pellejo en ello. Llegue hacia una parte del corredor en que el camino se vuelve un cruce con tres rumbos para escoger, por supuesto no soy yo quien escoge sino la misteriosa serpiente.
En el siguiente camino soy atacado por dos golem-ciborg del ejército rojo, me equipe con Intense Iron en “Modo Knight” y contraataque usando la AK-47, vencerlos fue sencillo. Continúe siguiendo a la serpiente quien en un cruce de tres caminos escogió la izquierda por consiguiente.
— ¡No saldrás de aquí con vida! –Declaro con un tono desdeñoso la entidad artificial.
Estaba molesto, eso quiere decir que seguía por buen camino, ¿pero a donde me llevaba esa serpiente?, ¿a la salida realmente o a otra parte?. Seguí por un buen rato, recibí la intervención de algunos golem, aunque equipado con Intense Iron lidiar con ellos era fácil, además de que luchaban contra mí con intenciones de incapacitarme y no matarme, lo que les complicaba su pelea conmigo, pero me resultaba curioso es la poca cantidad de resistencia que Pirer obstaculizaba en mi camino.
Llegue a una parte de un corredor en el que daba con unos escalones cortos que subir y arriba se encontraba una puerta bastante ancha como grande. La serpiente se coloca sobre los escalones y señala con su cola a modo de flecha la puerta de allí, luego desaparece.
Subí rápidamente hasta llegar a ella, no tenía manija y tampoco se abría empujado, estaba por exasperarme hasta que noto una palanca a mi lado. Al bajarla oigo un mecanismo interno y la puerta se abre al acto separándose en dos, lo primero en ver al cruzarla fue un denso follaje boscoso, seguido de árboles con hojas moradas y un cielo nublado, finalmente había conseguido escapar.
Planteaba el reagruparme con el resto hasta que luego me doy cuenta de algo, finalmente había hallado a la mente detrás del ejército rojo, resultando ser una inteligencia artificial consciente de mi mundo. Una maquina Trotamundos programado con un extremo y peligroso fanatismo soviético, ¿realmente consideraba reunirme con los otros?.
Me había planteado lidiar con el presunto Trotamundos por mi cuenta para evitar que mi propia identidad como tal fuera descubierta, sin embargo. El enemigo con el que lidio no era alguien sencillo, la ayuda de Allum me vendría de maravilla y Riha era un apoyo secundario que demostró ser bastante efectivo en estos recientes acontecimiento, el problema eran los demás.
Tanto Creik, Rahul, Pitt como también Alan, Tayra y Douglas, apenas siquiera los conocía, Douglas en especial era un buscador de Navum, nada tenía que ver con aventureros y tenía sus razones de seguirnos, la cosa con Tayra era similar. Exponer mi identidad como un reencarnado ante ellos era demasiado riesgo, al igual que ir solo sin el apoyo mínimo de Allum, que problemática situación.
—“Grrrr…”
Escucho unos gruñidos muy cerca, estaba tan abordado en mis pensamientos sobre el tema que no me di cuenta de que tenía a una fiera criatura a unos pocos metros cerca de mí. A simple vista parecía un oso, con la diferencia de su tamaño se compara con el de un elefante, un exoesqueleto negro con apariencia de huesos de hierro recubre su espalda, extremidades tanto superior como inferior y su cabeza, era como una armadura natural y sus garras denotaban mayor filo que no hacia envidiar a ninguna espada recientemente afilada.
Era un oso mutante, producto de una evolución forzada del horrido ambiente alrededor, una abominación como tal y puso sus bestiales ojos rojos sobre mí con el instinto de devorarme. Gaste demasiadas balas con el rifle de asalto en mis encuentros con los golem, por lo que considere esta vez usar la escopeta cerbero para manejar a un enemigo un tanto “blindado”.