Mi aburrida vida

Tener pareja

Había dicho que les contaría algunas cosas esporádicas de mi vida y casi solo les cuento mis posibles problemas mentales y traumas. Bueno, había olvidado contarles que tuve un novio. Sí, tuve en tiempo pasado, fue desde abril hasta como mediados de agosto. Como habrán notado, al escribir con un seudónimo que me saqué luego de ver mucho anime (y también porque no se me ocurrió otra cosa). A él le diremos "Toto" porque no se me ocurre nada mejor. Si se les ocurre uno, me dicen.

Bien, tal vez deba empezar por decirles que ya lo conocía desde hace mucho. Es amigo de mi hermano. Cuando se me confesó, yo no lo acepté y me alejé. También dejé de bromear para no ser malinterpretada ni darle falsas esperanzas. Luego de un tiempo, hasta mi hermano me insistió en que le diera una oportunidad y pensé: "¿Para qué mi hermano me insiste? Tal vez funcione" (no funcionó). Bueno, la cosa es que empezamos a salir, por así decirlo. Somos adultos; yo tengo 27 (pero me siento como una adolescente contándoles esto, es ridículo, tal vez porque no tengo muchas interacciones con otras personas, no sé) y él tiene 26.

Creo que la primera señal de alerta que debí notar fue que pedía constantemente atención y parecía molesto cuando no la recibía como él esperaba. Yo tengo mi hija y mi trabajo, aparte de la universidad. En ese momento sí me matriculé y no es como que no lo supiera. Aun cuando estaba con mi hija, después del trabajo, él quería que mi principal atención se dirigiera a él. Yo le advertí que eso no lo intentara porque no iba a ser mi prioridad en todo (y, pues, digo yo: bien, lo entiendo, si te gusta alguien, quieres su atención). Pero él sabía que yo estaba, a lo mejor, ayudando a mi hija en las tareas de la escuela. Solo de recordarlo me enojo.

También, cuando no podía responder a tiempo sus mensajes, Toto se enojaba y se autodespreciaba para que yo me sintiera culpable.

En los temas sexuales, le dije cuáles eran mis límites, pero no quiso respetarlos. Cuando le dije la clásica "sin globito no hay fiesta", Toto dijo: "No, pero yo no creo ser capaz de embarazar a nadie porque soy virgen". Le dije que eso no tiene nada que ver con lo otro. No llegamos a nada más allá de tocamientos por esa razón. Aun así, las cosas que yo no quería hacer las hice por él. No entraré en detalles, pero de recordarlos me da náuseas.

Otro punto es su madre, y no es que su madre no me quisiera (que no lo hacía), sino más bien el apego casi enfermizo. Está bien querer mucho a tu madre; está bien hacerle caso, pero ¿quién carajos tiene una ventana que conecta su cuarto con el de su madre? (Podría decir que es porque el cuarto se construyó después, pero ¿por qué no la tapas con bloque?). Recuerdo que una vez, después de unos tocamientos, le tocó la ventana a su madre para que le pasara unas toallitas húmedas. Qué bueno que no me dio por gemir con fuerza porque yo ni idea que ahí estaba su madre y que había una ventana. Fue muy raro y me quedé en shock un rato.

También tenía la extraña obsesión de que me fuese a vivir con él, que dizque me iba a embarazar para que no lo dejara. Yo le dije: "Maje, si haces eso, yo me largo de la ciudad y no te vuelvo a contactar en mi vida". No, no con esas palabras exactas; lo que le dije realmente fue que no iba a juntarme con él, que no pensara eso. Y él me sale con: "¿Y si mi mamá se muere y yo te lo pido porque estoy muy triste?". Yo, obviamente, le dije que no. Y él me dijo: "Pero si eso pasa, yo no creo poder seguir. No creo poder soportarlo y solo me quedarías tú. Ya sé que nos casaremos y que estaremos juntos porque ya me amas y eres mi razón para vivir". Yo le expliqué que no puede basar su felicidad en alguien más, y menos en mí. Le dije que yo no pienso irme a vivir con él y menos por lástima; que buscara otra cosa en la que basar su felicidad.

Lo que fue el último clavo del ataúd de nuestra relación fue que me llamara "Neko-kun". Obvio, fue mi nombre real más el "kun". Una cosa es usarlo en un juego o en broma, y aunque me considero otaku, no llego a ese extremo. Eso y el que se robara mi sticker de Sanji, que yo había comprado para pegarlo en mi computadora. Solo le mostré que lo había comprado y me lo arrebato, pegándolo en su celular, diciendo que ese sería el primer regalo de su novia (y el último). También, cómo se enojó cuando compré un collar que tenía tres kunais y le di un kunai a mi hermano que vive conmigo, y el otro a mi hermana. Luego compré uno para mi otro hermano y, sobre todo, cómo le molestó que le comprara a mi hija un collar que tenía la insignia del escuadrón de operaciones especiales del anime Attack on Titan y no a el.

Al final, terminamos, y él insiste en enviarme mensajes diciendo que me quiere. Yo ya le dije que no, y pues lo bloqueé.



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En el texto hay: vida, vivencias, cosas comunes

Editado: 03.12.2024

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