CAPÍTULO 18

Alexandra

y como lo había planeado, ahora estoy tendida en la cama de Aron, el rey de los vampiros, espero y esto valga la pena porque no estaré desperdiciando mi tiempo para alguien que no amo sin tener resultados, mejor dicho; su maldita muerte.

Me estiro en la cama y no siento a nadie a mi lado, tuerzo mi entrecejo y me incorporo en la cama, que diferencia tan grande; mientras Danton no me deja ni respirar, este se va como si nada.

Me pregunto ¿Qué diablos estará haciendo Danton ahora que no estoy con él? Solo espero que no esté cometiendo una gran locura digna de un desquiciado como él.

 

Danton Black

Mis nervios y mi lobo están al borde de la locura, mis sentidos se agudizan cada vez más y mi cuerpo aclama ver cabezas de vampiro rodar por todos lados mientras la sangre corre formando grandes charcos de caos.

Estrello el primer jarrón que tengo cerca haciendo que Rosita mi nana se sobre salte y se ponga alerta, no quiero que ella presencie mi caos así que suelto un suspiro y la miro intentando aparentar calma.

—Rosita estaré todo el día en mi habitación, no te preocupes, tiene el día de hoy y el de mañana...Es más, tiene toda la semana libre.

—Pero joven, me ha dejado la semana pasada libre también, no ha comido nada. Por favor ella dijo que luchará, no que estuviera mal. No me iré, tiene que comer.

—Rosita... —iba a responderle mientras masajeaba el puente de mi nariz cuando mi teléfono comenzó a vibrar.

—Hola, Alpha —dice la chica simpática y mi pieza de gran ayuda.

—¿Qué pasó? —le digo de una vez.

—quería hablar contigo de algo que me parece muy importante.

—habla rápido que no tengo tiempo, quiero respuestas, soluciones y no me las estas dando —grito.

—Su mate está aquí —me dice y me paso la mano libre por mi cabello enojado.

—Dime algo que no sepa ya —le digo aburrido.

—¿Y ella ayudara en el plan? Tengo miedo de que lo entorpezca, ha pasado mucho tiempo con Aron, no sé con qué intenciones —aprieto mi mandíbula junto a mis manos dejando los nudillos blancos.

—¿juntos cómo? —le pregunto y ella se aclara la garganta.

—Duermen juntos, y el día de hoy se la han pasado riendo y conversando.

—No te demores y ¡mátalo ya, Flor! —de la rabia estrujo el teléfono rompiéndolo en pedazos para luego lanzarlo hacia un lado.

—¿quién era, Danton? —me pregunta mi nana preocupada por mi comportamiento.

—La solución del problema y la que me va a ayudar a recuperar a mi preciosa mate...He estado luchando muchísimo por ella para perderla muy rápido.

—No me meteré más en sus asuntos mi niño, sólo espero que la niña Alexandra regrese rápido y que estés bien. Pero no que regrese y suceda una guerra.


 

Flor

Mi historia. La razón del porqué estoy envenenando a la persona que más amo, no tengo perdón por lo que le hago, pero sino está conmigo no lo estará con nadie, me siendo una completa perra descarada al ser egoísta pero no soporto verlo enamorado o atraído por ella cuando claramente a ella le da igual él porque ella tiene su mate.
Me pregunto ¿por qué? Me deja a mí, no le tengo odio a ella porque sé que ella no tiene la culpa de tenerlo a él como segundo mate.

Por eso estoy ayudando a Danton a matarlo porque no soporto verlo y no tenerlo.

Quiero contarle a ella, no sé qué hace aquí por eso la primera vez que la vi, la me asuste, según el alpha me había dicho que la quería lejos de Aron y si era posible a kilómetros y no sé qué hace aquí. Lo que creo es que algo está planeando desde la mañana pasada que me pidió hacer el café del mañana de Aron.

Esta mañana me soborno pidiendo que no contara que ella es la que prepara aquel café que beberá el rey vampiro todas las mañanas.