"De acuerdo... ¿Qué?"
Luis se quedó sorprendido.
"¿Pasa algo?", preguntó Sayori.
"Olvidé mis llaves" respondió Luis.
"¿En serio?", preguntó Sayori, preocupada.
"Sí" dijo Luis.
"¿Y ahora?", preguntó Sayori.
A pesar de la sorpresa, Luis no parecía preocupado.
"Voy a entrar a mi casa de forma poco convencional", dijo Luis con determinación.
"¿Entrar a tu casa de forma poco convencional?", preguntó Sayori, confundida.
"Tengo un método secreto para entrar a mi casa sin necesidad de una llave" dijo Luis con una sonrisa misteriosa.
"¿En serio? ¿Cómo?", preguntó Sayori.
"Eso es información confidencial" dijo Luis con un guiño.
"Bueno, nos vemos a las 3 en mi casa, ven temprano" dijo Sayori.
"Espero que no me atrape el tráfico", dijo Luis mientras se despidió de Sayori y se dirigía a su casa.
Ya eran las 3 y alguien había tocado la puerta de la casa de Sayori.
"Toc Toc Toc"
"¿Quién es?", dijo Sayori detrás de la puerta.
"Tilin"
"Tilin ¿qué?"
"El mejor meme que el internet le pudo dar a la humanidad"
Luego de escuchar una verdad objetiva, Sayori abrió la puerta.
"Hola", Luis fue el primero en saludar.
"Hola Luis, pasa" dijo Sayori, mientras lo invitaba a entrar.
Subieron al segundo piso donde estaba el cuarto de Sayori. Era un cuarto con un escritorio, una silla y una mesa en el centro de la habitación, perfecto para el trabajo que estaban a punto de hacer.
"Bueno, siéntate" dijo Sayori.
"Gracias" dijo Luis mientras dejaba su mochila en el suelo para sacar sus cosas.
El trabajo iba bien, Sayori se había ido a traer unas galletas que había preparado para la ocasión, así que Luis estaba solo en su cuarto.
"Vaya, de pasar el día entero en mi cuarto a ir a la casa de una bonita chica, la universidad es genial" pensó Luis.
Sayori volvió con la bandeja de galletas.
"¡Llegué!"
"¡Oye! Huelen muy bien"
"Sí ¿verdad?"
Sayori se acercaba a la mesa cuidadosamente pero un obstáculo en su cuarto hizo que tropezara.
"¡Ah!"
Sayori estaba a punto de caer en dirección a Luis, Él se encontraba tranquilo mientras miraba cómo ella estaba a punto de caer encima de él.