Mi amigo de la infancia es un sinvergüenza

¡NO ALICIA YA LA CAGASTE!

"¡NO ES LO QUE PARECE!"

Luis tapó el teléfono nuevamente con sus dos manos.

"¿No es lo que parece?"

Alicia estaba detrás de Luis.

"Ah, eres tú"

"Sí...."

Alicia tenía una cara triste.

"¿Necesitas algo?"

"¿Puedo sentarme aquí?"

Con bandeja en mano y una cara llorosa, Alicia pedía asiento.

"Okay, pero ¿por qué esa cara?"

"El grupo con el que tenía me echó, le caí mal a una chica y ella me separó de los demás"

"¿Qué tan parecidas eran ideológicamente?"

"Iguales"

"Pues era de esperarse, solo hay víboras allí"

"¿Puedo sentarme?"

"Okay"

Alicia se sentó al lado de Luis y este puso el teléfono de Erika de nuevo en su lugar. Al cabo de unos minutos, Erika volvió y saludó a Alicia. Naturalmente, agarró su teléfono para ver si tenía notificaciones.

"Oye, Luis, ¿ese no es tu teléfono?"

Dijo Alicia al ver que Erika tomaba el teléfono.




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