Mi amigo de la infancia es un sinvergüenza

Noche en la discoteca

El chico al escuchar a Luis salió corriendo, empujando a todo aquel que esté en su camino.

"Hijo de perra..."

Luis veía como las otras personas que estaban dispersadas alrededor de la chica lo seguían.

...

Cuando parecía que ellos se habían ido, Luis volvió a ver a la chica.

"¡Hey! ¿Estás bien?"

...

La chica seguía teniendo la misma mirada perdida, pero parecía poder mantenerse de pie.

"Mierda"

Luis agarró la mano de la chica e intentó llevársela. Sorprendentemente, parecía poder seguir. Luis llevó a la chica a un asiento de la discoteca para sentarla.

"¿Y ahora qué hago?"

"Ohhhh, Lucía"

Una voz femenina se escuchó al frente de ellos.

"Hola chico, ¿estás ligando con mi amiga?"

Dijo la chica con un tono burlesco.

"¿Viniste con ella?"

"Sí... ¿Por?"

"Mira tipa, acaban de drogar a tu amiga, ¿dónde carajos estaban ustedes?"

"¿Qué? ¿Drogarla?"

"Sí, mírala"

La chica junto con sus amigas empezaron a ver y pasar la mano por la cara de Lucía.

"¡Oh Dios mío!"

Luis se paró del asiento.

"La próxima vez anden juntas, a menos que quieran terminar como ella"

Luis estaba apunto de irse, pero se detuvo repentinamente.

"Mierda"

Él volteó.

"Hey tú, ¿tienes el número de sus padres?"

"Ah, yo, yo, tengo su celular"

"Okay, llama a sus padres"

Luego de que las amigas de la chica llamaran a sus padres, Luis esperó a que ellos vinieran para llevarse a su hija. Luis tuvo que explicarle la situación a sus padres, que agradecieron a Luis por salvar a su hija.

"Vaya teatro..."

Luis estaba volviendo a entrar a la discoteca. Habían pasado unas horas hasta que los padres de la chica vinieran a recogerla y él, en ese momento, no tenía cabeza para nada.

"Ojalá que-"

Luis se dio cuenta de algo.

"¡Mierda! ¡Karol!"




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