Mi amigo de la infancia es un sinvergüenza

Dime...

La sala se sentía pesada, ambos, Sayori y Luis, se encontraban sentados en el sofá. Sayori, con la mirada perdida, se encontraba cabizbaja y con los ojos aún llorosos.

"Acabo de ver a mi novio besándose con otra chica...", dijo Sayori con la voz temblorosa.

"No sabes cuánto lo siento", respondió Luis.

"Soy una tonta...", dijo Sayori interrumpiéndolo.

"No, tú no tienes la culpa-", intentó decir Luis.

"Lo sé, pero no puedo evitar sentirme así", dijo Sayori mientras ponía sus manos en su cara para cubrir sus sollozos.

"Todos los 'te amo', todas las caricias", dejó caer las manos.

"Dime, Luis ¿Todo eso era mentira?", dijo Sayori con lágrimas en los ojos, mirando a Luis en busca de una respuesta.

Luis sintió un nudo en la garganta.

"Lo siento tanto", respondió Luis mientras abrazaba a Sayori, ambos llorando.

"Snif... snif..."

Sayori empezó a llorar en los hombros de Luis mientras se sujetaba de él con fuerza. Luis empezó a darle palabras de consuelo con una voz algo rota por el nudo en su garganta y a acariciarle la cabeza para que dejara de llorar. Ambos se pasaron las siguientes horas llorando.




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