Joel

El lugar estaba bastante alejado de la civilización y era enorme, llevabamos una maldita hora aquí y nada que llegaba el mexicano ése, a las 12:00 todos fueron al gran salon y tomaron asiento en la mesa, Steve tomó su puesto, la silla principal algo así como la silla del rey, yo me senté a su lado y esperamos a que todos tomaran asiento

-Bueno señores bienvenidos a esta importante junta, les presento a The Black Angel y su socio The Blue Demon 

Todos se levantaron nos saludaron y volvieron a tomar asiento

-El señor ya esta aquí

Un hombre entró y se sentó en la silla que estaba al otro lado de Steve

-Señor es un placer conocerlo

-Igualmente

-Soy Bruss pero todos en el narco me llaman El mexicano

-Yo soy Steve

-Si el gran The Black Angel 

-Así es, éste es mi hermano Joel

-Un gusto mexicano

-Igualmente Demonio azul

-Bien señor Steve me gustaría comprarle toda la merca que trajo

-¿Le parece si vamos a verla y usted mismo prueba la calidad de nuestra mercancia?

-Claro que si, Brann vamos con los señores

Fuímos hasta el sótano donde nos habían guardado la mercancía, el mexicano abrió uno de los paquetes y probó la merca

-Es la mejor que he probado en mi vida, la quiero toda, Brann ve con Joel y busquen todo el dinero

Fuí con el tal Brann a buscar el dinero, eran 6 maletines y pesaban bastante, volvímos al sótano y pusimos los maletines encima de la mesa

-Por favor señores cuentenlo, está completo pero no quiero desconfianzas así que haganme el honor

Conté todo el dinero con Steve y estaba completo

-Mexicano fue un placer hacer negocios contigo

-Igualmente Steve, pero no tan rápido, ten ésta es mi tarjeta nos mantendremos en contacto quiero más kilos de éstos muchos más

-Esta bien

Tomamos el dinero y nos fuímos, llegamos a casa a las 3:00 a.m.

-Joel lleva el dinero a la caja fuerte ya sabes que hacer, saca la parte de nosotros y la de ellos la dejas en los maletines

-Esta bien, que descanses

-Tu igual

Steve se fue a descansar y yo fuí y hice lo que me pidió, cerré y activé la alarma fuí a mi habitación y me acosté en la cama, no tenía ni pisca de sueño pero debía descansar bien mañana debemos entregar ese dinero y luego iremos a ver al viejo.