Mi Bollito.

XXII.

Cuándo entro a mi casa, mis padres están muy alterados de un lado a otro y mí hermana Ariadna, está acurrucada en el sillón llorando, alza su mirada y cuándo me ve sonríe y luego me mira molesta y sube a su habitación corriendo.

Mis padres, se han dado cuenta de mí presencia y se que empezarán a gritarme, sorprendentemente, ambos corren a abrazarme y yo les devuelvo el gesto y así permanecemos un momento, hasta que me atrevo a hablar.

-Mamá, Papá tenemos que hablar, le digo y ambos asienten y nos sentamos en el sofá.

Empiezo a sentir mi corazón latir muy fuertemente y mis manos sudan, bien aquí voy.

- Mamá, Papá les pido me escuchen y no digan nada hasta que termine porfavor, ambos asienten con la cabeza. - Bien, antes que nada quiero pedirles perdón en verdad siento mucho mí comportamiento de los últimos meses, no he valorado el esfuerzo que hacen por mí, he sido egoísta y mala persona en verdas lo siento, quiero cambiar y lo haré pero para eso necesito su perdón, ¿Me perdonan? Sobre todo tú madre lo siento en el alma todo lo que he hecho, les confienso llorando a ambos, me miran y mí Mamá llora y me abraza me mira y y me dice, - Pequeña te perdono, por supuesto me alegra saber que has recapacitado y quieres cambiar, Te amo hija y desde hoy empezaremos de nuevo, Te perdono.

La abrazo y mi Padre me dice, - Claro que sí hija, solo necesitabas controlar tú carácter, te perdonó hija.

Los tres nos abrazamos y mi madre me pregunta, - Kiara, ¿Qué ha pasado con la chica?

- Nada, lo hemos solucionado Romina y yo ahora somos amigas, le digo.

- ¡¡Qué linda niña!!, invitala a comer, quiero conocer a tú amiga, dice mi madre.

Me sorprende esa propuesta, pero es buena idea, se qué a Romina le encantará la idea.

- Claro, le diré y seguro acepta, le digo sonriendo.

- Si trae a tú amiga, dice mi padre y haremos barbacoa.

- Genial comeremos delicioso, es más que invité a su família este domingo, ¿Deacuerdo?, dice mi madre.

- Bien, ten por seguro que sí vendrán, le digo emocionada a mí madre, Bien madre tengo que irme me bañare y vere como estar comunicada con los maestros.

- Respecto a ese incidente querida, estás castigada por un mes sin salidas y sin permisos ¿Entendido?, me dice mi madre.

- Sí madre, te entendí perfectamente, ahora me voy, le doy un beso y a mí padre y subo a mí habitación rápidamente.

Antes de entrar a mi habitación me dirijo a la de Ariadna, toco tres veces, y una voz triste me dice, -Entra...

-Ari, hola, ¿Qué pasa?, le pregunto tímidamente.

Ella no responde, así qué me acerco un poco más pero ella me detiene, -Hasta ahí no te acerques más a mí.

-Solo quiero hablar, lo prometo, después me iré, ¿Está bien?, le pregunto.

-Bien, puedes acercarte, me dice.

-¿Porqué estás molesta conmigo?, le digo.

-Todavia lo preguntas, ¡Qué tonta eres hermanita!, me dice molesta.

-Oye yo no soy adivina, y además quiero hablar bien contigo y no me la pones fácil, le confieso.

-Bueno para empezar, lastimaste a una chica que por lo que he visto es muy linda, después te escapas de casa y creí qué podía pasarte algo malo y por último llegas y me preguntas ¿Que me pasa?, eso es tonto e inmaduro hasta para ti, me dice y termina llorando.

La abrazo y me dice, -No me toques Kiara.

-Esta bien, te entiendo Ari, me fui porqué era mucha presión para mi, pero me he dado cuenta que he hceho mal, esta mal huir de los problemas, y en cuanto a la chica, sí ella es buena y muy linda conmigo me ha disculpado sin condiciones, en verdad perdón, quiero cambiar y lo haré, ¿Me perdonas hermanita?, le digo llorando.

-Esta bien, te perdono, pero ya no vuelvas a huir tuve miedo de que te pasará algo, me dice y me abraza.

Le correspondo el abrazo y le doy un beso en su coronilla, y Ariadna me dice, -¿Me cambiarias por tú amiga?

Debo admitir que su pregunta, me ha dejado sin respuesta, asi que solo le respondo lo primero que viene a mi mente, -Ari, eso jamás va a pasar ella solo es mí amiga y tu mi hermana, Te quiero a ti porqué eres mí hermana, ¿Entendido?

-Esta bien Kiara, pero ¿Entonces yo no puedo querer a una amiga?, me vuele a cuestionar Ariadna.

-Mira seré sincera contigo Ari, por ahora no tengo una respuesta a esa pregunta, pero ten por seguro que te la voy a responder, por ahora solo conformate con que te quiero mucho porqué eres mi hermana, ¿Okey?, le digo. Ella sólo asiente, despues de unos minutos más ella esta mas tranquila la dejo pues ha hido a ducharse y yo ahora por fín me dirijo a mi habitacion.

 

Cuándo por fín entro me deshago rápidamente del uniforme, y entor a la ducha, enserio jamás en la vida me había caído tan bien una ducha, salgo de ella, y me coloco una pijama, por hoy ha sido todo estoy muerta, asi que me recuesto en mi cama, cuando recuerdo que debía de hablarle a Romina.

-Hola Romina, ya no me hablaste, le digo.

-Lo siento te hiba a llamar, pero preferí no hacerlo sabía que estarías ocupada, lo siento Kiara, me dice.

-Esta bien Romina, ¿Que haces?, le pregunto.

-Termino una tarea ¿Y tu?, me cuestiona.



#33835 en Novela romántica
#8539 en Joven Adulto

En el texto hay: tristeza, amor amistad humor

Editado: 26.10.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.